EL REENCUENTRO TARDÍO

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Cuando llegué a casa me encontré una gran sorpresa.

¡Amor mío!- Gritó Jim dándome la bienvenida. ¡Acabo de llegar y tengo excelentes noticias!

En ese momento me sujetó entre sus brazos, los cuales había olvidado, sentí su olor y suavemente me dio un beso. 

Fue como recordar el primer beso, ese primer beso que nos dimos en una noche bajo las estrellas.

Yo me sentí en las nubes, el corazón me palpitaba a mil por hora. Sólo mi amado esposo me podría hacer sentir así. Pero ya era demasiado tarde, ya yo había cometido un pecado mortal.

Sólo quería disfrutar de él, quizá serían sus últimos abrazos y besos.

- Amor mío estar sin ti estos días me ha hecho recapacitar, - afirmó Jim-  he cometido un grave error, no te he dado el tiempo y el cariño que te mereces. He dado todo de mi para hacer que la empresa se salve y ahora sé que eso no es lo más importante. ¿Me perdonas por favor?
Empecemos de nuevo, vamos de viaje amor, reavivemos nuestro amor.

Yo sólo lo miré fijamente y dije así misma: "Si Jim se enterara de lo que hice" Pero, ¿quien le va a decir? Debo hablar con Ian y terminarlo todo, si le explicó él lo entenderá.

- Amor mío, no me esperaba esto- Dije-. Hagamos todo lo posible para recuperar el tiempo perdido.

Entre besos y caricias llegamos a esa conclusión. No había más amor que el que se había mostrado en esa habitación. Entre perdones y te amos sólo existíamos él y yo.

Más tarde cité a Ian en una Cafetería...

-Ian debemos hablar, ha sucedido algo que realmente no me esperaba.

-Shhhh, ya sé que lo que vivimos fue Hermoso, por eso para demostrarte mi grado de compromiso contigo y mostrar mis sentimientos hacia ti yo...

-¿De qué hablas Ian?

-Belle, ¿quieres casarte conmigo?

Mi mundo se derrumbó en ese momento. Realmente no quería herir a Ian, era un buen hombre.

-Ian... tenemos que hablar. Pasó algo que debo decirte. Hoy regresó Jim y hablamos, decidimos recuperar nuestro matrimonio, luchar ambos por ello, nos reconciliamos y estuvimos juntos.

Ian me miraba con desconsuelo, muchas lágrimas salieron disparadas de sus ojos, nunca pensé experimentar algo tan intenso y tan desolador.

- Ian no quería lastimarte, siempre has sabido que amo a Jim, ¡Perdóname! Cometí un error, eres un hombre excelente, mereces a alguien que te ame y te haga feliz pero esa persona no seré yo, porque tengo que recuperar a mi familia. Perdóname por favor...

- ¿Serás feliz Belle?

- Ian, perdóname por favor.- Supliqué.

- ¡Te pregunte si serás feliz Belle!- Exclamó acaloradamente.

- Sí, lo seré. Pero necesito tu perdón, nunca quise lasti...

Ian se puso de pie y se fue, no dejó que terminara de pedir su perdón.

Esa fue la última vez que vi a Ian.

Semanas más tarde...

"Ha sido hallado el cuerpo sin vida del empresario Inglés Ian Maxwell. Al parecer su muerte se produjo por sobredosis de Somníferos. Más información a continuación en Noticias XYY."

Al escuchar esa noticia, mi cuerpo se estremeció tanto, entré en pánico, empecé a temblar, no me hallaba, lloré amargamente hasta que no me quedaron lágrimas.

Era mi culpa, IAN SE HABIA SUICIDADO.

ADULTERIO©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora