6-Era algo extraño

36 6 1
                                    

Al llegar a mi casa todo era un desastre con mi hermano, siempre tenia planes con sus amigos y sus zorras baratas. Pero a pesar de eso nada impide que sea mi súper hermano mayor, el cuida de su hermana como un tesoro, posiblemente porque sabe cómo es el mundo y los hombres, para él siempre seré su pequeña, aunque ya tenga 18 años.

Subo las escaleras para llegar a mi habitación y descansar un poco, pero primero debía darme una ducha para estar más relajada. Organicé mis cosas y busque en el guardarropas algo cómodo. Elegí un pantalón corto de tela de algodón y una blusa tipo pijama. Me deshice de la ropa que llevaba puesta y entre al baño.

(...)

Al fin estaba fresca y limpia, antes de acostarme vi una nota encima de un pequeño taburete, la busque y la empece a leer, pensé que era de mi madre dando algún aviso, pero no fue ella, la nota claramente decía:

"No te hagas la tonta sé que te gusto y aunque no lo creas siempre estaré más cerca de lo que crees.
Así que por favor Collins no me invadas porque de nada servirá el intento.
Firma: tu otra mitad"

Estaba claro de quién era la bendita nota, pero como carajos ese tipo ingreso a mi habitación y precisamente mientras me bañaba. Quién se cree para invadir mis espacios e insinuar que él me gusta, si antes estaba en duda ahora confirme que es un puro y descarado idiota. Por cierto no podría ser más cursi con eso de "Mi otra mitad" ni que fuera un pedazo de naranja o como si estuviera incompleta.

Preferí guardar la nota y olvidar este día desperdiciado y acomodarme en mi cama... Les había contado que mi cama es el paraíso en la tierra, es la pura perfección del amor a la comodidad y el descanso del alma.

Después de tanto pensar caí en un profundo sueño...

(...)

Me moví incómoda en la cama, desperté como si hubiese estado en una pesadilla, sin contar que eran las 3:46 am, estaba sudando y tenía la respiración acelerada, no obstante sentía la presencia de alguien en mi dormitorio como si alguien me estuviera observando cómo cuando tenía 7 años, hace tiempo no sentía ese presentimiento. Me levanté de inmediato y salí de la habitación, iré a pedirle a mi hermano si me puedo quedar con el, como en los viejos tiempo, por eso siempre tenía una gran conexión con el, mi hermano me entendía como nadie, me protegía y me explicaba cosas que pasaban en la vida que antes no entendía. Una de esas cosas era porque las mujeres abortaban a sus bebés si eran sus hijos, preguntas que aparecían en mi mente con apenas 8 años, mi mente era madura para muchas cosas y Alex era mi guía humano.

Le di leves golpes a la puerta de su habitación.

-Quién??- gruñó mi hermano con voz dormilona.

-Alex, es Alis, me puedo quedar contigo por hoy- respondí con voz de súplica.

-claro hermana- enseguida entre a su habitación.

La habitación de mi hermano es la típica habitación de un joven adulto, tenía toques de colores oscuros, excepto la cama que era blanca y en la esquina habían retratos de fotografías de sus amigos.

-Que extraño, tú aquí hermanita- me miró arqueando una ceja- debe ser algo muy malo.

-Deja de decir tonterías- respondí- solo es...bueno como te explico, de nuevo tengo el mismo presentimiento que de niña, siento que alguien me está vigilando, entiendes?

-Sí, te entiendo- abrió las sabanas y me dejo un espacio- Ven, mañana hablaremos , ahora tienes que dormir.

-Gracias Alex- dije con una sonrisa.

-Sabes que no tienes que agradecer piojo, eres y serás siempre mi hermana pequeña- finalmente me abrazo.

Pero el presentimiento seguía ahí y aún más fuerte, como si mi corazón y meten me estuvieran diciendo con alarmas rojas que nada a cambiado.

Trate de no pensar en eso y me dormí.

----------------------------------------------------

Aunque la universidad no me deje relajarme, trate de escribir este capítulo.
Espero que sigan leyendo, necesito su apoyo para poder continuar.

Nathii🍃🌾

Está  es mi historia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora