Cuando Sentí Terror

Suicide Home

En la ciudad de Liverpool, existe un área que fue cerrada hace más de una década. La gente no tiene de lo horrible que se esconde en esa zona.
El gobierno creo hace 83 años,
El Asilo Mcgee Lavender para gente con problemas mentales y suicidas. Pero los que han estado allí Lo llamaban SUICIDE HOME.
La hermana de mi abuela trabajó allí por tres años. Decía que era la peor cosa que había visto en su vida. Las condiciones de vida eran inhumanos y los médicos constantemente maltrataban a los pacientes y le hacían empeorar su estado mental.
El director mismo murió en las celdas del Asilo. En el ala oeste.
—Yo creo que la hermana de tu abuela estaba medio loca—me dijo entre risas Dewey— cuando se cerraron las puertas del Asilo mataron a todos los lunáticos de ese condenado lugar—.
—Yo creo que es un lugar muy horrible—dijo medio asustado Frank— Tom Gerber fue con dos amigos y su novia y no los vi nunca más ni a él ni  a sus amigos—.
Yo la verdad no sabía si reírme con ellos o asustarme. Porque el Asilo es un lugar espantoso. Esos sentimientos se agolpaban en mi cabeza.
El Sr. Pratchett se acercó con el ceño fruncido hacia nosotros.
—Quizás, señor Wilkins, pueda decirme la fórmula de la presión hidrostática, sino le molesta—.
Trague saliva con nerviosismo. Odio Física con todas mis fuerzas y no estaba prestando atención en esta clase.
—Ehh lo siento profesor, pero no lo se— le contesté con nerviosismo.
El Profesor sonrió conforme.
—Era obvio esperarlo de usted—dijo seriamente— espero que apruebe el examen de mañana—.
La verdad es que odio Física.

Sonó la campana y llegó el momento de irnos a nuestras casas. Justo cuando me estaba subiendo a mi bicicleta, Dewey me frenó.
—Wilkins ¿vamos a la casa de Frank por la tarde?—me pregunto con una sonrisa pícara.

—No lo dudo mucho—le dije medio decepcionado— Hoy tengo que encargarme de la casa—.
Dewey largó un gruñido.
—No sales nunca de tu casa, ¿no es cierto? no te van a matar por dejar UNA tarde tu casa con seguridad extrema— lo dijo como un tono quejoso.
"Mis papás me romperán la cara si la dejo sola" pensé para mí.
—¿Sabes? Aposté de que si venías a la casa de Frank, él tendría que entrar en el Asilo con solo una linterna!! Jajajaja!!! Es fantástico, por favor ven esta tarde— me dijo mientras se alejaba hacia el coche de sus padres.
Yo me subí a mi bicicleta y me dirigí hacia casa.
Llegué y encendí mi Laptop. Abrí mi cuenta de Facebook y me puse a hablar con Frank.
Johnny Wilkins Farrel😌😌: Frank tengo hambre y mucho sueño😭🍖🍞🍖. Jajajaja.
Frankie Carver😎😝: Jajaja, pide comida china cuesta como 18 dólares😂😂😂.
Johnny Wilkins Farrel😌😌:
😒😒😹.
Frankie Carver😎😝: Jajaja.
Johnny Wilkins Farrel😌😌:  Hoy iré a tu casa y tendrás que entrar al Asilo!!😈😈😆😆.
Frankie Carver😎😝: Dewey te contó la apuesta?? 😠😂.

Hablamos durante una hora. Al final, Frank acepto la apuesta. Se lo conté rápidamente a Dewey. Nos reímos mucho. Aunque Frank aceptó, se lo notaba nervioso. Pero al fin y al cabo, no estaría toda la noche en el Asilo Mcgee Lavender.
La idea de ver entrar al cobarde de Frank era fantástico.
Comí unas papas fritas y me fui a dormir.
Cuando me desperté miré el reloj y eran las 5:30 de la tarde.
Me levanté chocandome con todo a mi paso y fui al baño.
Al rato me llamó Dewey.
—Johny ¿vienes enseguida?—me pregunto ansioso—jajaaja es que tengo muchas ganas de Frank entre al Asilo—.
Le conteste que iría en unos minutos. Me di una ducha, agarre mi mochila y me fui para la casa de Dewey. Allí nos reímos un rato y comimos antes de llevar a cabo nuestra actividad nocturna.
—Ey, chicos, ¿sera seguro si voy solo? Podrían entrar conmigo—
Obviamente Dewey y yo nos reímos mucho.
Pensábamos que Frank era un gallina. Solo entraría una vez en su vida y saldría sin problemas, pero en fin que se podría hacer.
— Esta bien, entraré —dijo medio asustado Frank— pero quiero que se queden aquí afuera a esperarme—.