||Capitulo 12.

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CAPITULO 12
Lawrence, Kansas.

2 días habían pasado desde que los winchester comenzaron a buscar al ángel desesperadamente, quien parecía haber desaparecido por arte de magia, como si se lo hubiera tragado la tierra.

Ambos se estaban quedando sin ideas y Dean, como era de esperarse, se estaba volviendo loco y perdía las esperanzas a cada segundo. Normalmente, la mente del mayor era consumida por pensamientos de Castiel, más de malos que de buenos. Lo cual hacia la situación el doble de difícil de lo que ha era.

-Dean... Deberíamos revisar la iglesia de la calle principal –dijo Sam señalando a la ventana del auto con su mano, indicándole el lugar.

-Ya revisamos ese lugar, Sammy. No hay nada. –contestó Dean poniendo una mano en su cabeza y sobando su frente.

-Si, pero tal vez podrían tener...

-¡Dije que no! –gritó Dean, dejando caer sus brazos y cubriendo su cara con sus manos.

Sam sabía que estaba estresado.

-Perdón, Sammy... No debería de estar hablándote así pero ya no sé qué hacer y... –se le cortó la voz y suspiró.

-Tranquilo. Lo vamos a encontrar, no te preocupes. –dijo Sam, tratando de animarlo.

Dean quitó sus manos de su rostro y suspiro profundamente.

-Eso espero.

Dean encendió el motor del auto y se dirijo a la iglesia que quedaba aproximadamente a 4 kilómetros.

Todo estaba calmado, ambos hermanos parecían estar buscando soluciones a este problema hasta en lo más profundo de sus mentes, hasta que

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Todo estaba calmado, ambos hermanos parecían estar buscando soluciones a este problema hasta en lo más profundo de sus mentes, hasta que...

-¡DEAN! –gritó Sam, logrando que su hermano diera un frenara el auto de golpe, casi chocando.

-¿¡QUÉ TE PASA!? –le contestó Dean de igual manera.

-¿Quién es la única persona además de nosotros que pudiera tener una solución a esto? –preguntó el menor.

Dean elevó sus ojos, intentando pensar en alguien. De repente, lo supo.

-Bobby. –contestó en el momento que le vino a la mente.

-Exacto.

-Eres un genio, Sammy –dijo el mayor, mirando a su hermano.

-Gracias, gracias... Ahora, hay que ir con Bobby y le cuentas todo lo que te dijo.

Dean asintió y se dirigió a encender el motor.

-Espera... –dijo Dean, antes de prender el auto– si Bobby sabe todo entonces... Se dará cuenta de que estoy enamorado de Cas, de un hombre.

-¿Y? –preguntó Sam, no entendiendo su punto.

-Y que tal si me rechaza por eso, estoy muerto.

Learning How To Feel || Destiel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora