uno

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Holdest Camp era muy grande para decir verdad. Nunca me hubiera imaginado un colegio así de grande, ni siquiera en mi hogar encontrarías uno como este. Mucha gente por todas partes y yo allí, con mi mochila colgando sobre mis hombros caminando por el largo pasillo tratando de encontrar la oficina del director, el cual debería estar esperándome. 

-Disculpa - Pare a una chica la cual me sonrió coqueta, quizás pensaba que le iba a pedir el número o algo por el estilo. 

-¿Si?

-¿Sabes donde esta la oficina del director?

Bufó y me miró mal, ¿cómo no hacerlo? Si hubiera estado en otra oportunidad si le hubiera pedido el numero.

-Dobla en el primer pasillo, al fondo y después a la derecha.

-Gracias - Dije y me aleje, sin guiñarle el ojo ni nada, sabía que si lo hacía iba a quedar muy mal. Conozco las mentes de las chicas. 



Una vez ya fuera de la oficina del director y con mi horario en mano me dirigí a mi primera clase. Esperaba no perderme, soy pésimo para acordarme de las cosas. 

Varias chicas pasaron por adelante mío y me sonrieron al igual que la chica de antes, ¿todas eran así? Me gusta este colegio, entonces.

-¡Luke! - Mire para todas partes, no encontraba al que había gritado mi nombre - ¡Acá estúpido! - Mire a mi derecha y se encontraba mi primo, Drake, sacudiendo su brazo de izquierda a derecha. Me acerque a él con un paso decidido. El estaba con, al parecer, sus amigos - ¿Qué onda, primo?

-Y, por ahora todo marcha bien. Lindo colegio.

-Diras, lindas chicas - Rió uno de sus amigos y todos le siguieron. Me reí por cortesía, no había sido un buen chiste. 

-Estoy medio perdido igual.

-Te acompaño a tu próxima clase - Agarró mi papel escrito con mis horarios y empezó a caminar. 

Mientras caminábamos charlamos sobre las vacaciones y demás. Hizo varios chistes y luego me contó sobre las diferentes chicas con las que que podía podía salir del colegio mientras las señalaba disimuladamente con la cabeza.

Una chica paso al lado de nosotros, sin sonreírnos, sin decirnos nada, ni siquiera nos miro. La mire bien. Eso había sido raro, viendo como todas salían a saludarte. Vestía un buzo verde, en el cual tenía algo escrito, que no pude ver lo que decía. Unas Vans comunes ocupaban sus pies y un jean sus piernas. No mostraba nada de interés en mostrar su cuerpo. 

-¿Quién es ella? - La señalé disimuladamente y Drake hizo una mala cara.

-Ah, ¿ella? Hayley Host. No te conviene estar con ella.

-¿Por qué? 

-Es rara. Anda sola todo el tiempo. No habla con nadie y se la pasa con sus auriculares. No se viste sexy, ni tampoco se maquilla. No la veo sonreír y por lo tanto, no la veo coquetear con nadie. La conozco desde su primer año, pero antes era diferente. Este año esta así.

-Diferente, ¿cómo que?

-Hablaba, con poca gente, pero hablaba. Se ve que a su amiga, Amber, la cambiaron de colegio o algo por el estilo. Salí con Amber una vez, era una linda chica. 

-Entonces, ¿es antisocial? 

-Así parece. Por lo tanto, creo que podrías empezar saliendo con alguna de las chicas que te sonrien. Te lo juro, no se acaban. Olvídate de Host. 

Pero claramente, no pensaba olvidarme de ella.

she | luke hemmingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora