2_cool kids

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Entro al colegio, sentía las miradas en ella, lo disfrutaba.era una especie de proceso en el cual simplemente caminaba con confianza y se arremangaba al mismo tiempo.
Después de lo que intentaba denominarse " riña "con Danny la mayoría de la gente se sorprendía, ¿tal acto proveniente de una chica solitaria,tranquila, de buen promedio?habia pasado un tiempo de las personas de ese instituto pensando en eso.
Ahora la gente lo entendía ,o al menos, aceptaba el cambio. Premeditado y planeado todo con jeremy en donde, dos años atrás crearon su plan "perfeccionarnos, ser recordados y largarnos".
Eran conocidos como el chico flacucho y la chica tímida ,un dúo contra el mundo o al menos la gente de ese instituto.Asi lo veian ellos dos.
No sabe si al resto de la gente le pasaba o lo pensaba pero a medida que se acercaba a sus ultimos años como estudiante no podia evitar pensar en la gente con la cual guardaria contacto y con quienes solo hablaria hasta terminar sus estudios alli.La respuesta de Alaia era simple,solo mantendria contacto con Jeremy,el en cambio,se negaba a pensar en eso,habia veces en las que era obvio que sucederia.Jeremy en esos momentos de duda sentia que era un impostor solia preguntarse,porque se juntaba con tanta gente a la cual no volveria a ver.Despues intentaba calmarse, pensando en el hecho de que todos hacian lo mismo.
Se preguntaba si era como un contrato no estipulado ,en el cual todos saben que finjen ser amigos ,y tener muchos amigos por apariencia,porque en la secundaria y preparatoria nada importa mas que eso al parecer: vivir de apariencias.
Termino de arremangarse  dejando entrever sus tatuajes, mas allá de caer en el estereotipo, tenía uno de los mejores promedios, dicho con sus propias palabras "necesitaba salir de ese infierno, llamado casa cuanto antes".
Recursar o abandonar no era siquiera una opción.
Usaba la ropa que quisiera, como quisiera y no le importaba tenerle que responder a los demás. Jeremy por su parte, se había anotado en cuanto deporte apareciera en el colegio.
Su musculatura ,por dios, paso de ser una simple ramita a todo un tronco, en menos de tres meses. Eran un dúo explosivo. Jeremy aprovechaba esa atención, ella en cambio, prefería que no la molestaran. En todo el trayecto en esa escuela la habían ignorado, le parecía estúpido el intentar socializar ahora, no era como si ella o el resto lo intentara. No era despampanante al igual que Jeremy, no le resultaba fácil sonreírle a extraños, en cambio el regalaba sonrisas. Además su pelo negro igual a sus ojos, le daban un aire intimidante sin intentarlo, claro que a veces lo usaba a su favor.
Mientras caminaba ensimismada en sus pensamientos escucho los murmullos de unas chicas menores sorprenderse, a pesar de saber que era decidió darse vuelta y ver el espectaculo, siempre le causaba gracia la situación. Entrando en fila aparecieron jeremy,parecía ser el capitán de todo eso estando en el centro con Danny a su derecha y otro chico que reconoció por estar en su salón llamado igual que jeremy, y otros tantos chicos atrás de los cuales no recordaba sus nombres, llevaban el mismo ritmo al caminar e incluso parecían estar coordinados, uno saludaba a la derecha y otro a la izquierda, realmente parecían encajar. Mientras el resto de las personas sobre todo las chicas veían chicos perfectos altos, con los cuales salir, ella veía problemas. Y es que cuando tú mejor amigo se entera ,tú también te terminas enterando, cómo el que la madre de Danny hubiera sido alcohólica, o el que Steve un compañero de basket comprara marihuana y la revendiera el doble para conseguir dinero. Incluso chicas de las cuales no sospecho, parecía ser que todos tenían secretos en esa institución. Pero no veían por lo que el pasaba, ella era la única, la que verdaderamente sabia todo. No pudo evitar pensar en los lazos de los dos con sus padres. Vio como jeremy le guiñaba el ojo a una chica y empezó a reírse a carcajadas, puede que actuara de esa forma, pero si tuviera que hablarle era más que probable que terminaría desmayado.
