Dylmas// Newtmas Stuff

El destello de luz

Dylan O'brien; el chico de 18 años, se encontraba sentando en la cama del nuevo cliente a quien lo contrato esta noche. Se encontraba nervioso, no sabía si estaba haciendo lo correcto o no, después de que su familia lo echaron por ser Gay hace 2 años, Dylan ha tratado de conseguir trabajo pero sin estudios terminados no lo conseguía, lo único que se le ocurrió fue prostituirse . Aunque no era un trabajo "decente" conseguía el dinero...muy apenas

Pasaron segundos, minutos, horas y el cliente no llegaba a su casa. La paciencia desaparecía poco a poco en la mente de Dylan y lo único que se le ocurrió fue respirar profundo para calmarse...nada, trato otra vez, no podía. Se levantó desesperadamente con la agitación fuerte y tomó su mochila, la abrió y saco unas pastillas, estaba a punto de tomarlas cuando de repente se escuchó una voz
-¿Quién eres?
Se dio la media vuelta y había un pequeño niño de más o menos de 12 años , pelo güero y ojos oscuros.
Dylan no sabía que estaba haciendo ese niño ahí, a lo mejor era el hijo, sobrino o sea lo que fuera del cliente, no sabía que responderle así que el niño volvió a preguntar
-¿Quién eres?
Soy...Dylan- contesto el castaño- ¿tú eres?
-Thomas...-respondió tímidamente el niño-¿Qué haces aquí?... ¿Dónde está mi padre?
-Um...supongo...que no ha de tardar-dijo Dylan- ¿p-porque...no vuelves a dormir?, tu padre llegará en unos minutos
-Pero...no puedo dormir...tengo miedo
Genial . Lo que me faltaba- pensó Dylan –Tranquilo, ahorita que llegue tu padre...
-¿Por qué estás casi desnudo?-dijo el pequeño Thomas. Dylan había olvidado que estaba en boxers rápidamente busco la manta y se tapó – Este...yo...bueno es que.... ¿porque no te vas a la cama de una vez?
-No quiero-respondió Thomas con un puchero- tengo miedo que la oscuridad me lleve
-Eso es absurdo- contestó Dylan-la oscuridad no hace nada...solo es...oscura
-Pero es cierto, una vez, soñé que la oscuridad me llevaba lejos de mi papi
-Pero solo fue un sueño. Ahora vete a dormir- después de esto Dylan trataba de abrir el paquete de las pastillas. Esto era una locura, el cliente no llegaba, no sabía que tenía un hijo y lo ve en boxers, tanta confusión y desesperación dejo caer la caja de las pastillas al otro lado de la habitación
El pequeño se adentró a la habitación, tomo la caja de las pastillas que estaban en el suelo y se acercó al adolescente tímidamente con la caja en su pequeña mano
-¿Estás bien?-preguntó el menor mirando al mayor
Dylan puso sus ojos en los del pequeño, miro la caja y la tomo- Sí estoy bien, gracias- guardo la caja a su mochila. El pequeño no dejaba de mirar a Dylan, él sabía que Thomas no se quería ir a su habitación, así que suspiro y miro nuevamente a Thomas- te quieres...- no termino la oración, pues Thomas sonrió y se subió a la cama de su padre. Eso hizo que Dylan riera un poco
Dylan se puso la playera y dirigió la mirada al pequeño Thomas- así que...Thomas... ¿qué quieres hacer?
El menor puso una cara pensativa y luego respondió-  ¡Juguemos a la guerra!
Dylan sonrió y se pusieron manos a la obra, Dylan acomodó las almohadas como un escudo mientras que Thomas sacaba del armario de su padre unas pistolas de juguete que le había quitado éste como castigo, le paso una pistola a Dylan y preparaba la suya
- ¿Estás listo soldado?- preguntó el castaño
-Aun no- el menor se quitó el pantalón y lo arrojo al otro lado de la habitación
-Pero que...- dijo Dylan
-Tú estas sin pantalón, yo también-sonrió Thomas
Los 2 empezaron a jugar a la guerra, aventaban las almohadas a la pared, imaginándose que era el enemigo de ellos, disparaban a todos lados, había risas y gritos de felicidad. Dylan jamás se había sentido tan feliz en su vida, era como si la oscuridad en su mundo había desaparecido por completo, pues encontró el pequeño rayo de luz. Miró al pequeño que estaba disparando a la pared y sonrió
-No se distraiga soldado- dijo Thomas-¡ los nazis nos atacan!- apunto al techo
y ambos volvieron a la jugada. Tiempo después ya se estaban persiguiendo por toda la habitación. Thomas se subió a la espalda de Dylan y éste empezó a correr por toda la recamara luego, Dylan tiro a Thomas a la cama y empezaron a pelearse con las almohadas
Se podía respirar la felicidad, tanto Dylan como Thomas habían olvidado sus problemas ,pues habían encontrado el momento feliz.
Después de un rato, los 2 ya estaban completamente dormidos, respirando profundamente.
El pequeño Thomas empezó a moverse poco a poco, luego se empezó a quejar pero en voz baja, Dylan abrió los ojos y miro al pequeño y escuchó sus sollozos
-Hey, hey tranquilo campeón- dijo Dylan acercándose al menor para acariciar su cabeza. Poco después Thomas ya se había tranquilizado, se dio la media vuelta sin abrir sus ojos y puso su cabeza en el pecho de Dylan. El castaño se sorprendió un poco pero luego sonrió y cerró sus ojos .

