Baby boom ;; muke

c r a v e d {13}

24 SEMANAS

Luke estaba cansado y sólo quería llegar a casa y dormir. Sacó el auto de su lugar en el estacionamiento, listo para ir a casa. Había lidiado con tres casos diferentes en el día, cada uno estrenándolo más que el anterior. Estaba tan ansioso de llegar a casa y pasar tiempo con Michael porque, bueno, porque Michael era su mejor amigo y siempre sabía cómo subirle el ánimo.

Sintió su teléfono vibrar, y agradeció al cielo que había le tocado el semáforo en rojo para poder contestar. Sonrió al ver el nombre de Michael.

"¿Luke?" Michael sonaba preocupado cuando Luke contestó. Éste frunció el ceño, acercando el teléfono hacia su oído.

"¿Michael, qué pasa?" Preguntó Luke.

"¿Ya vienes?" Preguntó Michael a manera de respuesta.

"Acabo de salir del trabajo, llego en quince." Dijo y oyó a Michael suspirar.

"Bien, bien. ¿Podrías parar en algún lugar y traerme unos kitkats?" Michael preguntó. Luke casi colgaba el teléfono.

"¿Estás bromeando?" Preguntó Luke, poniendo el teléfono en altavoz y dejándolo en su regazo mientras el semáforo se ponía en verde.

"No."

"Creí que algo estaba mal." Murmuró Luke.

"Algo está mal. Quiero kitkats, el bebé quiere kitkats, y no tenemos kitkats." Dijo Michael, como si fuera algo obvio y Luke fuera estúpido.

Luke colgó inmediatamente, pero paró en una tienda y compró la bolsa más grande de kitkats que encontró.

-

Michael iba de alacena en alacena por la cocina, encontrando todo tipo de comida, menos lo que quería.

"Okay, ¿que tal poptarts?" Preguntó Michael a su barriga, pero el simple pensarlo hizo que su estómago se revolviera. "Okay, poptarts no, ¿qué tal un plátano?" Preguntó Michael, sintiendo las mismas náuseas. "Ya sé, yo también quiero kitkats. Papi volverá pronto, no te preocupes." Dijo, sobando su barriga.

"¿Quién es tu papi?" Rió Luke, entrando a la cocina y espantando a Michael. Dejó la bolsa en el comedor y Michael inmediatamente la abrió.

Luke también alcanzó la bolsa, pero paró al ver la mirada asesina de Michael.

"¿Qué crees que estás haciendo?"

Luke miró hacia su mano y luego a Michael de nuevo.

"¿Puedo tomar uno?" Michael lo miró peor.

"¿Por qué?"

"Porque compartir es bueno." Intentó Luke. Michael lo miró secamente.

"Bien, ¿qué tal si los compartimos y llevas al bebé dentro por lo que resta del embarazo?"

Luke alejó su mano.

-

Michael se paró frente al espejo de cuerpo completo, dejando ver el bulto de su barriga.

"Me estás haciendo muy grande, frijolito." Dijo Michael, Luke estaba recargado en la puerta, negando con la cabeza.

"No, te está haciendo rechoncho. Un saludable y lindo rechoncho." Dijo Luke, dejándose caer en el colchón y extendiéndose sobre éste. Michael subió con él, recostándose a un lado.

"¿Qué hiciste hoy?" Preguntó Luke, con los ojos cerrados y sobando la espalda de Michael con una mano.

"Fui al trabajo un rato sólo para salir de la casa, y cuando me cansé de que la gente tocara mi estómago fui a ver a mi mamá, había un montón de amigas con ella y todas tocaron mi estómago. La mamá de Abby estaba ahí." Dijo Michael, mirando al rubio que mantenía sus ojos cerrados, escuchando cada palabra que Michael pronunciaba.

"¿En serio? ¿Y qué tal?"

Michael se encogió de hombros.

"Me felicitó y tocó mi estómago. Frijolito pateó cuando lo hizo, creo que se quería hacer notar. Eso o realmente le gustó la atención." Esto hizo que Luke sonriera. "Me dijo que Abby volvió con ella y salió de nuestro antiguo apartamento. Dijo que está pasándola difícil, aparentemente. Su mamá quiere que desayunemos algún día y hablemos de todo."

El agarre de Luke se hizo más fuerte.

"No sé si me agrada la idea." Dijo el rubio, y Michael posó una mano en el pecho del mismo.

"No sé si me agrada tampoco, pero quiero cerrar esto, Luke." Susurró Michael.

"¿Y qué si quiere que vuelvan?" Preguntó Luke.

"¿Te molestaría?" Preguntó Michael, a lo que Luke asintió. "¿Por?"

"Mereces algo mejor."

"Tal vez no merezco a nadie. Diablos, ni siquiera creo merecerte a ti o a frijolito." Michael dijo, Luke lo miró intensamente.

"Nos merezcas o no, estamos aquí. Estoy aquí. No iré a ningún lugar porque no conozco vida sin ti, y no quiero conocerla."

Michael besó la mejilla de Luke, y cerró los ojos - disfrutando el silencio al lado de su mejor amigo.