Pareja Tóxica ©

Capítulo 5

Despertar en la cama de un desconocido no estaba en mis planes, Dios sabe que no lo estaba pero para mi desgracia, así fue. 

Desperté asustada  porque mi compañero de piso estaba sacudiéndome frenéticamente. 

-¡¿QUE COÑO TE HA PASADO EN LA CARA?!

De mala gana me arrastro fuera de la cama y voy directo al baño, al espejo.

Mierda. 

Mi mejilla esta morada y algo hinchada pero ya no duele tanto.  

Mi madre me matara, aunque ella ya no puede controlarme,  pero si me viera en estos momentos moriría de un infarto y resucitaría para regañarme. 

Ella siempre controlo, mi peso, mi piel, todo. Como si fuese que solo nací para ser bonita. 

Pero eso ya se termino. 

Matthew, me mira desde el umbral de la puerta del baño, parece preocupado, incluso asustado.

Oh, él cree que fue quien que me lastimo. 

Niego y digo lentamente: -Después de que  me abandonaste, una chica me golpeo.

Mira hacia el suelo algo aliviado.

-¿Quien es Debra? -suelto y él me mira fijamente.

- ¿Ella lo hizo?

-No lo se

-¿Porque quieres saberlo? -dice fríamente.

-Ja -suelto molesta con él -porque me han hecho esto -apunto a mi mejilla- y  tuve que dormir contigo a causa de ella.

-Tu y yo... 

-No -digo sin ocultar mi  irritación- solo me llamaste Debra y me obligaste a dormir en tu maldita cama. 

-¿Sabes que? -dice aún más irritado- las reglas eran una buena idea-dicho esto se gira y se va. 

*

Me paso todo el día ordenando mis pocas pertenencia en la nueva habitación. Matthew no ha vuelto, y en parte me alegra porque no creo poder soportarlo pero por otra parte quisiera que estuviese  aquí para pedirle que me llevase al centro comercial, necesito comprar ropa. 

Necesito un buen baño y ropa limpia. 

Después de unas horas comienzo a aburrirme, toda mi nueva habitación es monótona y triste, no tengo ropa, ni sabanas, ni una cortina, el lugar es húmedo y oscuro pero aun es mejor que estar en casa, si estuviera ahí tendría que estar en clases de yoga o ejercitándome con Jenna.

Jenna, si perdonaba a Louis también tendría que perdonarla pero por más que las palabras salieran de mi boca, no las sentiría. Creo que nunca podría perdonarlos en si, ellos eran mis amigos, eran todo en lo que podía confiar y me traicionaron, no creo que realmente me duela esa traición, me duele haberlos perdido, a lo que creía que eran. 

***

Cansada de esperar  a que Matthew regrese decido salir a dar unas vueltas, para mi desgracia el día esta gris y fresco, mi outfit no es el indicado puesto que solo llevo la misma ropa que ayer.

Después de una hora de caminar sin rumbo y con miedo a perderme, decido volver.
Brennan está saliendo del piso, tengo que admitirlo, de día no es tan terrorífico, aún así, es el mismo imbécil.
En cuanto se gira, me ve y sonríe.
-Hola -dice pavoneándose.
Intento pasar por su lado sin siquiera mirarlo cuando me detiene.
-Yo que tu no entraría ahí.
-¿Por qué? Vivo aquí.
Se ríe y niega con la cabeza. Intento abrir la puerta.

Me detiene.

Dios esto es estresante.

-Créeme niña cara de hamburguesa, no quieres ver lo que está sucediendo ahí.
Siempre he odiado mis pecas, pero hay algo que odio más, los estúpidos insultos sobre ellas.
Lo miro claramente irritada. Ni se inmuta.
Giro y abro la puerta, apenas lo hago oigo gemidos provenientes del cuarto de Matthew.
No jodas.
Mi cara arde por la vergüenza y cierro la puerta rápidamente.

Brennan ya no sigue ahí, esta en su coche.

-Te lo dije -grita.
Lo ignoro y me siento en las escaleras.
-¿Piensas quedarte ahí? Debra matará a Matthew y después a ti. 

Oh, la famosa Debra está aquí.

-Me da igual -digo encogiéndome de hombros.
-Venga vamos a dar unas vueltas, no querrás otro golpe en tu bonita cara.
"De ninguna manera" pienso. 

Pero solo tengo dos opciones: Quedarme en esta escalera y esperar a que llueva o utilizar a Brennan. Y  si hay algo aprendí en mi casa fue a utilizar a las personas así que digo:

-Está bien.

Le digo que me espere y entro  al departamento sigilosamente.
Lo gemidos de esa chica no cesan, pero pude oír la voz ronca de Matthew.
"Te amo tanto que duele."

Oh, eso fue cursi en un momento poco apropiado.

Entro a mi habitación, tomo mi bolso y salgo sin hacer ni un solo ruido.

Para mi desgracia/suerte Brennan aún se encuentra esperando, así que subo y acepta llevarme al centro comercial.

No era como los centros comerciales que frecuentaba pero estaba bien.
La Ruby de Chanel había muerto de todas formas y me sorprendí al ver la ropa común que me compraba, jeans, camisetas, alguna que otra falda o short, un par de zapatillas y lencería.
Brennan no dejaba de hacer estúpidos comentarios, en especial sobre la lencería.
Su sugerencias no me ayudaban ya que quería vestirme como una prostituta.

Pero todo eso no fue lo peor, lo peor fue ver fotos mías del desfile en un póster gigante, tuve que desviar la atención de Brennan hacia otro lado así que tomé su mano y me puse a correr, arrastrándolo.
-¿Qué coño te pasa?- dijo deteniéndose.
Acabo de robar algo dije y volví a correr pero ya estaba lejos de ver la fotografía.
Salí fuera del centro comercial y lo espere.
Llevamos las bolsas al auto pero antes de subir lo oí.
-Ruby -la voz de Louis me congelo.

No puede ser cierto.

-¿Qué haces aquí? -intente subir  al coche pero tiró de mi. 

-¡Louis basta! -las lágrimas picaban en mis ojos.

-No, tu padre está buscándote con la policía.
-Suéltame -intente zafarme pero Louis no me soltaba.
-Me estas lastimando...
-Suéltala -dijo Brennan en un tono atemorizante.
-Ja- dijo Louis mirando a Brennan-¿Quien es este tipo?
-Nadie, basta- dije para evitar una pelea- Vamos- pero Louis me soltó y la empezó.

-Ella es mi novia, entiendes pedazo de mierda -gritó tratando de intimidar a Brennan pero él solo se rió y le pegó un puñetazo en la mandíbula.

Mierda.

-¡Basta! -grite pero siguieron golpeándose.

Louis es muy bueno peleando y le esta pateando el culo a Brennan.
Mis gritos no los calman así que salte sobre Louis y comencé a golpearlo, no lo hice por mucho tiempo porque este me empujo haciéndome caer  al piso.
-No quise hacer eso- dice y Brennan aprovecha esa distracción para golpearlo. 
-Vamos -le grito  y subo al coche del lado del conductor.
Brennan patea a Louis en las costillas antes de subir.
-Maldito hijo puta -grita este.
-Dios, una chica no manejara mi auto.
-Tu cara esta sangrando idiota ¿Tienes una mejor idea?
-Joder -dice y me da las llaves.
Arrancó y él va guiándome por las calles.
-¿Qué mierda fue eso? -pregunta mientras rebusca en una de las bolsas.
-Lo siento, solo es un ex.
-¿Por qué ha dicho que te busca la policía?
-Dios ¿Por qué la blanca? -digo mientras lo observo limpiarse la sangre con mi playera nueva- Hay más camisetas ahí.
-A  la derecha y contesta ¿Por qué?-dice en un tono serio.
- ¿Por qué realmente te importa? -pregunto
- Porque si hay algo que no quiero es a la maldita policía rondando.

*