Capitulo 2

458 21 2
                                    


Ya había llegado, si, al fin puedo comenzar de cero, hacer lo que todo el maldito mundo hace cada día de su miserable vida, al fin llegue a Chile, el viaje al parecer no fue tan mal como pensaba, aun que haya viajado en primera clase, la comida del avión es un asco, soné como una diva.

  —Lenay, te estoy hablando—. Dijo mi madre.

—¿Que quieres?—. contesté brusca.

—¿Uh?

—Perdón, ¿Que pasa madre?—. Repetí con educación, pero con una pisca de sarcasmo. 

  —Solo te aviso que... —.Pauso—. llegamos a casa, bájate. 

Baje del auto y luego cerré la puerta con más fuerza de la que pretendía haciendo que mi madre me llame la atención, me volví a disculpar. La casa era moderna, acuerda a lo de mi madre, me gustaría algo más simple, jamás fui de esas que AMAN gastar plata en ropa a ultima moda y zapatos a morir. Puff...

 Mi madre abrió la puerta dándome visión del adentre de la casa, era más grande por dentro, al ver a había unas escaleras modernas llevando al segundo piso, me adentre más a la casa, yendo al living, en esta misma se encontraba un mesa chica de vidrio encima de esta se encontraba dos plantas que se notaba lo falsan que eran, frente de la mesa se encontraba un sofá color beige y a lado dos sillas solitarias. 

  — Lenay, puedes ir a ver tu cuarto —

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

  — Lenay, puedes ir a ver tu cuarto —. Dijo con una sonrisa parecida a la del Sr. Burns, o la de maléfica, o peor.  —Arriba, segundo cuarto a la izquierda.

Asentí y me dispuse a ir a mi nuevo cuarto, al llegar quede con la boca abierta, al entrar se podría ver una cama de dos plazas de color celeste pastel, las paredes estaban pintadas del mismo color, a lado de mi cama se encontraba una lampara del mismo color, tenia un balcón que en este momento se encontraba cerrado y con unas cortinas de color celeste, una estantería llenas de libros, estaba todo lo que podría querer. Era todo perfecto.

 Era todo perfecto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Escuche el timbre y el grito de mi madre pidiéndome que vaya abrir.

Baje casi corriendo, una vez que llegue a la puerta la abrí y me encontré con  una familia. La mujer tenia una sonrisa de oreja a oreja parecía muy simpática, a su lado dos hombres, supongo que sus hijos, uno de ellos parecía no querer estar aquí en este momento, su aspecto daba miedo parecía esos típico chicos malos de película, o aun peor, en cambio el otro parecía igual de simpático que la mujer 

—O hola, ¿la puedo ayudar en algo señora?—. hable. Si no soy muy buena estableciendo conversaciones.

—Hola, no hijita, yo y mis hijos queríamos darles la bienvenido —.Dijo Entregándome una canasta. Noté como el chico que parecía típico de una película había bufado.

—Oh, muchas gracias, señora, pero no es necesario —Dije intentando devolverle la canasta pero lo rechazo.

—Uh, hola ¿necesita algo?—Dijo mi madre.

—No solo vengo a darle este regalo de bienvenida.

—Oh, no es necesario, pero gracias.

—No quédeselo, nosotros vivimos acá a lado si necesita algo, no dude en llamarnos.

—Muchas gracias, ¿que le parece venir en esta noche a cenar con nosotras? en forma de agradecimiento por la bienvenida.  

Solo estaba enfocada en mi madre y en la buena que podría ser, me comencé a sentir analizada, miro hacía el chico que aparenta ser de película y note como me observaba de pies a cabeza, su pelo era un tanto rojizo, alzo una seja para luego rodar los ojos.

  —Bueno, hasta la noche.

¿Que? 

—Hasta la noche. —Finalizo con la conversación. 

Cerró la puerta 

  —Ponte linda para esta noche, Cecilia y sus hijos vendrán a cenar.

¿Que mierda? 

❝Mi favorita❞ [Gernay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora