Indiferencia disimulada

25 1 0
                                    

En el último revolcón, la indiferencia fue tan grande que era difícil volvernos a encontrar en aquella cama estrecha. Cruzabamos miradas que no chocaban entre sí, solamente coincidían en la forma de estar ausentes. Pensamientos absortos, palabras mudas. Tequieros de la nada, rutinarios. Nos encontramos paseando por nuestros recuerdos, observando atónitos el horizonte, hablando pero sin mirarnos. Descubrimos que queriamos volar, ser libres de nosotros, de cada uno y del otro, también.

Suspiros por el insomnioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora