Narra Jack.
Un barco bastante animado, soy el mayor de 4 jóvenes: una hermosa princesa de noble corazón, un caballero despistado y torpe, un navegante misterioso y una cocinera con secretos...
No sé cómo son físicamente pero eso es lo de menos... desde que subí al barco todos me tratan amablemente, a excepción de cierto caballero, si pudiera ver su rostro estoy seguro que tendría una expresión de odio cada vez que me acerco a la princesa, quería decirle que no tengo malas intenciones con ella, pero al parecer es muy obstinado y terco.
Me pregunto de dónde lo habrá sacado...
-¡Oye! Jack... ¿podemos hablar?- me habló serio el caballero, cada quien estaba en sus asuntos, la capitana tomaba un baño, el navegante leía en la biblioteca y la cocinera en su deber.
-Me parece bien...- me levante y lo seguí hasta la habitación de nosotros. –Tu dirás...-
-¿Qué planeas al estar aquí?- dijo directo o al menos trato.
-¿Te molesta que hable con Medanne-chan?- dije y chasqueo la lengua, estoy seguro que está rojo. –No te preocupes ella podría ser mi hija...- comencé a salir y despeine su cabello. –Y como tal la protegeré de todo, incluso de ti si es necesario...- sentí como se tensó y yo sonreí.
Narra Corazón.
¿Protegerla de mi? ¡¿Acaso no sabe que el que más se a partido la espalda por Medanne soy yo?! Cuando me di cuenta ya había salido, maldita sea... no le iba dar muchas vueltas al asunto y decidí entrenar, me quite la camisa, en mi brazo derecho siempre cargo un vendaje, este lastimado o no, la razón... un tatuaje que me hice cuando cumplí 15 años, quise tener algo que me relacionara a Law-san, así que en este brazo imite el tatuaje que él tiene, sin embargo desde que fui exiliado lo oculto, tal vez busco ocultar mi vergüenza o sólo es un berrinche de mi parte, pero hasta no volver no me quitaré esta venda.
De repente una voz me trajo a la realidad...
-¿Cora-san?- me voltee, era Medanne, por una extraña razón sólo traía la toalla, no pude evitar sonrojarme, qué demonios quería y vestida así.
-¿Qué pasa?- desvíe la mirada.
-¿Estas herido?- dijo acercándose a mi tocando mi brazo.
-No tengo nada... ¿se te ofrece algo?- seguían sin verle, trato de ser fuerte.
-Bueno salí del baño y Jack-san me dijo que necesitabas hablar conmigo...- dijo tímidamente, no puedo creer que sea tímida para hablarme y no le de pena pasearse por el barco semidesnuda y ese maldito de Jack, porqué la mando aquí.
-Se... abra confundido... estoy bien...- suspiro aliviada.
-Me alegra que estés bien...- me mostró esa sonrisa llena de ilusión, al diablo el autocontrol, cuando me di cuenta me encontraba sobre ella, ambos en el suelo, ella sostenía su toalla, yo la tenía rodeada, mis brazos a los lados de su cabeza, mi cuerpo a centímetros de ella, mi rodilla derecha separando sus piernas.
-¿Cora-san...?- dijo extrañada, algo confundida, puso sus manos en mi pecho buscando apartarme, ese tacto no me ayudaba, molesto tome sus manos sobre su cabeza. –¿Qué te pasa?- al fin un tinte rosa se posó en sus mejillas, se tensó cuando acerque mis labios a su cuello.
-Deja... de provocarme... así... un día... un día no me contendré...- contuvo por un instante la respiración, volví a mirarla, parecían tan confundida, quería besarla y lo hubiera hecho, pero la voz de Grace nos interrumpió.
-¡A comer!- me levante y ayude a Medanne a ponerse de pie.
-¿Cora-san... qué...?- la interrumpí.
-No digas nada...- le di la espalda. –Vete a cambiar...- ella salió, su expresión era de sorpresa y confusión es como si...
-¡Vaya! ¡Vaya!- escuche la voz de Gally en la puerta, estoy seguro que me puse pálido. –¿No querías la comida y te fuiste por el postre?- lo dijo burlón, ahora estaba rojo, pero de la ira.
-¡¿Qué quieres?!- voltee a verlo molesto.
-Sabes...- se cruzó de brazos y acomodo sus lentes. –Si quieres algo con la Capitán mi consejo es que seas directo, esto qué pasó no hizo más que confundirla- maldito sea, llamó mi atención.
-¿A qué te refieres?- calme un poco mi expresión.
-Normalmente las Kujas no saben nada de las relaciones hombre-mujer, cuenta la leyenda que cuando una sale de Amazon Lily regresa embarazada y eso ocurre porque los hombres se aprovechan de su ignorancia del sexo opuesto...- me sorprendí. –Puedo apostar que aunque pasó su vida en alta mar su familia nunca se le explicó cómo se crea un hijo... estoy seguro que sólo sabe que los hombres le hacen "cosas malas" a las mujeres, pero no sabe qué...- eso me explica muchas cosas. –Bueno te dejo, pero ya te lo dije... cambia tu estrategia...-
Maldita sea, no sólo soy un pervertido, también soy un depravado... suspire, apenas eran como las 3 de la tarde y este día fue una burla para mí... creo que Jack tenía razón, debe cuidarla de mi.
Narra Medanne.
Entre al cuarto que comparto con Grace, mi corazón latía muy rápido y no sabia por qué... sólo recordar a Cora-san sobre mi hace que mis mejillas se pongan rojas, pero no entendía a qué se refería con contenerse... ojalá estuviera Nyonba para preguntarle...
Sin darle muchas vueltas al asunto, me vestí con una falda larga, y una blusa ombliguero de manga acampanada, de colores azules, me puse mi pendiente y mi sombrero, ya más relajada fui a comer.
Según Gally faltaba poco para llegar a una isla, ahí podríamos abastecernos, y descansar, me emociona pensar en una aventura.
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(One Piece) Princesa Pirata. 2a Temporada.
FanfictionDespués de los hechos en Marineford, del encuentro con el rey pirata y la desdicha de conocer a Kurohige. La aventura de Medanne continúa en el Shinsekai....