Capítulo VI

912 62 9
                                    

Ya había pasado una semana desde que Elena se había ido y Siwon no daba muestra alguna de querer buscarla. Al menos eso creyó Laura hasta que Yesung se apareció esa mañana en la oficina de Siwon.
-¿La encontraste? -dijo él en cuanto Yesung entro.
-Si. -contesto con una sonrisa de satisfacción.
-Bien. Vamos.

Siwon tomo su billetera y su móvil del escritorio y salió sin decir mas.
Laura estaba estupefacta. Hasta ese momento Siwon se había comportado de lo mas ecuánime ante la partida de Elena.

-¿donde está? -preguntó Siwon a Yesung una vez en el auto.
-En una pequeña comunidad pesquera. Alejada de todo. Te tomara al menos un día llegar allí.
-Eso es lo de menos. Explicame ¿como llego allí? ¿como la encontraste?

Elena nunca quiso aceptar el apoyo de Siwon, pero reconoce que las cosas hubiesen sido mas sencillas.

El único lugar donde ella podía estar tranquila y alejada de todo ese ambiente era con su abuela que vivía en una pequeña población pesquera.

En un principio Siwon no tenia idea de donde buscarla, pero tenia el dinero suficiente para voltear Corea al revés y encontrarla y así lo hizo.

Sentada en una pequeña colina, Elena tenia los ojos cerrados escuchando el sonido de las olas, cuando de improvisó sintió unos poderosos brazos alrededor de su cintura, abrió los ojos de inmediato. No tenia que verlo para saber quien era, su aroma su simple aroma era suficiente para saber que era él.

Elena se levanta de inmediato.
-¿Que estas haciendo aquí? -le reclama -¿como me encontraste?

Siwon aun esta sentado mirando la silueta de Elena recortada contra la brisa del mar, mirando como su larga cabellera se mueve con está y pensando que en ese lugar, ella parece una sirena escapada del océano. Siwon cruza las piernas y los brazos los cruza sobre su pecho mirándola sin decirle nada.
Elena se da cuenta de que ahora no tiene ese peinado remilgado que siempre usa y tampoco trae puesto uno de sus formales trajes. El cabello le cae ligeramente sobre los ojos, parece cansado, Elena tiene el impulso de apartarle el cabello del rostro pero él le detiene la mano por la muñeca, levantándose de improviso y jalandola hacia él para abrazarla muy fuerte, con ternura.
-No vuelvas a irte- le susurró despacio en el oído, Siwon le enmarcó la cara con las manos y la beso apasionadamente. Elena lloró. ¿seria posible que el poderoso Choi Siwon estuviera enamorado de ella? Eso... Eso era imposible.

Elena lo llevo a la casa de la abuela que lo recibió muy entusiasmada con una enorme sonrisa en los labios, no se cansaba de decir lo guapo que era, Siwon recibía el halago con una sonrisa avergonzado.

Elena nunca lo había visto así. Sentado en el suelo comiendo el pescado con arroz que la abuela había preparado. La abuela estaba más que encantada con él, quien era toda dulzura con la anciana.

La casa de su abuela era muy pequeña y modesta pero Siwon parecía sentirse a gusto y relajado. Al atardecer y después de cenar ayudo a la abuela a preparar el lecho para dormir, incluso coloco una manta para dividirlas de él... Pero no funcionó.

Siwon se pegó a la manta que los dividía, tanto que podía sentir el calor de Elena del otro lado. Introdujo la mano por debajo de esta para tocarla.
Siwon deslizo la mano por debajo de la sencilla camiseta que ella se había puesto para dormir, el primer impulso de Elena fue detenerlo pero en lugar de eso tomo su mano y la dirigió a su pecho desnudo.
Siwon palpo la redondez de sus senos, su suavidad, después acaricio el pezón con el pulgar hasta endurecerlo. De la boca de Elena salio un pequeño suspiro. Siwon sonrió complacido oculto tras la cortina. Paso su brazo libre por debajo de la cabeza de Elena y con la otra bajo por su vientre hasta su entrepierna haciéndola tensarse de inmediato.
-sssssh no querrás que la abuela despierte ¿verdad? -le dijo bajito y se acerco más a ella mientras la acariciaba sintiendo su calor, su estrechez que clamaba por más. Siwon sentía un agudo dolor en su miembro viril que le urgía a ser satisfecho. Siwon urgió la caricia, introdujo la punta de sus dedos haciéndola estremecer, Elena enterraba la cara en su pecho para evitar que sus gemidos despertaran a la abuela que continuaba dormida al lado de ella.
Todo su cuerpo se tenso y fue como si un choque de electricidad le recorriera la piel. Siwon le había dado el primer orgasmo de su vida solo con sus dedos.

Siwon se conformó con abrazarla al terminar.
-¿Estas bien amor? -le dijo suavemente. Con ternura.
Elena se tardó en contestar y esto provoco que Siwon hiciera a un lado la cortina. Ella estaba sonrojada por el orgasmo y evitó mirarlo, pero él le dio un beso en la frente y volvió a abrazarla para no soltarla durante toda la noche.

-Regresa conmigo a Seul.
Siwon y Elena están de nuevo en la colina donde la vio el día anterior. Él sostiene sus manos.
-No lo se Siwon. Es aterrador todo lo que pasa allá. Aquí me siento bien.
-Por favor cariño, regresa, vivamos juntos. Quedate conmigo.
-No estoy segura... no... se.- contesta ella titubeante.
-Dejame protegerte. Yo cuidare de ti. Solo tienes que dejarme hacerlo, por favor, por favor- Siwon le hizo un puchero mientras buscaba su mirada.- anda... Di me que si.

....tiempo presente....

Siwon recordó que ese día regreso solo a Seul.

Mirándola ahora sabia que hacia lo correcto. Ella significaba todo para él y no correría ningún riesgo de nuevo. Sus enemigos ya la habían utilizado en su contra y no dejaría que eso volviera a pasar sobre todo en su estado. En sus manos estaba proteger a su familia algo que su padre nunca hizo.

Siwon esta al fondo, recargado en la barra de la cocina donde habían acondicionado un pequeño bar para la reunión de esa noche. Se veía increíblemente atractivo en su traje negro sosteniendo un vaso con wisky. Pero cuando ponía ese rostro la preocupaba un poco. ¿en que estará pensando? En cuanto Elena se acerca, en el rostro de Siwon aparece una enorme sonrisa, le rodea por la cintura con el brazo libre y le da un suave beso en la mejilla.

 ¿en que estará pensando? En cuanto Elena se acerca, en el rostro de Siwon aparece una enorme sonrisa, le rodea por la cintura con el brazo libre y le da un suave beso en la mejilla

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Por ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora