LA CULPA

7.6K 346 2
                                    

Después de ese encuentro, regresé a casa.

Al abrir la puerta veo a mi esposo Jim haciendo tareas con mi hijo.

Me sentía tan mal, no fue mi culpa ese beso, pero no hice nada para evitarlo. Pude apartarlo de mi y no lo hice, pude hacer algo y no lo hice. Sólo dejé que pasara.

Entré por esa puerta como una desconocida, vi a mi hijo que corría hacia mi y me abrazaba, sentí el saludo de Jim y subí a mi habitación con la mirada perdida, y el pensamiento fijado en ese minuto que ahora parece que dura para siempre.

Pasaron los días y no volví a contestarle a Ian.

Hasta el día de hoy que se presentó cuando salí de la empresa.

-Belle por favor, debemos hablar- dijo.

- ¿De qué vamos a hablar Ian? Yo creo que no hay nada que hablar. Debemos terminar lo que aún no comienza. ¡¡Estoy casada!! Tengo un hijo, aunque no estoy pasando por el mejor momento con mi esposo le debo respeto y aún lo amo.- respondí.

Mientras me hablaba, me tomaba de las manos y decía:

- Pero yo también te amo, estos meses me han servido para conocerte y valorarte. Jamás te haría lo que Jim. Danos una oportunidad, sé que has aprendido a amarme o a quererme. Lo tuyo con Jim no da para más. No sigas luchando contra la corriente. Quizá él tenga a alguien más.

La última frase retumbó en mi cabeza como el sonido de una campana gigante siendo golpeada con un bate de Baseball. Como granizo que cae sobre una lámina de aluminio. Como el grito de los niños saliendo de vacaciones de verano.

Quedé muda, Sólo veía hablar a Ian en cámara lenta, ninguna de sus palabras era asimilada por mi cerebro.

De repente me alejé, pero sentía que no era yo misma. Sentía que estaba viendo todo en otra dimensión.

Volví a casa y medité mucho en las palabras de Ian. Quizá tenía razón, ¿pero qué sentía yo por Ian? Yo amaba a Jim, pero ya Jim no parecía sentir lo mismo por mi. ¿Estaría bien que hiciera mi vida con Ian? ¿Y mi hijo?

-¡No! No puedo hacerle eso a mi esposo. - dije- Yo juré amarlo para siempre y es para siempre aunque él ya no me ame. Aunque él sólo viva para el trabajo, aunque él quizá tenga a alguien más... Pero, ¿y si no tiene a alguien más?. Yo no creo que él tenga a alguien más. Pero, ¡ese beso fue una traición! ¿Como lo miro al rostro ahora? He escapado de su mirada desde hace varios días.

-¡Dios mío perdóname! - Repetía una y otra vez- Si Jim se enterara no me lo perdonaría.

En ese momento entra Jim, me sonríe tímidamente y se nota el cansancio en sus ojos.

-Buenas Noches Amor. Estoy muy agotado; mañana debo salir de viaje, esta alianza decidirá el destino de nuestra compañía. Espero volver en dos semana a más tardar.

-¡Dos semanas!- Dije sorprendida- Es demasiado tiempo. Nunca has tenido que irte por tanto tiempo a causa de una negociación.

- Es necesario.- Contestó.

Esas fueron las últimas palabras que escuche de él esa noche. Y luego, volvió a mi mente esa última frase que escuche de Ian: "Quizá el tenga a alguien más"

"Quizá el tenga a alguien más"
"Quizá el tenga a alguien más"
"Quizá el tenga a alguien más"
"Quizá el tenga a alguien más" ...

ADULTERIO©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora