Alexia
La lluvia había incrementado al igual que mi miedo, los truenos eran más fuertes y mi corazón corría errático en mi pecho, los recuerdos comenzaron a invadirme por completo, me veía de pequeña pidiendo que alguien me sacara de aquella casa inundada, pero eso nunca pasaba
Me cubrí los oídos deseando que aquel ruido tan estridente desapareciera, trate de ignorar todo a mi alrededor, no podía con esto, tenía tanto miedo que creía que en cualquier momento mi corazón dejaría de latir, odiaba los días lluviosos, pero fuera de los truenos, amaba ver el agua correr entre los cristales de las ventanas. Tenía mucho frío y hambre, esto había sido tan mala idea si no me hubiera ido de esa casa esto no me estuviera pasando, pero no podía con la forma en la que Noa me miraba a diario, yo no le había hecho nada, ni siquiera le había dicho algo ofensivo, no entendía como es que las personas sin saber nada de mi podían llegar a odiarme, eso era lo que los ojos de Noa me decían, cada que me miraban, solo odio no había más.
—Estoy bien, estoy bien, estoy bien — me repetía a mí misma una y otra vez tratando de calmarme — todo pasara, todo pasara
Otro trueno resonó y mi grito también, necesitaba encontrar otro lugar o moriría de hipotermia, los pequeños pedazos de hielo golpeaban mi cuerpo, era necesario que fuera a otro lugar en el cual poder estar, al menos solo por esta noche
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
Noa
Mi hermana durante todo el transcurso que llevábamos me había llenado la cabeza de una sarta de groserías y de reclamos por haberla tratado tan mal, por haber hecho que se marchara, y muchas cosas más.
—Ella se salvó sabes Noa, su padre quiso abusar de ella, cuando solo era una niña — mi cuerpo se tensó por completo cuando esas palabras abandonaron sus labios, trayendo el recuerdo de Camila a mi mente — ese maldito es un asqueroso que gozaba de torturarla, que deseaba destruirla
No dije nada no solo porque no podía hacerlo, el nudo que había en mi garganta cada vez se hacía más grande, ella se comportaba así porque él la tenía amenazada, no sabia que tanto le había hecho, durante todos estos años, si a Camila la había destruido en unos cuantos días, no me imaginaba como de rota podía estar Alexia
Apreté tan fuerte el volante hasta que me dolieron las manos, ese bastardo, ni siquiera porque es su hija la trata como tal, basuras como el no merecían existir en este mundo
Vagos recuerdos de una chica en mal estado sanando nuestras heridas vinieron a mi memoria, era ella, la chica que había cuidado de nosotros y que incluso dejaba de comer para alimentarnos un poco con su pequeña porción, era ella, quien me salvo fue ella, quien me ayudo a salir de ese lugar era ella.
Me sentía muy molesto conmigo mismo, yo la había tratado muy mal culpándola por algo que no había hecho en vez de darle las gracias...
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
Alexia
En un arranque de locura y entrando realmente en pánico al ver a mi padre parado delante de mí riéndose, salí de aquella casucha abandonada y corrí como loca, deseando alejarme por completo de ese maldito ser
Sentía que mis piernas en cualquier momento iban a fallar, estaba agotada pero la risa de mi padre aun me seguía. No sabía cuánto había corrido y mucho menos sabia en donde estaba, jamás me había alejado tanto de mi casa, ese bastardo no me dejaba salir, lo odiaba con todo mi corazón el me había arruinado la vida en miles de formas, me había convertido en una persona desconfiada y mi auto estima estaba por los suelos, ante los ojos de los demás me sentía pequeña, como una basura y odiaba reconocer que quizá nunca podría cambiarlo
Las lágrimas se mezclaban con la lluvia y eso lo agradecía en estos momentos me debía de estar viendo tan patética, y también me veía como una loca que acababa de escaparse del manicomio, con estas pintas que traía encima
Mi cuerpo se impactó con otro, haciéndome caer al piso, me levante tan rápido como pude e intente correr, pero unas manos me tomaron de mis brazos, él monstruo estaba aquí, me había encontrado
—¡NOOOO! ¡SUELTAME MALDITO! — grite con todas mis fuerzas mientras me removía con violencia para soltarme de su agarre — NO QUIERO REGRESAR A ESE LUGAR
—¡HEY CALMATE! — una voz gruesa me hizo estremecer
—No me hagas daño, por favor — susurre casi sin voz — por favor ya no más
—Alex soy yo Noa — el tono de su voz había disminuido
Sin impórtame el hecho de que me odiara lo abracé tan fuerte como pude, y más aún cuando otro trueno resonó y el relámpago iluminó todo a nuestro alrededor
—No me dejes sola — solté un sollozo — por favor, no me dejes, no quiero volver a ese lugar
—No te dejare — me aseguro — jamás dejare que vuelvas a ese lugar
Esas palabras me hicieron sentir segura, de una forma realmente sorprendente, jamás en mi vida me había sentido tan protegida.
Quizá Noa seria mi salvavidas, deseaba que el fuera quien me salvara o que aquel chico golpeado a quien le compartía mi poca comida, me salvara, así como yo lo hice en algún momento.
Solo quería a alguien que me salvara...
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
Noa
La manera y las condiciones en que había encontrado a esta chica, me hacían ver un poco de lo que ese hombre le había hecho, verla tan frágil me hizo saber que jamás nadie la había protegido, pero eso se iba a acabar esta noche, desde ahora en adelante yo haría lo posible para que nadie volviera a herirla.
ESTÁS LEYENDO
Siempre Serás Tú (De la saga Tu #2)
RomanceMi vida sólo giraba al rededor de ser el siguiente al mando de la mafia luego de que un bastardo matara a la persona con quien quería pasar mi vida entera, pero todo cambia cuando miro sus ojos por primera vez, fue como si el universo me hubiera dad...