Los Hijos De Los Dioses (En Edición)

Capitulo 25 🌟Editado🌟

(Bronte)

Estábamos en casa de Aaron como todos los días, el único que faltaba era Brais, me había portado como un completo idiota nunca debí haberle dicho tal cosa. Es solo que quería verlo enojar, estaba devastado ¿Como mi padre, el que creía un ejemplo para mí, un ser justo, pudo hacerle eso a mi tío? el merecía ser el gobernante, tenía más derecho. Pero mi padre se lo quito esto es algo injusto, fui injusto con Brais yo sabía que él había sufrido demasiado, desde que era un niño había estado encarcelado en el Olimpo y cuando por fin logra salir lo único que le dice su madre es que hay una guerra, que el tiene que combatir para ser el mejor, no es justo que Afrodita lo trate como una mierda. Cuando ese chico a sido un gran guerrero y un difícil contrincante, cuando acabe esta guerra tratare de arreglar las cosas.

Estábamos sentados sin decir nada, hasta que escuchamos el timbre de la casa, todos nos dirigimos a la puerta. Cuando Aaron la abrió pudimos ver a una Verone empapada, con la respiración agitada y un poco pálida, algo estaba mal, demasiado mal, ella no alcanzó a entrar cuando cayó de rodillas al suelo.

– ¿Pasa algo? – dijo Esteban, pero mi prima no decía nada solo nos miraba – ¿Verone no te ves nada bien, pasó algo?

Ella lo único que hacía era mirarnos a cada uno, su cuerpo temblaba estaba algo asustada, la entramos a la casa y la sentamos en el sillón, todos nos pusimos a su alrededor, no dejaba de mirarnos.

– Verone, linda necesitamos que nos digas que está pasando – habló Aaron, ella asintió.

– Estaba en casa de Zigor, todo estaba marchando bien pero – se detuvo, creo que estaba recordando la escena, sus ojos se perdieron en un punto en la pared.

– Verone habla de una maldita vez – está vez decidí hablar, pero ella seguía perdida como si no creyera lo que acaba de pasar – ¡Verone necesitamos que hables!

– Zigor es el hijo de Hades – todos nos quedamos callados, la miraba una y otra vez.

– Dime que estas jugando – ella se quedó callada – ¿Cómo pasó? ¿Al menos trato de explicar?

– Creí que me dejaría ir, se suponía que teníamos algo y se que somos primos y eso está prohibido pero – ella tomó aire – entre a su habitación, mi cadena empezó a brillar, creí que era otra cosa no lo se. Hasta que la vi, vi su cadena, cuando el entró su cara cambió completamente el quería matarme, quería verme muerta.

– Es un hijo de perra – habló Aquiles – chicos debemos decirle a Brais, el se la pasaba más tiempo con Zigor.

No había pensando en Brais, estaba procesando todo esto, ¿Cómo pudimos ser tan estúpidos? ¿Cómo no, nos dimos cuenta que era el hijo de Hades? Esto no podía ser cierto, esto iba a acabar de una vez, lo vamos a derrotar ese maldito no se saldrá con la suya.

– Está guerra se acabará, ese maldito va a morir aunque sea lo último que hagamos, debemos verlo muerto pudriendose en el tártaro donde pertenece, mañana le avisaremos a Brais y debemos de prepararnos. Somos los hijos de los Dioses y no dejaremos que ese maldito gane.