(One Piece) Princesa Pirata. 2a Temporada.

Capítulo 18: La era de cruce. Nueva y vieja generación.

Narradora.

Han pasado varios días, desde que las noticias de la subasta se extendieron por todo el mundo, toda clase de personas se enteraron de lo que está apunto de ocurrir.

En alguna parte de North Blue...

-Así que este es tu plan...- mientras miraba el periódico. –Sin duda es mejor de lo que espere... Mugiwara-ya...- Bepo se acercó. –Prepárense, vamos a Shinsekai...-

-¡Enseguida!- sus hombres comenzaron a movilizarse.

-Pronto nos veremos Corazón...- ocultó su mirada, y sonrío con cierta alegría. –Veremos que tanto has crecido...-

Mientras tanto en Grand Line.

-¡¡Gyahahahha!!- carcajeo un Pirata ya conocido en el mundo. –¡El gobierno mundial desea juntar a todas las ratas! Si las capturó ya no tendré rivales para hacerme del título del rey de los piratas...-

Se imaginaba sobre una pila de piratas derrotados, él regocijándose por su logro.

Tashigi estaba en su acorazado, leyendo el informe de su misión.

-Ya veo... con la aparición de la princesa Pirata, el gobierno busca erradicar de una vez a todos los piratas...- suspiro. –Mi deber es capturarlos y juzgarlos, no importa que han hecho, todos son piratas...-

En Shinsekai cada grupo de los piratas de la nueva generación, se preparan para salirse con la suya, pero no caer ante el gobierno mundial.

Gingerbread Kaizoku.

En un barco muy grande, de colores pastel, jardines y juegos, en una mesa llena de pasteles estaban Schokolate y Karamell.

-¡Debemos ir a Dressrosa!- gritó el niño.

-Pero ¿por qué? Nosotros ya somos usuarios...- dijo con cara de fastidio su hermana.

-Pues... porque...- no sabia como explicarse.

-No me digas... quieres probar todas las dulcerías de Dressrosa...- completo la menor.

-¡No existe nada más valioso que los dulces!- grito con una cara de emoción.

-Lo sabía...- dijo soltando un suspiro de resignación. –Aveces me pregunto si realmente tú eres mi hermano mayor...-

Olimpus Kaizoku.

En un barco más grande que el Sunny, pero no tanto como el de los Gingerbrad Kaizoku, era una tarde tranquila para el joven de cabellos verdes.

-Está trampa nos llama a todos a ir, principalmente a la diosa...- leía el periódico en el nido de pájaro. –Durante el camino podemos encontrar dificultades, el Shinsekai se ha vuelto un poco más peligroso...-

-¡¡Hermes-sama!! ¡¡Lleva dos días ahí!!- gritó uno de sus nakamas. –¡Debe bajar a comer algo!-

-¡Retírate! Bajaré hasta que hable con mi padre...- al sujeto de abajo se le erizó la piel, de escuchar a su Capitán así, acatando la orden.

Wonderful Kaizoku.

Saide se encontraba en una mesa de té, rodeada de sus nakamas.

-Nuestro nuevo objetivo es Dressrosa, en el camino nos encontraremos con obstáculos, que incluyen, la Marina, cazarrecompezas y otros piratas, los más fuertes llegarán ahí... pero sólo los mejores saldrán con vida de ahí... y ¡¡la más grandiosa y poderosa Pirata, obtendrá la Mero Mero no Mi!!- se levantó, con la taza de té en mano. –¡¡Es decir yo!!-