capítulo 14

1.5K 105 6
                                    

Alex

Una presión en mi cintura me asustó por un momento, no recordaba muy bien lo que había pasado, siempre que una crisis nerviosa me atacaba olvidaba fragmentos de lo que pasaba a mi alrededor, así que por un momento me aterre mucho, el miedo me inundó por completo mi cerebro me hizo creer que quien me estaba abrazando era el que se hacía llamar mi padre. Me separe de él y me arrincone en la cama sintiendo como mi cuerpo temblaba como gelatina, tenía mucho miedo, era escalofriante las sensaciones que en ese momento estaba sintiendo, no quería que ese señor me volviera a tocar.

Abrace mis rodillas creyendo estúpidamente que así podría protegerme, de quien fuera que estuviera en la cama

—Hey tranquila — alguien susurró cerca de mi oído — tranquila estas a salvo, nada te pasara

Ma abalance a sus brazos y me escondí en su calor sintiendo lo reconfortante que era, me había sentido tranquila solo al escuchar su voz, Noa era con quien me sentía en casa aun cuando el me odiara

—Lo siento, lo siento tanto — sentía que tenia que disculparme por haberme ido

—No tienes por qué pedir perdón — hablaba con cautela — pero si vuelves a huir esta vez si te daré tu merecido — esta vez soltó con un poco de burla

Me separe un poco de el para mirarlo a los ojos, esos ojos tan intensos que desde que llegue había notado tan distantes y ahora me miraban tan diferente, era como si algo dentro de Noa hubiera cambiado

—Tú eras el chico — susurre recordando su rostro

Fue lo único que pude decir antes de que la hermana de Noa apareciera como un huracán y me arrancará de los brazos de este...

—Me alegra que estas bien — me miro para luego besar mi mejilla

El entusiasmo con el que me hablaba me hacía sentir bien, sin lugar a duda había encontrado quizá un hogar aquí, sólo esperaba que nada volviera a ser como antes, no quería regresar a esa vida y ver como poco a poco se consumía, deseaba ser feliz y dejar todo atrás

—Emily basta vas a lastimarla — le advirtió su hermano

—Em, no puedo respirar — me queje un poco

De inmediato me soltó y me miro con ojos de disculpa para luego reír como loca. En verdad que no la entendía yo era una total desconocida y ella me trataba como si fuera su conocida de años, incluso me trataba más como familia que mi propia familia, aunque mi concepto como tal no era tan bueno que digamos, solo mi madre que hora está muerta me trataba con amor

—Bueno ahora que ya estás aquí — se alejó de mí y me dio una fuerte bofetada — eso es por haber escapado y espero que ya no vuelvas a hacer, deja de ser tan cabezota, o yo voy a darte una golpiza que no olvidaras

Me quedé anonadada por la forma en la que me había golpeado eso sí que había dolido y en cierto punto entendía por qué había sido, ella me dio su confianza y yo sólo me fui como si nada y como si ellos no me hubieran aceptado en su familia como una más, había sido demasiado mal agradecida

—Lo siento mucho Em, es sólo que Noa me incomodaba bastante, me hacía sentir como un deshecho humano — la mire apenada por estar aceptándolo delante de él

Emily miro mal a su hermano y luego a mí sólo me sonrió

—El suele ser así de sombría, pero en realidad no es más que un caramelo, bueno un caramelo de esos duros que tardas siglos en comer pero que son dulces — rio nuevamente — solo dale tiempo

Se rio como loca logrando contagiarme a mí también, esta chica en verdad era fuera de serie

—Enana estúpida no te paces — le advirtió Noa un poco divertido

Siempre Serás Tú (De la saga Tu #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora