El móvil

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(La réplica de este poema se llama «la lavadora» y lo puedes encontrar en Carrete velado, de Irene G Punto.)

Intento dibujarte sonrisas
y me robas el cepillo de dientes,
intento escucharte
y rayas mis discos favoritos,
intento poner de mi parte
y te bebes la última cerveza de la nevera,
intento que la relación no se estanque
y quieres que nos vayamos de pesca.
¿Estás ahí? ¿Quieres que hablemos?
¿Por un momento podrías dejar el móvil?

Creo creerte
y cierro la puerta con llave,
me duele la cabeza
y tú me das un masaje,
me duele el corazón
y se acabó el jarabe,
me come la casa
y tú te has ido de compras.
Tú fuera, yo dentro.
Tú playa, yo lodo.
Tú hechos, yo palabras.
Tú nada, yo todo.
¿Puedes dejar el móvil?

No sé su nos dejamos querer
o es que ya queremos dejarlo.
No sé su eres tú la mujer de no vida
o la vida es la mujer
que ya no te conviene.
Tengo ganas de escapar
y no me corto las uñas de los pies.
Tengo miedo a la soledad
y me masturbó.
Intento encontrar algún motivo
para seguir Buscándote
pero siempre se me dio
mal leer mapas.
Dices que no te pasa nada
y yo no tengo saldo.
No oigo el timbre del móvil,
¿le has quitado el sonido?

No comprendo qué ha pasado
entre nosotros, y al fin completé
una cara del cubo de Rubik.
No sé de qué tengo hambre
si tengo la nevera con comida caducada.
No quiero dormir a tu lado
y compramos sábanas.
Necesito que alguien me explique
en qué punto comienza lo que se acaba.
Llaman a la puerta, me piden sal.
Necesito que alguien me enseñe
a volver a tener ilusión.
Llaman a la puerta,
me piden el aguinaldo.
Necesito que alguien me diga
que aún hay otra oportunidad.
Llaman a la puerta, es la pizza que pediste...
con el móvil.

Te digo que tenemos que hablar
y me contestas que
cómo va a haber otro.
Te pregunto que si
te ha escrito alguien
y me respondes que
eres toda oídos.
Te digo que no me deseas
y me dices que si me voy
a comer lo del plato.
Me dices que no mire a otras
y te haces un selfie.
Te miro, te caes, me río, te jodes.
¿Qué nos pasa?
¿Dónde está el cariño?
¿Es verdad que esto es el final?
¿Quieres dejar el puto móvil?

De lo que ayer compartimos
solo queda una galería
de imágenes en la nube.
Porque yo te escucho
y no te entiendo
y tú me miras y no me reconoces.
Porque hoy somos
un par de solitarios
y ayer éramos la mitad de algo.
¿Te enteras? ¿Tú te escuchas?
¿Móvil?

Me dices que me ponga en tu lugar
y quito tus pelos de la ducha.
Me juras que no
me has quitado de la cabeza
y compro papel higiénico.
Me juras que todo
va a ser diferente.
Me voy al sofá, me siento
y me pongo yo con el móvil.
Se nos están quitando las ganas
y te descargas una peli porno.
Me siento vacío por dentro
y te apuntas al gimnasio.
Quiero cortar con la relación
y te vas a la peluquería.
No sé de qué sirve
soltarse la melena
si el amor te peina.
Mejor raparlo al cero
y hacerme una peluca
con lo que queda.
Mejor vivir sin recuerdos
y así no tendría que olvidarte
Mejor no haberlo sufrido
y así no te querría ver más.

¿Quieres que te dé
la clave del WiFi?
Demasiado tarde.

El móvil,
como lo nuestro,
se ha quedado sin batería.

TErminAMOs y otros poemas sin terminarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora