21:Bye Amstelveen, Hello Cincinnati.

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  Desperte gracias a los rayos del sol que pentraban a la habitación, hoy era domingo, recordé que le dije a Martijn que lo ayudaría a ponerse al día, pero no creo ser capas de mirarlo otra vez como una persona normal, todo este tiempo el era el asesino, todo este tiempo el me oculto la verdad, y la verdad es que el esta loco, es un psicópata, me di cuenta que tenían razón, el era raro y era mejor alejarse de él.
  Elimine todos los pensamientos que tenía al sentir un leve dolor de cabeza, supongo que es causado por llorar toda la noche, me levante y me di cuenta que aun estaba vestida con la misma ropa de ayer, camine hasta al baño y abrí la puerta, encendí la luz y vi mi rostro, tenía el maquillaje corrido, me veía horrible, lave mi cara hasta quitar todo rastro de maquillaje, baje el cierre del vestido y lo deje caer al suelo, quería relajarme con una ducha de agua templada, deje caer el agua caer por mi cuerpo, solté un suspiro mientras dejaba que mi cabello se mojara, por primera vez olvide a Martijn, durante un tiempo, pude relajarme, termine de darme una ducha pero no quería salir estaba relajada aquí adentro, pero recordé que aún le debía una explicación a Ann pero como decirle que Martijn es el asesino que todo Amstelveen busca.

-Hey Sky, te buscan aquí abajo.-Rogué que no sea Martijn, no quería verlo, al menos no por ahora.-
-Enseguida voy.-Conteste cerrando la regadera.-

  Me vestí cómodamente y seque lo más que pude mi cabello, cuando estuve lista baje y me encontré con una chica de cabellera teñida de magenta, no la conocía de ninguna parte, pero la verdadera pregunta era, ¿como me conoce y que hace aquí?.

-Sky te dejo tengo que salir con Julian.-Beso mi mejilla para luego retirarse, mire a la chica y estaba por hablarle pero me interrumpió.-
-Se que te estarás preguntando, quien soy y de donde te conozco, deja que me presente, soy Christina, la psicóloga y psiquiatra de Martijn, el me pidió ayuda para que sepas la verdad.-Me cruce de brazos, debí suponerlo, era obvio que Martijn no se iba a rendir hasta que lo perdone.-
-Ya se la verdad, no hace falta escuchar otra versión dicha por el y dile que no quiero ser su novia y que se busque a alguien que lo ayude, no pienso ir.-Se que sonaba como inmadura pero no era fácil saber que tu novio es un asesino.-
-Escucha, Martijn no es lo que tu crees, la razón por la cual desapareció por un tiempo fue porque el era bipolar, la desarrollo por la muerte de su madre y hermana, por la ira de que su padre las halla matado.-Eso no es cierto, él me dijo que habían muerto en un accidente.-
-No, eso no es cierto ellos murieron en un accidente.-Ella negó mientras nos sentábamos en el sillón.-
-Él te mintió, solo estaba tratando de protegerte, él siempre te cuido sin que te dieras cuenta, él nunca te haría daño, todo este tiempo que estaba en rehabilitación, nunca dejaba de preguntar por ti.-Recordé la vez en que un tipo trato de abusar de mi, Martijn me había protegido de él, aunque lo mató.-
-Se que me protegía pero, ¿por que mataba a todos los que querían hacerme daño?.-Pregunté mientras mordía mi labio inferior aguantando las lágrimas.-
-Él no quería serlo, su segunda polaridad lo estaba controlando, poco a poco fue creciendo hasta que, simplemente apareció, y provocó un caos, Martijn me prometió que dejaría de ser un asesino, solo por ti, y yo creo que el lo hará.-Me quede en silencio pensando que hacer, perdonarlo y olvidar que es un asesino o mantenerme lejos de él y olvidarlo con el tiempo.-
-No se que hacer.-Oculte mi cara entre mis manos, mi mente estaba a punto de explotar, no solo por el dolor que era horrible si no porque no podía procesar toda la información rápidamente.-
-Tienes dos opciones, la opción número uno, aclarar las cosas con él y de resto es tu decisión.
-¿Y la segunda opción?.-Aparte disimuladamente las pocas lagrimas que salieron de mis ojos.-
-Mantenerte alejada de él y lastimar psicológicamente a los dos, tu decides.-Sin más que decir se retiró.-

  ¿Que debo hacer?, ¿debería ir con Martijn a arreglar las cosas?, mi mente sigue sin poder procesar nada, mucho menos que ahora estoy totalmente confundida, tal vez Martijn estuvo cuidándome todo este tiempo, pero creo que eso ya sería una obsesión, tal vez lo mejor sea es que me valla del país sin decirle nada, debo irme sin que nadie se entere de donde estoy, debo empezar de cero, dejar a mi familia a mis amigos para que Martijn no me encuentre.

  Logre obtener un vuelo con destino a Cincinnati, recogí todas mis maletas y me vine al aeropuerto, logre llevarme a Tomy lo cual era un punto a mi favor, no quería estar sola por las calles de Cincinnati, para mi suerte mi padre tenía una residencia ahí, tenía donde quedarme solo queda cambiar mi estilo para que nadie me logre reconocer.

  El cálido viento de Cincinnati golpeo mi cara una vez que puse un pie fuera del avión, camine a la fuera de este para buscar mis maletas y a mi perro. Ya era hora de empezar con una nueva vida aquí en Cincinnati Ohio, ya era hora de olvidar el pasado y dejar de lado quien fui, terminare la escuela aquí y terminare mi vida aquí.

  Millones de recuerdos pasaron por mi mente al entrar en aquella casa algo polvorienta por estar deshabitada por un par de años, montones de fotos con mi familia estaban colocadas en las mesas y paredes, eran buenos recuerdos, fueron buenos recuerdos que ahora no existen.
 Termine de limpiar la casa, el sol ya se había ocultado dejando ver a una brillante luna, la casa sin duda era grande, pero logre terminar de limpiarla, solo me faltaba hacer las compras y cambiar de móvil para que no me rastreen, hoy saldré a comer, y mañana haré las compras, que suerte que me lleve la tarjeta que mi padre me dio si necesitaba comprar comida y el no estaba.
  Subí al baño de la casa y tome una relajante ducha, me vestí con algo lindo y sencillo,  acomode mi cabello y baje las escaleras.

-Tomy, voy a buscar comida, vuelvo más tarde.-Acaricie su cabeza y salí de casa.-

  Camine por las calles llenas de gente, recordaba cada una de las calles y tiendas de esta zona, recordaba cuando iba con mi padre a comprar dulces en la tienda del señor Chad, y cuando ayudaba a mi madre con las compras, sinceramente Cincinnati fue una ciudad muy hermosa, y aquí es donde están mis recuerdos más preciados de la infancia.

-Disculpa no estaba mirando.-Me disculpe al chocar con el cuerpo de alguien, levante la cabeza y me encontré con unos ojos marrones.-
-No te preocupes, de todos modos yo igual estaba desconcentrado en el camino.-Me sonrió amablemente.-Soy Jordy por cierto, ¿como te llamas tu?.
-Sky, Sky Jones, un gusto.-Le ofrecí mi mano y el la acepto con gusto.-
-El gusto es mio.-Me guiño un ojo y nos dimos un ligero apretón.-
-Bueno Jordy, fue un placer conocerte, ahora iba a ir a cenar y comprar algo, ¿nos vemos luego?.-Nos soltamos de las manos.-
-Conozco un buen lugar por aquí cerca, ¿te gustaría ir?.-Tal vez no sería mala idea tener un amigo aquí en Cincinnati, pero no quiero molestarlo.-

-No quiero molestar o ser una perdida de tu tiempo.-Baje la mirada algo avergonzada, pero su mano me agarro del mentón haciendo que levantara mi cabeza.-
-No serias una molestia, mucho menos una perdida de tiempo, ¿vamos?.-Asentí con una sonrisa, tomo mi mano y caminamos mientras hablábamos de diversos temas hasta llegar al famoso restaurante que menciono.-

  Él era totalmente caballeroso, estábamos cenando hasta que me llega una llamada al móvil, junto con millones de mensajes de mis amigos y mis padres preguntando donde estaba, colgué la llamada al ver el nombre en la pantalla y apague el móvil, no quería decir nada por ahora, más tarde llamare a mi padre para decirle que estaba bien pero que decidí independizarme, una excusa muy estupida pero que puedo hacer.

-¿Todo esta bien?.-Preguntó al ver que apague mi móvil y lo deje caer en la mesa.-
-Si, todo esta bien.-Le sonreí lo más realista que pude para convencerlo, cosa que logre.-

  Era mejor olvidar el pasado por un momento y disfrutar el presente.


The Killer (Martin Garrix)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora