Siempre Serás Tú

Navidad en familia

Estaba agotada. Toda la mañana y parte de la tarde se nos había pasado cocinando. Pero había valido la pena. Hicimos una gran cena, y pusimos todo en una bufetera rectangular. Se veía increíble, me encantaban las cenas navideñas con mi familia, siempre eran las mejores. Eran las 6:00 de la tarde cuando subí a mi antigua habitación a arreglarme. Decidí que sería mas fácil arreglarme con mis padres que ir y volver. 

Me di un largo baño. Me puse un pantalón negro, una blusa roja con poco escote y decidí soltar mi cabello. Lo había alaciado, se veía increíble. Me maquillé un poco y estaba lista. Bajé y mamá ya estaba lista, se veía hermosa, con su vestido rojo largo, y papá muy elegante con su traje. 

Comenzamos a poner la mesa, quedaba mas o menos una hora para que quienes fueran a llegar, llegaran, no había oído nada de mis tíos en todo el día, supongo que querían sorprenderme con algo. 

- Mamá, ¿puedes poner un lugar extra?, invité a un amigo - 

- ¿Invitaste a un amigo? ¿cómo se llama? - 

- Henry - 

- Pondremos otro lugar entonces, ¿no estará con su familia? - 

- No, ellos acostumbran solo tener un desayuno el 25, costumbres de su papá, y decidí invitarlo -

- Muy bien - 

Terminamos de poner la mesa. Henry llegó media hora después. Cuando le abrí la puerta quedé encantada. Traía un traje negro, camisa negro mate y una corbata rojo sangre, pero lo que mas me sorprendió fue que su cabello largo se había ido, se veía guapísimo, tuve que contener todas mis energías para no besarle. 

- Hola - dijo coqueto con una botella de vino en las manos 

- Hola - 

- Quiero que sepas que no puedo esperar para quitarte esa ropa - 

- Mala suerte, dormiré aquí hoy - 

- No si puedo evitarlo - me sonrió

- Hola, tu debes ser Henry - saludó mi mamá

- Buenas noches, mucho gusto - 

- Buenas noches, un gusto - saludó mi papá y Henry le entregó la botella de vino

Pasamos a la sala a platicar un rato. Henry les platicó sobre su trabajo, los dos estaban escuchándolo muy atentos. Les parecía interesante y Henry les agradaba, ese era un gran paso, a las 8:00 pasamos al comedor, Henry se sentó a mi lado y seguimos platicando. 

- Henry, te explico, nosotros acostumbramos cenar, luego hacemos un brindis, todos a la mesa tienen que decir algo, te aviso para que vallas pensando en algo, y después de cenar, platicamos un rato, y luego bailamos un rato, espero que te guste bailar -

- Gracias por el aviso del brindis, y no soy muy fanático de bailar pero se hacerlo - 

- Me agrada escuchar eso - 

Sonó el timbre y mi papá se levantó a abrir. Vi al hermano de David entrar al comedor y palidecí. 

- Mamá, invitaste a la familia de David y no me dijiste - 

- No pensé que habría problema, pensé que David te había mencionado algo, ayer que vinieron le comenté que vinieran - 

- Henry - le dije en voz baja 

- No te preocupes princesa, mantendré mis manos lejos de él - 

Cuando David entró al comedor abrió mucho los ojos. Se quedó callado, se le tensó la mandíbula y le pidió a su hermano que saliera con él un momento. Yo estaba a ratos pálida y a ratos demasiado enrojecida. Henry estaba muy serio. Todos se sentaron y empezaron a platicar.