El día transcurrió con normalidad, pasó el primer receso con jeremy burlándose de cómo se impuso la moda entre los varones de perforarse la oreja izquierda y de cómo lo estaban presionando para que se hiciera uno.
-hablando es serio, es estúpido, además¿ que significa? ¿Unión de equipo?-
a pesar de bromear se notaba que estaba molesto, no debía ser la primera vez que le insistían respecto a eso.
-si no le tuvieras miedo a las agujas ¿Lo harías?-
-baja la voz, tengo una reputación que mantener-dijo arreglándose la chaqueta fanfarronamente.
-solo digo, es bastante irónico que te agujerees cada semana con múltiples agujas y tinta y ¿no puedas hacerlo una sola vez? ¿Con una aguja diminuta?-estaba molestándolo.
-si bueno, ¿Qué te digo? Soy un chico complicado-
-puedo hacerlo yo, solo necesito aguja y hielo-
Jeremy agarro su oreja ,mientras lanzaba un grito ahogado como si Alaia ya tuviera lo necesario en sus manos
-mujer, eres diabólica-todavía sostenía su oreja.
-solo por eso lo hare, mientras duermes-puso su característica sonrisa maliciosa, sabía que no le haría nada, pero igual puso cara de asustado. Al sonar la campana tuvieron que despedirse.
El colegio de alta elite Ohio students contaba con la total libertad dada a sus alumnos, que podían vestir a su antojo su lema"la mente liberada, nada tiene que ver con el cuerpo "una frase aplicada demasiado. Tomaba sentido en muchos casos una vez dentro.
La exigencia no descendía por el solo hecho de ir con pelo azul o rubio. Te graduabas hablando francés, alemán fluidamente y optativamente español .Además de una especialización que daban a elegir en tercer año: economía con especialidad en contaduría o recursos humanos especializados en relaciones públicas, graduándote a los 18 años, el tener una división no impedía además, el tener materias como economía política o filosofía, deportes.
Él precio a pagar; años de estrés provocado por tanto y el poder manejarlo, sin mencionar el verdadero precio a pagar, que llegaba todos los meses sin retraso, aunque claro la educación va primero.
No veían por lo que el pasaba esa frase retumbo en su mente al entrar en salón, su salón al menos en las últimas dos semanas ,en esa clase.
Alaia quería ser escritora, Jeremy tatuador,pero su padre no tenia las mismas ambiciones para él, fue anotado en economía sin siquiera preguntarle. Esta era una de las razones causante de múltiples disputas, un minuto eran padre e hijo...
Del otro lado del corredor Jeremy se encontraba pensando lo mismo, recordó su primer tatuaje; a los catorce fue junto Alaia a una tienda bastante clandestina se podría decir, estaban bastante aliviados de no haberse infectado de nada, o que no se les cayeran los brazos.
-¿estás segura de este lugar? dijo jeremy dudoso
-me lo recomendó, Johnny, al finalizar una pelea, no piden documento ni nada por el estilo, pagas te tatúas y te largas-intentaba sonar segura pero se notaba en su voz ,que también dudaba del lugar. Los dos se encontraban frente una puerta desgastada, de madera con un rustico cartel corto y conciso pegado diciendo "tatuajes". Habían logrado que Jeremy se escabullera mintiendo, sobre quedarse a dormir en casa de un compañero nuevo y sobre cómo le haría bien tener un amigo. No existía tal persona pero sus padres le creyeron. Seguían parados enfrente de la puerta. Ella tenía miedo a que le doliera demasiado, el en cambio miraba aterrorizado el lugar ,pensando que en tal barrio los asaltarían. ya fuera antes, después o en esos momentos que se encontraban mirando la puerta al atardecer. casi anocheciendo.
- ¿preparado?-
Le pregunto Alaia
-naci preparado- dijo intentado darse valor. Le encantaban los tatuajes, la verdad era que investigaba mucho sobre las técnicas ,o como los procedimiento fueron cambiando a través de la historia, le fascinaba. Recordó la manera en que los egipcios lo hacían: se trataba de usar una afilada madera ,provocando incisiones en la piel para luego aplicarle pigmentos, pensó que dolería la mitad de eso y se tranquilizó. Aunque de investigar, a hacerte uno, había una diferencia abismal.