Segundos después se escucha que la puerta se abre y era nada más ni nada menos que el cliente de Dylan. Un señor de aproximadamente entre 32-34 años, llevaba puesto un traje y se sorprendió a la escena que estaba en frente de sus ojos, su chico seductor de esta noche junto con su pequeño hijo, sin pantalones.
-¿Qué rayos está pasando aquí?
Dylan se levanta  rápidamente  de la cama
-N-nada...solo estábamos
-¿Qué le hiciste a mi hijo?
-Nada señor. Lo juro
El señor dio una mirada de arriba hacia abajo a Dylan – Entonces... ¿Qué hace mi hijo aquí?
-Él...lo buscaba porque tuvo una pesadilla...lo llevare a su habitación...
-No. No es necesario. Yo lo hago- se dirigió a su cama y levantó al pequeño Thomas- Thomas...despierta, ya es tarde, hora de irse a la cama
-No papi...no quiero
-Thomas, no me hagas esto
-Tengo miedo
-Ya te dije, la oscuridad no hace nada, vamos- El padre lleva a Thomas a su habitación, se regresa y cierra la puerta
Dylan se quedó parado en medio de la habitación
-Bien...no te haré nada porque...- se acerca a Dylan- esta noche es nuestra
-Disculpe pero...
-Nada-respondió el señor- te estoy pagando para que seas mío esta noche- le pone el dinero en el pantalón de Dylan- ahora, haz tu maldito trabajo
El pequeño Thomas escuchó todo pues estaba en la puerta de la habitación de su padre, aunque algo confuso y sin pensarlo 2 veces se dirigió a su habitación a toda prisa
Mientras Dylan trataba de zafarse del cliente, este ya estaba arriba de él, besándolo por todo el cuello, sabía que esto era un error, pero se dejó llevar un poco con los besos, el cliente lo zafo un poco y en ese instante Dylan se apartó de él bruscamente y se levantó de la cama
-¿Qué rayos haces?, ¡te pagué para que fueras mío esta noche!
-Pues aquí está el rembolso- le tiro el dinero a la cama y se puso el pantalón- Lo siento- abrió la puerta de la habitación y salió a toda prisa de la habitación del departamento, toco el botón del elevador y presiono el botón de la planta baja, mientras que el elevador bajaba, sacó la tableta de las pastillas, nerviosamente no podía abrirlas, aparte de que las lágrimas inundaban sus ojos se rindió. Se deslizo y puso sus manos en su rostro para llorar.
La puerta del elevador se abrió y Dylan seguía sin ponerse de pie, pero alguien toco su hombro, lentamente se quitó las manos de su cara y dirigió su mirada a ese pequeño rostro familiar.
-¿Estás bien?- preguntó Thomas
Dylan asintió pero las lágrimas no dejaban de salir. Thomas se sentó en el suelo del elevador sin dejar de mirar a Dylan. Limpio las lágrimas que no dejaban de salir de los ojos del mayor mientras que éste miraba al pequeño algo asombrado, pero después suspiro y se tranquilizó.
Ya dejando de limpiar las últimas gotas de Dylan  preguntó:
-¿Cuánto te pago mi padre?-
Esa pregunta le sacó de onda a Dylan, miro al pequeño y no pudo responder. Thomas tomo la mano de Dylan y le colocó 20 dólares
-Thomas... ¿Por qué me das esto?
-Porque quiero que seas mi amigo...
El mayor sonrió ampliamente, tomo la mano del menor y le devolvió los 20 dólares- Tu ya eres mi amigo- contestó Dylan
Thomas también sonrió – no te vayas, por favor
-Tengo que irme
Thomas agacho su cabeza pero Dylan la levanto lentamente- pero pronto volveré
-¿Y la oscuridad?, no quiero que me lleve Dyl...
Dyl..ese pequeño apodo pronunciado por la boca del menor le provocó un cosquilleo en el estomago. Sonrió y respondió : Descuida, ya supiste como derrotar nuestra oscuridad
-¿Nuestra?
-Si-contestó Dylan- Aunque no lo creas, también tenía miedo a la oscuridad pero luego encontraste la solución
-¿Cómo?
-Encontraste el destello de luz que desaparece la oscuridad. Los momentos felices Tommy, los momentos que tú y yo pasamos está noche, nunca lo olvides .
El chico sonrió y abrazo fuertemente a Dylan, este le devolvió el abrazo, no se quería separar de Thomas. Aunque llevaba poco de conocerlo, este pequeño se ganó su corazón en esa misma noche , era su destello de luz, ese destello derrotó la oscuridad de Dylan y Dylan era el destello de Thomas, pues derroto la oscuridad del pequeño. Ambos se separaron y salieron del elevador.
Dylan le prometió que visitaría a Thomas seguido, para que el destello que tenían ellos, siguiera iluminando la oscuridad de su pequeño mundo.

Ya volví después de 84 años sin publicar :3
Este pequeño fallo intento de historia está inspirado en un video que vi hace uuuh pero no me acuerdo cómo se llama <'/3
Bueno chau :*