Tentativa

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Me tienta tentar y ser atentado,
boicotear tu relación
en la segunda parte de la prórroga
cuando los dos equipos
se han encerrado en la portería,
ser la gota que rebasa el beso,
abrazarte a quemarropa
cuando de tu corazón
solo quede el hueso,
un pez de agua salada
que ama nadar en tu tristeza
cuesta arriba hasta entrarte por los ojos,
el hombro sobre el que llorar,

el hombre bajo el que reír,
tu lumbre.

Conseguir que seamos supernovas
atraídas por la fuerza de la novedad
de la teoría de la costumbre,
universos fundidos en un Big Bang,
polos opuestos o iguales
que se atraen y se derriten
subiendo el nivel del mar
o el precio del pan,
cruzarme contigo por la calle
y que tu cara sea un poema, que te calles
y que tus ojos sean como un libro abierto
por mi página.

Me tienta tentar y no irme sin antes
haberlo intentado, pero la tentación
muere como la abeja y su picadura,
justo después de haberlo logrado.

TErminAMOs y otros poemas sin terminarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora