- Ay Ana, ya, no me hagas reir - le supliqué con los ojos llorosos - Me duele todo.
- Lo siento, es que de pronto lo recorde, fue tan simpático - se rió y sacudió la cabeza - En serio, la cara de la tipa fue de lo mejor, se las daba de muy aca pero no aguanto siquiera un chorro de sangre.
- Me lo imagino - trague saliva y me abrace la cintura - Te voy a extrañar, eres mi primer amiga en mucho tiempo - le dije sincera, fruncí los labios en una mueca.
- No hay porque extrañarnos _____, podemos salir a pasear o a comprar cosas para el bebé en mis dias libres.
- Eres un genio, si, eso eres, un genio - le sonreí sincera, ella me imitó - Me gustaría que cuando llegue el momento tú seas la que reciba al bebé, quisiera que fuese a ti una de las primeras personas que viera, porque lo cuidaste en estos días. - me acaricie el estomago plano.
- Gracias - suspiró y caminó hacia la puerta - Tengo que revisar a los demas pacientes, eh... tu hermano no debe tardar en regresar. - se sonrojo un poco.
- A alguien le gusta Andrew - canturree con una sonrisa.
Ella nego espantada con la cabeza y salió de la habitación, Ana se había convertido en una persona de confianza, ella me cuidaba por las mañanas cuando mamá y mis hermanos tenian que ir a trabajar y estudiar, juntas jugamos cartas y contamos anecdotas tontas, ella queria ser una gran enfermera, y debo confesar que iba por buen camino, no se le iba ni una al momento de revisarme, me sentia menos adolorida que el primer día, por suerte, esa noche iria al fin a casa. La puerta de mi habitación se abrió mientras yo jugaba al Solitario.
- Eh, bobo, te perdiste a Ana - me reí para Andrew, acomode un As a un lado - Creo que deberías invitarla a salir, o ya sé, deberíamos contratarla para que me cuide en casa - levante los ojos para ver su reacción, pero no era Andrew el que estaba frente a mi.
- Yo... no quiero salir con nadie por ahora - murmuró y sonrió, abrí los labios sorprendida, su nombre se escapo de mi boca involuntariamente.
- Jace.
- _____ - inclino la cabeza en saludo.
- ¿Que haces aquí? - tragué saliva nerviosa, él tampoco era la persona favorita de mis hermanos y si Andrew lo veia...
- Me entere de que estabas aquí, ahora todos tus movimientos son publicos - me recordó mientras metía sus manos en los bolsillos, asentí deacuerdo - ¿Ya estas mejor?
- Si, por suerte, gracias por preocuparte - me abrace los codos, el se apoyo en el final de mi camilla.
- Me sentía algo responsable, ya sabes, el idiota deseguro no se quiso hacer cargo por mi culpa - suspiro y me miro arrepentido, yo fruncí el ceño - Escuche que estabas aquí por él, algo de una pelea o no se que.
- Que va Jace no fue tu culpa el que él no quisiera hacerse responsable, fue culpa de él - le aseguré sincera - Y discutimos porque me pidió que... me pidió que abortara - confese, Jace abrio los ojos - Sip, ese fue el problema.
- ¡Es un maldito imbécil! - bramo molesto, me encogí un poco de hombros, si tuviera que contar cuantos imbéciles se habían cruzado en mi vida no me alcanzarían los dedos de las manos. Jace camino hasta estar junto a mi, se inclino un poco para estar mas cerca, gruñí mentalmente, sus dedos rozaron una de mis mejillas - _____... - murmuro y miro mis labios, trague saliva al saber cual sería su siguiente movimiento.
- No, Jace - le puse las manos en el pecho para alejarlo, él se separo un paso, tomo una de mis manos.
- _____, yo puedo hacerme cargo de ustedes, no necesitas a ese...
