Baby boom ;; muke

c h e a t e d {6}

6 SEMANAS

Michael gastaba la mayor parte del día en casa, comenzaba a volverse loco.

Normalmente, trabajaba con su padre, ambos dirigían el negocio familiar que habían llevado los Clifford por generaciones, Green Gord Properties. Aunque había hecho mucho con su padre, estaba embarazado y a veces era difícil incluso difícil pararse de la cama para ir a trabajar. Así que se había reportado como enfermo esos días.

Así, su padre le había enviado las cosas que necesitaba hacer o saber, y él se recostó en el piso de la sala, con sus piernas en el sillón y la laptop en su pecho mientras leía los emails que recibía de su padre, viendo el mensaje personal al final de uno.

"Espero que estés de regreso la siguiente semana, Mickey.

-con cariño, papá."

Michael rió levemente ante su sobrenombre de la infancia que sólo su padre usaba. Decía que todo mundo lo llamaba Mikey, y que a Michael no le gustaba Mike. Así que su padre hizo un día una broma alterando completamente el nombre de Michael. Y se quedó.

Eso hizo pensar a Michael sobre qué nombre le pondrían a su bebé. Si realmente era una niña, Michael ya tenía un nombre escogido, pues era el tipo de chico que pensaba en esas cosas. Michael era el tipo de chico que siempre había querido hijos, y no había dejado que su imaginación parara desde que se enteró que lo tendría.

Checó la hora, dándose cuenta de que apenas era mediodía, y su única forma de entretenimiento era no estar en casa por cuatro horas.

Se paró, arreglando la camisa oscura que llevaba sobre su camiseta negra, se puso los zapatos y dejó el apartamento de Luke.

No sabía a dónde estaba yendo, pero sabía que quería caminar un poco. Su mente se imaginó treinta lugares diferentes, y se maldijo a sí mismo por no llevar una chaqueta cuando el frío aire de febrero golpeó su rostro. Arregló su gorra, esperando que ayudara para mantenerlo caliente.

Miraba a las grandes ventanas de las tiendas por las que pasaba, deteniéndose abruptamente en una.

A veces le ocurría el hecho de no darse cuenta de que algo estaba en el camino en que estaba o en algún lugar hasta que le impactaba. No se había dado cuenta, de puertas de madera pintada de azul pastel - por lo menos no hasta que la necesitó.

'Tiny tots' se leía en el letrero por encima de la entrada, Michael parpadeó un par de veces.

Las diferentes variaciones de los mismos muebles hacían que su cabeza volara. Así como los diferentes atuendos, biberones y calcetas. Anotó tres mentalmente que consideraría llevar a casa, y una pequeña sonrisa atravesó sus labios.

"¿Mike?" Despegó su vista de la ventana, dándose media vuelta para ver a la morena, con su largo cabello atado en una trenza, y su mano cubierta por un guante tomando la de alguien más.

"Hola, Abigail." Michael miró entre ella y el hombre alto a su lado. "Lo siento, no te conozco." Dijo, sacando su mano. "Soy Michael, ¿tú eres?"

El hombre no sonrió, su fría expresión de mantuvo mientras tomaba la mano de Michael.

"Soy Trevor." Dijo. Michael asintió, sacudiendo su mano rápidamente.