Lo que sentía por Nicholas era más que innegable, las reacciones de mi cuerpo lo gritaban todo el tiempo y ya yo no quería engañarme más, me encantaba escucharlo y estar con él.
« Al fin lo aceptas » Me dice mi yo interior y siento un cosquilleo en el pecho.
Sí, creo que ya lo he aceptado.
Nicholas y yo nos separamos. Abrí los ojos y le di una gran sonrisa de boba. Él también sonrió como el grandísimo idiota que es. Me hizo sentir menos boba porque el parecía un retrasado.
—¿Por qué eres así? —pregunté frustrada. Es tan impredecible y a la vez un completo idiota.
—¿Así cómo? —preguntó juguetón.
Idiota.
No hay forma de explicar lo inexplicable.
—Olvídalo. Tu capacidad mental no llegaría a entender la mía. —Él me miro sorprendido.
—Disculpe usted, al menos mi capacidad mental no perdió parte de sus recuerdos. —bromeó. Pero eso no me pareció gracioso.
Él se dió cuenta.
—Lo siento... eso fue estúpido. —Bajó la cabeza mientras jugueteaba con sus dedos apenado. Sus disculpas me reconfortaron.
—Necesito recordar. —musité perdiendo la mirada en el blanco suelo. Nicholas puso su mano sobre la mía.
—Puedo ayudarte con eso. Pero en otro momento, ahora tienes que irte. —declaró.
—¿Por qué?
—Algo está fallando.
—¿Qué?
—¡Lena! Hazlo ya. —Me levanté sin entender nada, él se notaba nervioso, me lanzó una mirada extraña, luego miró el suelo y no se movió más.
—¿Pero qué...?
—Disculpe ¿Qué hace usted aquí? —Escuché decir a una chica detrás de mí. Mierda. No me puedo mover.
¡Piensa! ¿qué haría un experimento en la habitación de otro?
¿Hablar? No, ¿Escuchar? No.
—Señorita. —Me volteé encontrándome con una pelirroja conocida, aunque no recordaba su nombre.
—Yo... —Piensa Lena ¿qué estás haciendo aquí? ¡Ya!—. Olvidé donde está mi habitación.
Ella me miró con compasión.
—Oh, no te preocupes, te llevaré a tu cubículo. —dijo tomándome de los hombros con cuidado. Antes de salir de la habitación de Nicholas le di una última mirada, él me miró y me guiñó.
No pude evitar sonreír.
Pero traté de disminuirla, por mi seguridad.
Mientras caminábamos buscando mi cubículo me di cuenta de que ella no sabía dónde era. Quizás esto tardaría un poco.
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CONECTADOS | 𝖤𝖭 𝖯𝖱𝖮𝖢𝖤𝖲𝖮 |
Science Fiction¿A quién pertenece la voz en su cabeza? Lena despertó en un lugar desconocido, sin fragmentos importantes de su memoria y una extraña voz en su cabeza. Su plan era recuperar sus recuerdos, pero una confesión de alguien inesperado transformará su des...