Capítulo 8

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Las semanas pasaron, y llegó el momento de regresar a Hogwarts.

Hermione estaba emocionada por volver al que ella consideraba su segundo hogar.
Se desperezó. Metió su ropa y pertenencias dentro de su baúl y, cerrándolo, se dirigió a su gato Crockshanks y lo tomó entre sus brazos y lo acarició, el cual ronroneo gustoso.

- ¿ Tienes hambre, Crockshanks ? - le preguntó Hermione a su gato, el cual maulló en modo afirmativo -. De acuerdo, bajemos para que te dé tu comida.

Bajaron a la primera planta y se dirigieron a la cocina, luego Crockshanks saltó de los brazos de Hermione y se dirigió rápidamente a su tazón de comida, y movía la cola impaciente.

- Ese gato lo único que hace es comer -. Dijo la madre de Hermione negando con una sonrisa.

Hermione río.

A continuación, el padre de Hermione entró igual a la cocina y llevaba un paquete en sus manos.

- Buenos días mis amores - dijo el señor Granger dándole un beso en la mejilla a Hermione y otro en los labios a su esposa -. Oye hija, ¿ recuerdas que me dijiste que extrañabas algunas canciones de aquí ?

- Si padre, es que allá hay diferente música y pues, algunas canciones de aquí me traen buenos momentos.

- Bueno y, ¿cualquier grabadora es inútil allí ?

- Creo que no, solo las que necesitan una señal de antena - dijo a la chica frunciendo el ceño - ¿ porqué lo quiere saber ?

- Bueno, porque, felicitando de nuevo tus excelentes calificaciones, pues junté todas tus canciones favoritas y ... - dijo el hombre sacando el objeto de la caja -. Te compré una grabadora, y un disco con tus canciones favoritas, así no extrañarás tanto el mundo muggle y su extravagante música.

- ! Oh por dios, muchas gracias papi ! - exclamó Hermione y abrazó a su padre con una enorme sonrisa -. Es genial, así no extrañare mi música.

Los Señores Granger sonrieron gustosos. Después, todos se sentaron en la mesa listos para recibir el desayuno.
Pero de pronto, Crockshanks maulló y bufó. Hermione volteó a verlo.

- ! Oh cierto ! Lo siento Crockshanks, olvidé tu comida - exclamó Hermione levantándose y poniendo un poco de comida para gatos en el tazón del animal.

- Ese gato lo único que hace es...

- Comer -. Dijeron Hermione y la señora Granger al unísono, lo cual hizo que todos rieran.

Después de desayunar, Hermione subió a su habitación y, con ayuda de su padre, bajó su baúl a la estancia y salió, subieron todos a su auto y echaron a andar hacia la estación.

Ya estando en la estación de King Cross, Hermione se dirigió junto a sus padres a encontrarse con sus amigos. Al llegar, se encontraro con toda la familia Weasley ( excepto Percy, claro ), la señora Weasley le arreglaba el cabello a Ginny, y los gemelos se reunían con Dean Thomas, para mostrarle algunos de los ya hechos " Surtidos Salta clases ".

Harry y Ron se encontraban charlando animadamente, y Hermione, quien después de saludar a los demás, se acercó a ellos y les dio un gran abrazo. Los chicos la abrazaron igual.

- Hermione, me alegra mucho verte - dijo Harry soltándola.

- A mi también chicos. No saben cuánto los extrañé - exclamó Hermione sonriendole a los dos -. También me alegra tanto ver que estas bien Harry. Me preocupé tanto cuando supe lo de la vista al Ministerio, y bueno, también por lo del año anterior -. Dijo Hermione con nerviosismo, pues bien sabía que Harry no quería hablar del tema, pero ella quería expresarle bien su preocupación.

Insufrible AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora