En tus sueños(Wonho Monsta x)

Capitulo 4

Me desperté mire a mi alrededor asustada porque esta no era mi habitación, búsque con mi mirada el propietario que usaba este cuarto pero no había rastro. Recordé que ayer estaba con Wonho...¡claro es su habitación! entonces me levante dirigiendome al salón, había un cuerpo dormido en el sofa, yo estaba demasiado en shock hasta que recordé lo que pasó.

Me quedé observando como dormía, el comenzó a abrir los ojos y cuando me vió se asusto.

-Sun Hi no me metas esos sustos mujer.-Se resfregó los ojos.

-Lo siento.-Me avergoncé, todo esto me parecía incómodo.

Entonces en un movimiento me puso su mano en mi frente yo me quede inmóvil.

-Se te bajó la fiebre.-Apartó su mano.

-¿E-estuviste cuidandome?.-Pregunté con un leve sonrojo en mis mejillas.

El sonrió.-Si, no soy tan malo Sun Hi.-Me tocó la mejilla y se acercó a mi oido.- me encanta cuando te sonrojas.

Le empuje lejos de mi más roja aún, que sea un idiota no quiere decir que no sea sexy es un idiotasexy lo admito.

-No te aproveches de la situación.-Dije con los ojos cerrados y roja de la verguenza.

Soltó una carcajada.-¿Quieres desayunar?

Asentí como respuesta.

-Vale, sientate y no te muevas.-Me ordenó entrando el a la cocina.

Me senté en uno de los taburetes cerca de las encimeras.

-Vale sargento.-Bromeé.

-Por primera vez te veo siendo amable conmigo.

-No soy tan mala Wonho.-Recalqué las palabras dichas anteriormente.

-Nadie dijo que lo fueras, solo que te haces la difícil.-Me guiñó un cojo colocandome la taza de café en frente de mí y las tostadas.

Él se apoyo sobre sus codos en la barra mirandome expectante.

-Me incomodas, mirandome así.-Tomé la taza de café dandole un pequeño sorbo.

-Es que eres un desastre por las mañanas.-Se burló con una sonrisa de oreja a oreja.

Le miré con odio.-Oye guapo, que tú tambien deberías de mirarte a un espejo.

-Lo sé, ya me miro y sé que soy hermoso.-Me tocó la nariz juguetonamente.

Este tio me quería matar, no había que negarlo hasta por las mañanas era guapo.

-Espacio personal.-Dije tocandome la nariz asqueada.

-Lo siento, pero eso si que no puedo cumplirlo.-Se lamió los labios seductoramente.

-Tsk, yo cumplo con lo mio tu tambien con lo tuyo.-Continué comiendome el desayuno.

Rodeó la encimera saliendo de la cocina para apartar mi desayuno y colocarme encima de ella. Estaba posicionado entre mis piernas, tragué duro me estaba asustando.

Se acercó a mi cuello para luego acercarse a mi oido.

-Ya lo cumplo, pero las reglas tengo que saltarmelas.-Me sururró.-Me provocas mucho.

Yo le empuje lejos de mí.

-Aparta, ¿no entiendes el espacio?.-Dije bajandome de la encimera y colocandome detrás de la barra.

Comenzó a reirse.-Estoy interesado en ti Sun Hi, ya te lo dije.

-Pues desinteresate que no vas a llegar a nada, con esto.-Me señalé de pies a cabezas.

-No puedo, porque esto.-Se señalo.-no parara hasta que tú caigas.

-Yo acepte que quieras conocerme así que, esto es lo que hay.-Sonreí sarcástica.-y te guste o no, es difícil.

-Lo imposible atrae te lo repito.-Me guiñó un ojo.

Se fué dejandome con la palabra en la boca, no me interesaba para nada ser algo suyo, esto es interés puro él cumple con lo suyo y yo con lo mio. Aunque de verdad hubiera preferido buscarme yo el acompañante y no dejarselo en manos de Dae, vale se que estoy siendo egoista, pero es que un chico como él nunca jamás me atrevería acercarme. Es como  que solo esta interesado en tenerme por capricho y luego, una vez que me use me tire. Además que no me cae bien es un capullo con patas, pero con algo de corazón.

Fuí a coger mis cosas para irme de allí, hasta que Wonho salió vestido con traje.

-¿Dónde vas?.-Preguntó.

-A casa.-Contesté obvia.

-Yo te llevo, ayer estabas delicada no quiero que te pase algo por el estilo otra vez.

Asentí.

Me llevó a casa, pero todo el trayecto estuvo en silencio. Cuando fui a salir del auto.

-Gracias Wonho, por cuidarme ayer.-Dije a punto de salir pero él me agarró del brazo.

-No tienes que darmelas, me preocupas Sun Hi.

No sé pero en ese instante algo me atravesó, nunca nadie se preocupaba por mí. Pero debería de salir de este trance esto son solo trucos para acercarme más a él.

-Aja, adiós.-Dije para luego soltarme e irme a mi casa.

Aún me queda pensar que es lo que este chico trae entre manos, sus palabras aún no me las creo del todo. Todo comenzó siendo un trato hasta que este lobo quiso jugar a otras cartas, y si ¿se aprovecho de la situación?

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LO SIENTO POR TARDAR TANTO LAS CLASES COMENZARON Y ES MUERTE PARA MI PERSONA.