Entraron, si bien se sorprendieron por tener más higiene de la que pensaron .el lugar seguía siendo algo "clandestino" en el sentido de la palabra .
Alaia diviso detrás de la silla en donde se suponía debían tatuarla,  botellas y un sillón bastante sucio, a decir verdad parecía el sótano de un ex convicto.
-¿vienen a tatuarse?-
-si señor-le dijo afirmando con la cabeza Alaia,al alto señor con algo de barba sucia frente a ella Hasta las personas dentro de esa habitación bromearon con la complexión de Jeremy y como no tatuaban huesos o que necesitarían más piel que solo eso, a pesar de que fuera uno solo, el que se suponía lo hiciera. El resto eran amigos del dueño, al menos eso parecía.Al menos eran otras 6 personas,Alaia veia nerviosa al tatuador, sujetando a Jeremy con una mano para que no se moviera y con la otra la aguja.Su mente maquineaba que pasaria en el peor de los casos,y rezaba porque no sucediera lo peor,era de noche,no los conocian y los superaban en  numeros;se pregunto si ahora que lo estaban haciendo, era una idea tan estupida ,como parecia en esos momentos y no genial de la manera en que pensaban esa mañana.
Te preparas para lo peor y esperas lo mejor.Penso ,cerrando su mano dentro del bolsillo de su pantalon,sujetaba su navaja que la hacia sentir mas calmada,deseaba para sus adentros el no tener que usarla.
Apenas termino el tatuaje de Jeremy,le dieron lo mas rapido posible el dinero y salieron sin esperar el cambio.
No tenian el cambio por lo que un taxi no era opcion,corrieron sin motivo alguno, tres cuadras, hasta detenerse para empezar a caminar y tomar algo de aire.
Regresaron a la casa de Alaia, estuvieron toda la noche repasando con sus dedos sus tatuajes, adoraban sentir ese bordeado y las líneas sobresaliendo de su piel. De tanto hablar a las dos de la mañana ,despertaron a la hermana pequeña de Alaia, Sadirar.
-¿de qué están hablando? -
dijo desde la parte inferior de su cama doble, buscándolos con la mirada ,hasta que los vio recostados ,lado a lado sobre la pared con los pies extendidos en direccion.
-¿sabes guardar secretos?-
Le dijeron los dos al mismo tiempo.
-claro, mis amigos imaginarios hablan todo el tiempo sobre ustedes y jamás dije nada- los dos se quedaron asustados viéndola ,a tiempo que ella empezaba a reír ,y se recostaba sobre la cama -es broma, sólo quería asustarlos por despertarme-
-nos tatuamos-dijo Jeremy hablando con ella
-¿dolió?-
-no tanto en realidad-
-¿Puedo sentarme con ustedes?-
Terminaron siendo tres esa noche.
Sentados en triangulo,usando solo la poca luz que entraba de la ventana para ver.
-¿Entonces si pudieras tatuarte ahora que te harías?
-me tatuaría el universo- dijo segura Sadirar, dejándolos una vez más perplejos.
-¿cómo sería eso posible?-pregunto Alaia incredula.
-¿acaso no necesitarías como 100 metros más de piel ? comenzaron a molestarla.
-no es así, no saben cómo es el universo, podría ser enorme tanto como chiquito e incluso inexistente, podría ser una canica y no nos daríamos cuenta. Canicas como planetas quien sabe-
-wow-
-solo wow-
-tu hermana de siete años piensa más que nosotros que deprimente- concluyo Jeremy
-estoy orgullosa ,pero a veces da miedo-
Ella se había tatuado un pequeño globo terráqueo en el hombro en sus propias palabras "después de recorrer el mundo una infinidad de veces, lo empezaría ver así de pequeño". Él en cambio se hizo dos pequeñas jeringas entrecruzadas sacando sangre que formaban una cruz roja, en el antebrazo, puesto que su padre era medico Hizo la elección inteligentemente, recordó la forma en que no pudo guardar el secreto y apenas entro a su casa se los conto. Se habían dormido a las cinco de la mañana por lo que se despertó tarde, apenas vio la hora se fue directo a su casa ; ambos padres se encontraban sentados en la cocina cuando ocurrió. Estaban furiosos, luego de una hora de discutir entre ellos, él padre le pidió que se lo mostrara. Sé levanto la manga de la camiseta para dejarlo a la luz, comenzó a reírse, mientras le decía a su aun enfadada esposa
-¿Qué hay de malo en tener orgullo por tu padre?-
y a un muy perplejo hijo
-me gusta, buena elección-mientras lo abrazaba, después de eso hicieron de eso un asunto olvidado, un minuto eran padre e hijo y al siguiente se odiaban y olvidaban todas las promesas de mantener su lazo.
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El día termino y el simplemente se encerró a estudiar,para una prueba que tendría al día siguiente, ella se quedo divagando afuera ,entre competiciones y parques.

Al día siguiente se vio con Jeremy, estaba furioso. No era para menos.
-¿de verdad tenias que ser tan cruel?
-solo porque lloro, ella empezó y me lastimo de la misma manera-
-¿era necesario que te rebajaras a su nivel?
-tú sabes cómo es ella, ¿fue descender hacia su nivel o simplemente defenderme?-
-la pobre chica termino llorando en el baño-
-agradece que no le haya pegado-la miro con una cara de reprendimiento mientras ella se  contenía, sabía que esa conversación podría seguir por horas.
Alaia solía tener un límite bien marcado y cuando la gente lo pasaba no era bueno, ése día se excedieron.
No era muy arreglada, no se producía demasiado no se empeñaba en eso, ése día había puesto un interés menor al usual. En un mal cálculo de horas llegaría tarde al instituto si paraba en su casa, terminó corriendo directo al colegio. Tenía diez minutos perfectos, entró por la puerta yendo directamente al baño, verificó que no hubiera nadie en los cubiculos,puso la traba,para que nadie pudiera pasar. Sé desprendió de su mochila, primero lavo su cara, para luego enjabonarse la mitad de cuerpo y limpiarse con una toalla de mano que tenía en su mochila, No iba a ningún lugar sin esa mochila, cambió su remera por una que tenia de repuesto, guardó la otra. No estaba en las mejores condiciones, pero se encontraba mejor que antes
Salió directo hacia el salón, chocando de cara contra ella, la miro de arriba abajo con disgusto-le robaste la ropa a un vagabundo-afirmo.
-si era un adicto al crack afirmando ser tu tío-En otra situación, esquivaría cualquier conflicto con ella o respondería mas sutilmente. Realmente intento llevarse bien con ella o al menos soportarla pero era demasiado estúpida, en su mayoría ella era la que comenzaba el conflicto. A veces le respondía, a veces simplemente la ignoraba. Estaba consciente de su poder para destruirla en cualquier momento, pero no quería pasar por lo que  ella llamaba, como una devolución del mundo. Todo lo que ella hiciera el mundo se encargaría de devolvérselo de la misma manera, sea bueno o malo.
-¿donde fuiste este verano?
-me quede...trabajando-respondio Alia meditandolo un momento.
-yo fui a Puerto Rico ¿cuándo vas a tener tú la oportunidad de ir a algún lugar así?
-¿te parece divertido hostigar a alguien? Te voy a decir que será divertido dentro de veinte años, puede que yo siga aquí o no pero será por meritos míos, tú apenas te corten los recursos tus padres, serias una mesera tanto aquí como en cualquier lado, veamos quien se ríe ahora y a quién le perdura la risa-dio un paso adelante quedando frente a frente, podía ver su miedo, tenía la boca tensa formando una  delgada línea. Comenzó a hablar mucho más tranquila, despacio sin perder la mirada de sus ojos-estás sola porque tus amigas te dejaron abandonada, quizá por eso también te dan tanto dinero para que permanezcas fuera de la casa.
Molestar solo muestra tu exceso y pérdida de tiempo...no te confundas el único motivo por el que estas viva es porque yo lo decidí-levanto el puño cerrado pero al momento de golpearla
Se detuvo a centímetros de la cara, En ese punto tenía los ojos llorosos, estaba paralizada, Alaia se acomodo la mochila llegaba tarde.
Una sola vez habia perdido el control,no dejaria que sucediera de nuevo.
Ademas,solo queria asustarla.

New York nos esperaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora