ocho

111 10 2
                                    

Mia

Eran alrededor de las diez de la noche cuando estuvimos de vuelta hacia nuestro bus, que estaba en un estacionamiento grande en la ciudad. Harry llevó la pizza, de olor celestial, mientras que yo cargaba la botella de refresco como si fuera un bebé, ganándome unas cuantas risas de mi compañero.

"Disculpa por no habernos quedado más tiempo en la ciudad" Harry suspiró, lamiendo sus labios. "Me hubiese gustado ir más como turistas, pero... ya sabes"

"Está bien, no te preocupes" le aseguré mientras nos mezclábamos con la gente en la calle. Harry tenía un suéter puesto y era bastante efectivo cubriendo su cara, así nadie se acercó a nosotros en el camino al bus. Yo, al otro lado, no estaba utilizando nada para cubrir mi cara, más que todo porque mi fama no era tan exclusiva como la del señor 1D a mi lado.

"¿Vamos a estar en carretera toda la noche?" le pregunté mientras cruzamos a la calle donde estaba el estacionamiento.

"No estoy seguro aún" Harry dijo. "No me quiero quedar en la ciudad, sobre todo porque tengo miedo que alguien venga y me localice. Quizás deberíamos conducir a un sitio fuera de la ciudad y quedarnos en una parada de descanso en algún lugar cerca, y luego ir a un lugar nuevo mañana"

"Suena bien" asentí.

De pronto, alguien tomó mi brazo con rudeza, tomándome fuera de guardia y me tiró a un lado. Inmediatamente dejé salir un quejido, no precisamente de dolor, sino porque no me esperaba eso del todo.

"Eres Mia Roden, oh por Dios" Era un chico que parecía tener mi edad, quizás en sus veinte. Me sacudí fuera de él, dándole una mirada furiosa mientras él sacaba su teléfono. "¡Todo el mundo te está buscando!"

"Oye, chico. Nosotros tenemos que irnos. No fotos" escuché decir a Harry, sólo que su voz era fuertemente disfrazada por un impresionante acento americano.

"Lo siento." Me disculpé rápidamente con el chico, pero él ignoró completamente nuestras peticiones tan pronto como tomó una foto de mí en la oscuridad, el flash cegándome por dos segundos. Me quedé mirándolo y traté de quitarle el teléfono, pero él ya lo había guardado en su bolsillo. Usualmente yo era reconocida por gente aquí y allá en Filadelfia, pero ninguna había sido tan ruda. Los neoyorquinos tendían a ser más groseros que las demás personas, pero este chico era simplemente una falta de respeto. Apreté mis manos en puños.

"Esa no es la manera de tratar a una dama, especialmente si ella te dijo que no" Harry gruñó. "Dame ese maldito teléfono, voy a borrar esa foto"

"Lo siento, amigo" el grosero peatón dijo. "Pero no voy a tratarla como una dama si ella va por ahí actuando como una perra" él rió, alejándose de nosotros. "¿Dos días atrás te ibas a casar y ahora estas con otro hombre?". Yo estaba demasiado impresionada por su rudeza como para detenerlo, así que sólo me quedé ahí, de hombros caídos, mientras lo veía desaparecer entre la gente.

Mi mentón empezó a temblar y miré con nervios hacia Harry. No podía ver su cara debido al suéter, pero por su lenguaje corporal, se veía enojado como el infierno. Él empezó a caminar en dirección hacia donde el chico había desaparecido, pero lo detuve tomando su brazo.

"Por favor no" le supliqué.

"Mia, él estaba completamente abusando de ti y tu privacidad. Eso no está bien" espetó firmemente.

"Ya está hecho" murmuré. "¿Podemos irnos? ¿Por favor?"

Escuché a Harry gruñir y quedarse quieto en su posición por dos segundos antes de que siguiera caminando hasta el autobús y lo seguí. Sequé mis ojos rápidamente, intentando lo mejor por no llorar, pero sus palabras dieron en el blanco. ¿Cómo puede alguien que es un completo extraño para mí afectarme de esta manera? Me sentía como un bebé por llorar, pero no podía hacer nada. Harry no se dio cuenta porque caminaba con rapidez. Pienso que él sólo estaba furioso por la situación y yo no iba a tratar de empezar una conversación con él.

Ready To Run | Harry Styles (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora