Capítulo 24: "Stockholm syndrome"

100 12 9
                                    

Jo's POV

Luke había ido por mí junto con Ash y lo habíamos llevado a un hospital demasiado lejano a mi gusto, para que fuera a rehabilitación.

—¿Luke? ¿Dónde rayos estamos? — las luces comenzaban a descender y había demasiados árboles para estar cerca de civilización.

—No tengo la menor idea.

De repente el auto frenó, lo miré t él sonrió.

«Deberíamos pasar al asiento de atrás.

—¡No voy a follar en un automóvil, Luke Hemmings! — él sonrió y dijo: "Eso no es lo que vamos a hacer".

Nos sentamos en los asientos traseros y él subió mis piernas a su regazo, miré su rostro casi intentando descifrar que era lo que intentaba, pero estaba en blanco.

—Jo, yo te amo, mucho, pero lo digo en serio y con todo el peso de la palabra, es en serio, eres... agh, va a sonar cursi, ¿entendiste, bebé? — no parecía estar dispuesto a correr su mirada de mí por lo que yo bajé la mía logrando que una pared de cabello cubriera mi rostro. Luke lo tomó entre sus manos y continuó mirándome — eres el amor de mi vida — soltó suavemente dejando espacio entre cada palabra — no quiero volver a perderte jamás.

Estuvimos lo que restó del día tonteando y pues sí que follé en un auto al final de cuentas.
Entonces llegó la noche, y Luke no había dejado de estar cariñoso ni por un segundo.
Mi mirada se perdió por un minuto y al volver al mundo mi novio me miraba.

«¿Qué sucede?

—Solo pensaba.

—¿En el sótano? — lo miré triste y él entendió la respuesta, en un santiamén ya estaba entre sus brazos — escúchame muy atentamente, bebé, no dejaré que algo como lo que Evan hizo vuelva a pasar ¿entendido? Nadie que no sea yo volverá a tocarte sin que tú quieras, y espero que sea así — bromeó y sonreí — y si sientes claustrofobia o algo podemos comprar una casa gigante, debajo del mar o algo y no volver a salir — cubrí mi rostro con mis manos y reí por las idioteces que estaba diciendo — te amo.

—Luke... Yo también te amo y eres el amor de mi vida — me causaba mucha vergüenza expresarme así, pero Luke lograba sacar esa parte color rosa de mi alma.

—¿Tienes hambre? — preguntó repentinamente cambiando de tema.

—Luke, deja de preocuparte, bebé.

—No estoy preocupado — replicó.

—Suenas preocupado — bufó.

—No quiero que pases hambre, ¿sí? — lo miré por completo, aún no se encontraba en perfectas condiciones, ni yo, pero yo tampoco y ambos avanzabamos juntos.

—Tranquilo, si tengo hambre... Puedo comerte a ti — soltó unas risas pervertidas.

—Durmamos — ofreció y asentí — ¿te he dicho antes que eres muy linda cuando asientes?

—Veo que en estos cinco meses ampliaste tu repertorio — sonrió — esa no la había escuchado.

—Pues tengo muchas más de donde vino esa — se puso sobre mí y besó mis labios.

—Oh, me encantaría oirlas — soltó un coqueto  "¿en serio?" Antes de que la ventanilla del auto sonara.

Avergonzada miré quien estaba afuera.

—¡Oh por Dios! — una fan, no más ni menos.

—Huh... hola — me removí en el asiento abriendo la puerta.

Unnoticeable ||5sos||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora