Me veo en el espejo e intento
estar a la altura de la imagen que proyecto.
Pienso que ese impostor caracterizado de mí
es un pigmeo subido en un pedestal
que nunca esta en las escenas de riesgo.
Ese enano me viene grande
y no es que me llegue a la suela,
es que me llega a la horma del zapato,
me aguanta la mirada y no aparta la vista,
tiene los ojos clavados en mi semblante
como dos puntos de mira de francotirador,
le pegos los bostezos in situ,
nos reímos de las mismas gracias
con sincronía, pero no le oigo la risa
desde la otra habitación.
Él es quien se lleva todos
los vítores y aplausos,
es de quien hablan todos con tanta admiración,
yo quise estar a la altura dando saltos
y a lo mejor antes sería mucho más alto
pero al final me hundí
a base de aguantar tanta presión.
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TErminAMOs y otros poemas sin terminar
PoetryUn sabio dijo una vez: Pocas cosas hipnotizan tanto en este mundo como una llama y como la luna, será porque no podemos cogerlas o porque nos iluminan en la penumbra. Realmente no sé si alguien dijo esta cita o me la acabo de inventar, pero deberían...