Lucille. √√

Cincuenta Y Cuatro.

Lucille bufo frustrada y pateó una de las sillas de ahí. ¡Ella no podía estar Celosa!, ¡No de Carl!.

—Lucy... ¿Estas Bien?.—Llegó Leo detrás de ella y la tomó por los hombros.

—¡Jodete!.... No, Lo siento. Leo, Estoy Estresada, Mucho.—Le Sonrió con obligación.—Leo, ¿Estas Bien aquí?.

Leo Fruncio el ceño;—¿Como que si estoy bien aquí?.

—Olvidalo.—Sonrió.—¿Donde esta Carl?.

Leo Sonrió Con Picardía.—Así qué... Carl, he.—Dijo picándole las costillas a Lucille, Jugando.

—¡Callate Leo!, Sólo... Quiero ver a la bebé.—Sonrió Triste.

Leo le sonrió.—Esta afuera.—Lucille corrió a la puerta, Dispuesta a ir por Carl.—¡No Hagan nada malo ahí arriba!.

Lucille se dio media vuelta y le mostró su dedo de en medio. Tomó a Carl por los hombros y le sonrió.

—Hola Lucy.—Sonrió y se acerco a besarla, pero ella se alejo un poco. Rick los miraba a lo lejos y ella lo sabía, Carl le besó la mejilla.

—Quería ir a ver si podíamos ir a ver a tu hermana.—Sonrió un poco avergonzada.

—¿A Mi Hermana?, ¡Oh, A Judith!.—Sonrió, Tomo la mano de Lucille y la dirigió hasta la habitación de Judith.

Sí, Tenia su propia habitación, Lo cual es raro, pues es una bebé, ¡Ni Siquiera camina!, y la dejan sola en su pequeña habitación, Sí, Tiene cómo dos pequeñas cámaras y aparatos de sonido, Y todos se dan cuenta si despiertan gracias a estos aparatos.

Llegaron a la habitación, Judith estaba ahí sentada, mirando todo a su alrededor, Quizá acababa de despertar y por eso no estaba llorando, Que era lo más Lógico.

—Es Muy Linda.—Sonrió y la tomó en brazos con delicadeza, Lo delicada qué había sido años atrás se había ido en cuánto su madre murió, Jamás volvió a ser la misma Lucille qué su madre Quería, Pero es que ella ya no sabia como volver a ser aquella Lucille de la que su madre estaba orgullosa. Toda su alma se había llenado de obscuridad, Tristeza y coraje. De eso estaba hecha Ella. Y No eran los mejores materiales del mundo, Al contrario. Quería volver a antes, Cuando todo iba -Por Primera vez-, Bien en su vida, Todo estaba en equilibrio y todo era felicidad y alegría. Pero su vida jamás estuvo bien, Siempre hubieron problemas en ella, Y si no los había físicamente, Estaban Emocionalmente. La escuela no es el mejor lugar para una niña positiva y alegre, Con Miedo de dañar a las personas y Con Problemas del manejo del control de la ira. Siempre fue así, Nunca supo calmarse cuando se enojaba y eso le asustaba tanto, Aquellos “Ataques” de irá le hacían daño también a ella, Alejo a demasiadas personas de ella por aquellos “Ataques”.

Y Nunca supo relajarse, Ahora menos, Los Ataques se habían calmado demasiado desee que su padre Murió, Ahora solo le daban por la noche, Y de la impotencia y coraje, Lloraba.

—Hola, Judy.—Sonrió tocándole una mejilla a la bebé, Quién sonrió.

—¿Judy?.—Preguntó Carl sonriendo.

—Si, Judy. Tú me dices “Lucy”, Y yo no puedo llamarte “Carly” porque es nombre de chica.—Rió ligeramente, Contagiando a Carl.

—¿Te enojaste?.—Murmuró Carl, Ella lo miro con el ceño fruncido.

—¿Porqué me enojaría?.

—Cuando Enid, Cuando llegamos y...—Tartamudeó Nervioso, Le daban nervios que Ella se enojase y no le quisiera hablar, lo cual era completamente estúpido, porque ella le estaba hablando ahí y ahora.

—Ah, No. ¿Porque debería de Enojarme?, Sólo somos amigos, ¿No?.

—¿Amigos?.—Ella asintió.—¿Qué?, Los Amigos no se besan, Los amigos no se quieren, Los Amigos no... No somos solo amigos.—Dijo abrumado.

—Lo mismo digo, Enid también es solo tu amiga, ¿No es así?, Y Los Amigos no se besan.—Se paro de su lugar con Judith en brazos.

—Pero es diferente...—

—No, No lo es, Ah, Claro, La diferencia es que yo no me he acostado contigo y ella si.—Sonrió con sorna y salió de la habitación.

Quizá, Un Ataque de irá vendría a ella,  ¿O de Celos?. ¡Maldición!.