Insufrible Amor

Capítulo 12

Hermione corría sin parar con lágrimas nublándole los ojos, se sentía realmente mal, pensaba en lo que acababa de hacer, probablemente la peor decisión que había tomado. Aunque no se halla dado tiempo para comprobar si su profesor en realidad se había molestado con ella por el beso, era la reacción mas lógica para ella.
Se reprendía mentalmente por la estupidez que ella creía que había echo, aunque no sabía que había dejado abandonada la mejor respuesta de su vida.

Se abrazaba a sí misma por el intenso frío que se sentía, aunque al salir despavorida de la torre de Astronomía sentía su cara arder de la vergüenza que había sentido, aunque ahora se le había bajado totalmente y le dio paso al llanto.

- ! Hermione ! Se te olvidó tu abrigo, creí que... - apareció Ginny con el abrigo negro de Hermione en un brazo y el de ella ya puesto, pero al ver a Hermione dejó de hablar y se acercó a ella preocupada -. Pero Hermione, ¿ que pasó ?

- No quiero hablar de eso Ginny, yo sólo... Me iré a dormir, estoy muy cansada -. Dijo la castaña para tomar su abrigo, murmurar un gracias y caminar apresuradamente en dirección hacía su dormitorio.
Ginny sólo se quedó allí plantada, esperando un poco más y que Hermione se calmara un poco, para luego ir con ella y que le explicara qué había sucedido.

- ¿ Te sucedió algo querida ?, estás algo pálida - le expresó la Dama gorda cuando Hermione se paró en seco frente a la entrada de Gryffindor para tomar algo de aire y tranquilizarse.

- No, gracias, sólo, necesito estar sola...

La Dama gorda se apartó de inmediato con el ceño fruncido y una mueca de preocupación. Hermione sin dudarlo entró y se dirigió apresuradamente hacía el dormitorio de las chicas, abrió la puerta y entró, tumbándose en su cama y corriendo las cortinas. Después, se sentó con las piernas en su pecho, pensando de nuevo en lo que había pasado.

- Lo he arruinado, lo he arruinado todo... - susurró para sí misma.

- No es cierto.

Hermione alzó la vista y se encontró con Ginny asomándose por la cortina con una sonrisa. Se sentó en el borde de la cama con cuidado y puso su mano en el brazo de su amiga.

- ¿ Estás mejor ? - le preguntó viéndola a los ojos.

Hermione se encogió de hombros y se limpió algunas lágrimas que minutos antes habían salido sin aviso.

- Vamos, no pudo ser tan malo - le dijo con semblante confuso y una sonrisa divertida -. ¿ No me digas que el Murciélago se molestó ?

Hermione negó con la cabeza y enterró su cara en sus rodillas, cubriéndose con sus brazos.

- Vamos, cuentame, no me arriesgué a que Snape me descubriera y me mandara a descuartizar cualquier animal viscoso para nada - Ginny se cruzó de brazos replicando.

La castaña descubrió su cara y sonrió divertida. Ginny siempre sabía cómo subirle los ánimos.

- Bueno, no salió mal. Es que al momento en que lo besé, creí que se apartaría de inmediato pero no, me correspondió y... Fue el momento más mágico que he tenido en mi vida.

- ¿ Aún rodeada de tanta magia real ? - Ginny río por lo bajo y Hermione la miró obvia.

- Si... Lo amo mucho Ginny - se sinceró Hermione.

Ginny sonrió con ternura y se subió completamente a la cama y cruzó sus piernas.

- Pero entonces explicame, ¿ porqué saliste huyendo de allí ?

- Es que yo... Me asusté y creí que él reaccionaría mal. Y sabía que no podría soportar su rechazo y salí corriendo - la chica tomó una almohada y hundió su cara en ella -. ! No lo sé, fui una tonta !