Capítulo 29

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•Ahora sí, no escaparás•
Esas palabras resonaban una y otra vez en mi cabeza. Este hombre podía intimidarme con tan solo cuatro palabras. ¡Joder!
–¿Sabes que es de muy mala educación invadir lugares ajenos a los tuyos? –Dije Indignada.
–¿Y tú sabes que también es de muy mala educación dejar a una persona con la palabra en la boca? –Me retó. ¡Mierda! Robert era muy bueno para reclamar y pelear verbalmente.
–¡Me rindo! -Suspiré –Admito que fue desagradable haberte dejado ahí solo.
–Gracias Avril, hasta que por fin me entiendes. –Dijo Robert con una sonrisa triunfante. –Ahora, ¿podemos hablar?
–Está bien, pero no hagas que me arrepienta.
–Bien, me puedes decir ¿por qué estás enojada?
¡Joder, Robert! ¿Acaso no era obvio el motivo?
Di vueltas de derecha a izquierda tratando de sacar las palabras, no quería que pensara que eran celos o algo así. Conociendo el gran ego que se maneja el señor Downey.
–Es que no logro entender lo que haces. -Dije al fin. –Es decir con lo que pasó entre los dos y luego viene lo de Melanie, la verdad no te comprendo.
–Era eso. -Suspiró –Avril mira, eres una chica hermosa... –Es aquí cuando pienso que la única idiota que se ha ilusionado con un tonto beso he sido yo y por qué siempre tienen que utilizar las putas palabras iguales de "Eres una chica hermosa.."? Estoy jodida Y me encanta estar contigo, y amé todo lo que ha estado pasando entre los dos.
Eso sí no lo esperaba.
–Es precisamente lo que no comprendo, ¿sabes? Como puedes decirme todo eso y al día siguiente ver cómo te comes a Melanie –Dije frustrada sentándome en el borde de la cama, cubriendo mis ojos por la pena  que sentía. –Bueno, ambos lo hacen.
–La verdad que no sé qué decirte, Avril. –Suspiró pesadamente –Necesito aclarar lo que siento por eso no he dejado a Melanie.
–No, es que no se trata de que la dejes o no, se trata de que no me involucres a mi, de no confundir más las cosas ¿entiendes?
–Me gustas Avril. –¡Joder! ¿Dijo que le gusto? Maldita sea, el no comprende.

Robert acercó la silla del escritorio en la cual se encontraba sentado, dirigiéndola hacia donde estaba yo, cogió un mechón de pelo que se encontraba estorbando en mi cara y lo apartó colocándolo detrás de mi oreja. Estos segundos en los que nos quedamos viendo, se me hacían eternos y más con la mano de Robert tocando mi rostro.
–Estás poniendo todo esto de cabeza, ¿lo sabes? –Mencioné.
–Shhh! –Dijo colocando dos de sus dedos en mis labios para evitar que hable –Lo sé, pero me encanta.

Su acercamiento aumentaba con cada caricia que él hacía con mi rostro, ¡Joder! Esto está tan mal. ¡Maldito Robert seductor!
No sé por qué dejaba que esto pasara, si sabía que no era lo correcto, aunque era algo nuevo en mi, Robert hacía precisamente eso, que mi mundo se ponga de cabeza, y lo que más amaba de él era ese poder que tenía sobre mi. Aparte de lo encantador que podía llegar a ser con una mujer.
Robert tomó con ambas manos mi rostro, acercándome más a él, lento. Yo sólo podía fijar mi vista en sus ojos, esos ojos color avellana que te podías perder en ellos con tan solo verlos. Mientras que él se fijaba en cada movimiento que yo realizaba, y en especial en mi boca.  Robert fundió sus labios, en un suave beso, pero que hacía que sintiera mil cosas por dentro, al instante cerré mis ojos y disfruté de la sensación. A pesar de que él era cuidadoso, logró meter su exquisita lengua dentro de mi boca, haciendo que el beso subiera de tono, mi lengua con la suya danzaban y parecía que era lo que más deseaban. Finalmente tiró de mi labio inferior, seguida de su lengua, dando un último corto beso.
–Lo siento, no pude contenerme. –A este paso mi cara debe estar tan roja, ¿qué me haces Robert? –¿Estamos en paz?
–Sí -Sonreí –Pero sólo quiero pedirte algo.
–Vale, suéltalo.
–No podemos estar besándonos cuando tienes novia, Melanie puede ser la chica más odiosa que he conocido, pero no lo merece. Por favor no hagas que esto se vuelva un lío. –Comenté seria.
–Está bien Avril. –Dijo asintiendo en señal de aprobación –Hablaré con ella después de la fiesta, para que no te preocupes. 
–Gracias Robert. –Dije más tranquila. –Ahora sal, que me cambiaré de ropa.
–No me botes –Hizo cara de perrito.
–Ya mismo entras, anda, sal. –Dije riendo, el se levantó y con el puchero que hacía salió a esperar a que me haya cambiado.

Una ves que lo hice, abrí la puerta y llevé a Robert a comer conmigo a un restaurant que quedaba a unas cuadras de nuestras casas, ya que Carla no dejó nada hecho. No pasada la media hora, regresamos a casa y nos echamos en mi cama a platicar. Le pregunté como le había ido en los exámenes y al parecer salió más que bien, Robert era de esos chicos inteligentes y aplicados pero que a simple vista no lo parecían.
–¿Irás a la fiesta? –Preguntó Robert, recostado en una de mis almohadas.
–Esta noche decido, no le he preguntado a mamá si puedo ir –Dije acariciando su sedoso cabello. ¡Cómo me encanta hacer esto!
–Si decides ir, puedo llevarte en el coche –Propuso. ¡Oh, no! Papá vendrá y supongo que no tendrá queja alguna si me lo llevo.
–Brian me propuso lo mismo. –Vi como el semblante de Robert cambió –Y pues acepté, claro en el caso que me decida ir.
–¡Avril! No puedes ir con él. –Dijo ceñudo.
–Pues no sólo, iré con él. Camila vendrá con nosotros –Dije tranquilizándole –No te quejes Robbie, tú irás con Mel y yo no estoy haciendo un pleito como tú.
–Vale, vale  –Se rindió finalmente –Ve con él.


***
Al parecer Robert asentará cabeza😱
Ustedes que opinan?😏
Como siempre gracias por leer💘
Nos vemos pronto💜

-DXWNEYAZALEA

El Chico de la Ventana | TERMINADA | Robert Downey Jr Donde viven las historias. Descúbrelo ahora