Careless Heart

Capítulo 6.

Me levante de mi puesto algo confusa. estábamos esperando a Jace pero obviamente no era el quien tocaba la puerta.  Les dedique una mirada a cada una de mis amigas presentes y caminé con mi ceño fruncido hasta la puerta.

Cuando estuve lo suficientemente cerca para observar quien se encontraba frente a la puerta, logré ver a Billy. Mi corazón empezó a bombear más rápido de lo normal, y no precisamente por emoción.

Estaba muy atento a su teléfono, empecé a dar pasos hacia atrás para volver a la sala mientras me aseguraba de que no levantara su mirada. Cuando estuve fuera de su ángulo de visión corrí rápidamente hasta la sala.

Emma, Bárbara y Lily me miraron rápidamente. -Es Billy.- Dije con el aliento atascado en mi garganta.

Los ojos de Bárbara se abrieron al máximo. -Dios mio-  Susurró mientras frotaba su cara con una mano. 

Billy era un chico de nuestro instituto quien fue mi novio. Era un idiota, pero como si ser un idiota no fuera suficiente, sí nos pedían describirlo con una sola palabra…No dudaríamos en decir “Acosador”  No hay una persona del sexo femenino que no pueda decir que el nunca la ha atacado. A excepción de Adri, la chica rara

Escuchamos como volvían a llamar a la puerta. -Ya vengo- Dije mientras salía de la sala y volvía a caminar hasta la puerta. No había más opción. Solo hay que terminar con esto. No me va a violar en la puerta de mi casa, creo.

Una vez frente a la puerta me apoye sobre el marco. Suspiré lo que hizo que se diera cuenta de mi presencia.  Levanto su mirada de la pantalla de su móvil para mirar a mis ojos. Una sonrisa se formo en su rostro. -Hola hermosa.-  Me envió un giño.

Me puse incomoda rápidamente. Todo que ver con mi pasado. -Hola.- Dije por lo bajo mientras bajaba mi cabeza.

Escuché un suspiro por parte de el. -¿No me dejarás pasar?-  Preguntó haciéndose el tonto, el ya sabía la respuesta. No es la primera vez que lo dejaría hablando fuera.

Negué y levanté mi cabeza.  Decidí echar a la basura lo tímido. No es la primera vez que viene a mi casa. No debería extrañarle que lo deje afuera. -No.- Dije mientras me encogía de hombros. -¿No te has acostumbrado?- Pregunté con mi ceño fruncido. -Digo…Siempre que vienes llegamos al mismo lugar- Me crucé de brazos. - O debería decir, siempre que vienes no llegamos a ningún lugar-

Mordió su labio. Probablemente no se esperaba eso de mí. -Lo siento- Bajo su mirada, JA como si estuviera apenado. 

-Que te disculpes hoy no cambia los hechos- Dije mientras lo miraba con reproche.-¿Qué esperas?-  Pregunté esperando a que se largara.

Este levanto su vista para mirarme a los ojos  mientras una sonrisa se marcaba en su  rostro. -Que linda te ves desafiándome- Dijo mientras levantaba su mano para acariciar mi brazo.

Di un paso atrás para apartarme de su agarre. -Vete.- Dije esperando que se fuera. Podía ser ruda, pero si sobrepasan el límite, es donde todos los recuerdos vuelven y probablemente termine en mi habitacíon abrazando mi osito de peluche favorito.

Este negó con su cabeza mientras mantenía su estúpida sonrisa. -¿Irías a una fiesta conmigo esta noche?-   Preguntó.

-¿Alguna vez te cansarás del rechazo?-  Suspiré. Se que estoy siendo mala, pero que puede essperar de mí una persona que realmente no hizo nada bueno mientras estabamos en un relación y ahora quiere disculparse y esperar a que todos los hechos cambien.

Una sonrisa macabra se marco en su rostro. -Depende de quien sea.- Cada vez se acercaba más a mí -Viniendo de ti..-  Negó levemente con su cabeza. -No me rendiré-  Susurro como si lo que acabará de decir era muy romántico o causaría algún efecto en mí.