Capítulo 6

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Hermione se encontraba devuelta en su hogar, el viaje le había parecido más largo de lo usual. Aunque durante el viaje tuvo que hacer bastantes esfuerzos para que Ginny no provocara un escándalo por todo el tren.
Recordó el momento en el que se lo dijo a su amiga que se había despedido de Snape dándole un beso en la mejilla, mostrándole al igual el brazalete que le había regalado el hombre. Ginny tuvo una tal cara de estupefacción mezclada con un total asombro, no se lo podía creer, y sigue sin creerselo.

Se instaló en su habitación colocando su maleta en su cama. No le apetecía mucho desempacar ahora, así que dejó sus pertenencias intactas y bajó a la cocina a hacerle compañía a su madre. Su padre se encontraba sentado en la sala leyendo el diario, el cual lo veía con el ceño fruncido.

Al acercarse a su madre echó un vistazo a lo que se estaba cocinando en la estufa. Se veía delicioso.
Su madre, al notarla, le dio una cálida sonrisa.

- Hola mi niña. Llegas en buen momento, la cena estará lista en unos momentos.

- Bien, no puedo esperar.

- ¿ Y como fue este año cariño, aprendiste mucho ? - le preguntó limpiándose las manos con un trapo.

- Por supuesto mamá, no volvería aquí de no ser así - sonrió divertida.

Su madre sonrió de igual manera y la vio detenidamente.

- ¿ Segura que es todo ? Parece que hay algo más - le vio pícaramente y le dio unos leves golpes con el codo.

- ¿ Que quieres decir ?

- Mh, no lo sé, tal vez ... ¿ Amor ?

Su padre, que estaba dando un sorbo a su café, se atragantó ante la mención de su esposa. Aunque no lo escupió, tosió sonoramente intentado hacer que se le pasara.

- Querida ¿ no crees que es algo apresurado ? - dijo su padre recuperándose y dejando de toser.

- Jamás es apresurado si se trata del amor. ¿ Recuerdas nuestros tiempos ? - dijo la mujer nostálgica mente.

El hombre le sonrió y volvió a ver el periódico. Hermione se sintió ligeramente nerviosa por el hecho de que su madre descubriera que estaba enamorada, aunque eso no le parecía malo, pero no sabía como reaccionaria cuando supiera de quién estaba enamorada. Entonces, decidió actuar lo mas natural posible.

- Mamá, papá tiene razón, creo que es demasiado pronto para eso. Además no tengo tiempo para eso, tengo que pensar en mis labores - su padre la miró orgulloso y sonrió levantando una ceja a su esposa.

- Bien, bien - se encogió de hombros y volvió a revisar la comida -. Pero algún día quiero tener nietos ¿ me oíste ?

Los tres rieron por el comentario de la mujer y dejaron la conversación por la paz.

Hermione sonrió, su madre no lo dejaría así, sabia que muy en fondo intuía algo, y que tal vez sabia que solo lo había negado por su padre. Tendría que descubrirlo algún día, y no sabia como se lo tomaría.
Pero aún así, ella no tenía porque ocultar sus sentimientos.


En el castillo de Hogwarts, mas precisamente en el despacho del director, un profesor de pociones caminaba de un lado a otro nervioso, pues no sabía qué le pasaba y no hallaba ninguna respuesta dentro de su prisión a la que llamaba mente. El director sólo lo miraba sonriendo paternalmente.

- Muchacho, ¿ qué es lo que te está inquietando ?

- Precisamente eso, no lo sé ... - dijo Severus parando al fin de caminar -. Bien, seré sincero contigo ... puedo confiar en ti ¿ no ?

Insufrible AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora