Pequeña sorpresa

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Desperté y miré a Henry. Era tan lindo verlo dormir. Salté de la cama directo a tomar un baño. Me arreglé mientras Henry tomaba su baño y salí a esperar a Anna. Cuando los cuatro estuvimos listos salimos del departamento. Anna se fue con Ernesto y yo me fui con Henry. Me dejó en la escuela y me dijo que me veía cuando saliera de clases. Lo besé y baje del auto. Estaba de tan buen humor que ni siquiera la actitud amargada del profesor Divanci me molestó. Todas las clases pasaron de forma tranquila, presenté unos argumentos y todo salió bien. 

A la hora del brake decidí contarle a Gabo todo lo que había pasado, el se burló de mi por sensible pero se alegró de que todo estuviera bien. Volvimos a clase, y pasamos el resto de clases. Estaba impaciente por salir, Henry me había dicho que haríamos algo pero no me había dicho que, y antes de dormir cuando le pregunté se había negado a decirme. Casi salí corriendo del salón cuando sonó el timbre. Henry estaba recargado en su auto, había venido directo del trabajo. Se veía increíble con esas camisas de botones, con las mangas dobladas hasta sus codos.

Lo saludé con un beso y subí al auto. En el camino al Sushi Den le conté como fue mi día. Nos saludó la chica que siempre nos atendía y ordenamos. Mientras comimos me platicó que habría eventos de exposiciones de libros clásicos por unas semanas en Firestone y me pidió que fuera con él. Acepté encantada. 

- Quiero que me ayudes en algo princesa - 

- Claro, dime - 

- Quiero que me ayudes a elegir una casa, me mudaré - 

- ¿Ya no te gusta la casa donde vives? - 

- ¿A ti te gusta? - 

- Claro que me gusta, me encanta la terraza y el patio es perfecto - 

- Si encontramos una que te guste mas, me dices, quiero un cambio - 

- ¿Porqué no re decoras la casa? - 

- Pues, tendrías que ayudarme, no soy muy bueno para esas cosas - Henry pagó la comida

- Te ayudo entonces - Dije levantándome  - ¿ya me vas a decir que haremos mas tarde?-

- No, todavía no - me abrió la puerta del auto y subí - Dime - 

- No puedo, ya verás - 

Henry condujo hasta el parque de la ciudad. Nos sentamos en la banca del lago, como siempre que íbamos ahí

- ¿Recuerdas la primera vez que venimos aquí? - 

- Si, ese día salí contigo, de casualidad me plantó David - 

- Que suerte tengo, antes de conocerte nunca venía a este lugar - 

- ¿En serio? - 

- Si, no venía a nada mas que, por algunas fotografías, pero después, se convirtió en un lugar, indispensable - me miró - cuando te besé aquí, te asustaste - rió

- Pensé en David, ¿te acuerdas cuando lo encontramos allá en el día de campo? - 

- Si, pensé que se iba a enojar mas o algo así - 

- Porque tu no tuviste que aguantarlo después - reí

- Estuve a punto de decirte que ya no me buscaras, cuando me dijiste que no le habías dicho nada a David, pero, no pude - 

- Me amas demasiado y yo te amo a ti, demasiado - 

- Así es, eras demasiado para mi para dejarte sola, nunca voy a dejarte sola - 

- Siempre me vas a tener a tu lado - 

- Eso me agrada, te necesito a mi lado mas de lo que crees nena - se movió para sacar su celular - disculpa. Diga...si...si claro, el señor Jhonson ... él fue quien me dijo que solo se podría hoy ... lo quería para el fin de semana, pero me dijo que no iba a ser posible ... Si va a estar vacío mejor ... ¿no hay manera de convencerlo para el fin de semana? solo lo necesito por máximo, una hora, media hora ... ¿cuantos fines de semana mas? ... no señor porque no tengo un calendario tan detallado ... no a la mano al menos ... claro... entiendo ... muy bien, entonces lo tomo, no hay problema ... gracias ... - colgó

Siempre Serás TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora