Capítulo 20

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Era de tarde, los rayos del sol se filtraban por la ventana entre abierta. El aire de la tarde refrescaba la habitación. Estan en la cama, ambas. A noche fue una locura, Perla se habia divertido a montones con Amatista y Peridot, pero su mente no solo recordaba la diversión, tambien recuerda a Sheena. Le es difícil no recordar ese nombre, ¿por que no la puede olvidar? ¿que le sucede? No sabe, pero agradece a Dios no verla de nuevo, aunque no estaba del todo segura, pues aún tiene guardado el número telefónico. Sacude la cabeza, la olvidare en un dos por tres, se decia mentalmente.

Las caricias por su espalda le hacian estremecer, provocandole suspiros. Los dedos de su acompañante son sedosas, y muy subes al momento de tocar su piel. Puede sentir los suabes labios de su amada recorrer su columna, dejando una estela de besos placenteras. Le encantaba estar así, se sentia protegida, como una niña mimada que le daban todo lo que pedía. De un movimiento lento por parte de Garnet le hizo girar, quedando boca arriba, una pequeña risa se le escapa entre los labios de Perla.

---¿Ya has despertado?--- susurro la morena cerca de su cuello.

---Aun estas muy juguetona...--- respondio la delgada chica albina, tomando el rostro de Garnet entre sus manos.

Garnet pierde las distancias entre sus labios, uniendose en un beso apasionado, sus manos acariciaban los costados de Perla, acariciando la piel desnuda, sus piernas se enrredaron con las de su novia, poco a poco, las caricias como los besos se volvieron demandantes, los sonidos de gemidos y suspiros llenaban nuevamente la habitación. Perla rascaba la espalda de Garnet dejando marcas notables e intentando sentirla más cerca.

---Garnet...--- decia Perla entre besos, intentaba entrar en razón, pero era inutil, los besos de Garnet era embriagantes.---hummm...Garnet...---

La mano derecha de la afroamericana, tocaba a la peli rosa desde sus pechos amasandolos suavemente, bajando por su plano abdomen, la cual esta como piel de gallina, aun sin dejar se besar el cuello, hombro y clavicula, la manos de Garnet seguian su camino hasta llegar a su destino, donde en respuesta fue un gran gemido por parte de Perla. La sonrisa divertida fue la respuesta de la afro mientras seguia su trabajo, su mano entre las piernas de su amada se movía despacio, de arriba abajo, en círculos, pero sin perder el ritmo. Perla podia sentir como un globo se inflaba por su abdomen, enterraba sus uñas en la espalda de Garnet, las caricias eran tan placenteras, su novia siempre sabe como moverse, pudia sentir que llegaría, la viscosidad que secretaba le hacia el trabajo más fácil a la morena, ya lo podía sentir, llegaría a la explosión de nuevo, tocaría el cielo, pero...

El sonido del teléfono sonó desde la mesa de noche de Garnet, echando a perder el aura apasionado que habian creado. Un gruñido de enojo salio desde la garganta de la morena, miro a ver a Perla pidiendo disculpas. Se levanta, se sienta en el filo de la cama y toma el movil. Suspira cansada al ver el nombre de Jamie.

El primero en hablar fue el.--- Hola amor.---

---Hola Jamie...--- al pronuciar el nombre mira a ver a Perla, la cual pone los ojos en blanco, dando la vuelta para vestirese.

---Mi amor, fue un éxito la obra, me pagaron más de lo que imgine, el público enloqueció...--- hablaba el chico emocionado.--- me hubiera encantado en tenerte a mi lado Garnet.---

---Oh, estoy feliz por ti.---

--- Y no solo eso, como no podia dejar de pensar en ti, te compre un obsequio, uno que nos cambiara la vida...--- Garnet puso cara extraña, hiba a preguntar pero una voz de una mujer sono al fondo.---(Pasajeros favor de apagar teléfonos celulares, en momentos desenderemos, gracias.) Cariño, nos vemos en tu casa, ya no tardo. Te amo.--- fue lo último que dijo para después colgar.

¿Para el amor no hay edad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora