¿Para el amor no hay edad?

Recuerdo, Basquetbol y Celos.

Capítulo 2: 

Jamie, ese era el nombre del chico atractivo que la recibió lo más cariñoso, ha conocido a Jamie desde la universidad, fue su mejor amigo hasta que él se declaró, le dijo que estaba enamorado como loco de ella, Garnet lo rechazaría pero lo pensó muy bien, él sería quien la ayudaría para poder superar sus traumas.

— ¿Qué te ocurre?— le dijo muy preocupado, la agarro de las manos y la metió a su casa.

Garnet no respondió, se quitó los lentes y se abalanzó sobre el moreno, buscando sus labios para besarlos, Jamie no replicó sabía que tenía unos de sus ataques, y la última vez que replicó tuvo una fuerte pelea con ella que no le gustaría experimentar de nuevo.

Jamie la cargo, por las piernas y ella rápidamente apreciona su cadera con ellas, se dirijo a la habitación la recostó, y se posicionó entre las piernas, Garnet tiraba ligeramente de sus cabellos, la besa como nunca, la ama, delicadamente se deshacen de la ropa quedando completamente desnudo, los gemidos de Garnet  y Jamie era lo únicos sonidos que inundaba la habitación, el olor a sudor y fluidos era el aromatizante del lugar.
Jamie besa cada centímetro de su piel, de un momento a otro se encuentran en un ritmo de caderas de vaivén, no aguantarían más lo podían sentir, sus caderas chocaba, la morena se aferraba a su gran y formada espalda, en pocos segundos los dos llegaron al climáx tan esperado.

Garnet reposaba su cabeza en el fuerte pecho de Jamie, haciendo círculos con los dedos.
Ella tenía un trauma, de adolescente tenía una hermana mayor su nombre es Jasper, eran muy unidas  crecieron juntas felices. el desastre llego en el primer año de universidad, donde le contaba que estaba muy enamorada, decía con tanto fervor el amor que le tenía a esa persona, hasta ahí todo bien, pero un día muy emocionada se la presento era una chica delgada, de piel clara cabello corto teñido de color azul eléctrico, su nombre era Lapis lazuli, muy amable y linda, se notaba lo enamoradas que estaban, hasta que su padre se enteró, la desprecio, la insulto le gritó hasta de que moriría.

—  ¡Tu nunca fuiste mi hija, lárgate ser del diablo, te repudro, te odio, fuera de mi casa nunca te quiero volver a ver, solo das asco...!—

fueron algunas maldiciones que su madre y padre le dieron, Jasper se fue de la casa, tuvo una charla demasiado pronto, sus padres le decían el gran pecado que había echo su hermana mayor, ella era pequeña de alguna manera quedo traumatizada, por escuchar tal feos castigos que tendrá en aquel lugar ficticio según algunos, llamado infierno, así que cada vez que ella sentía atracción por una niña, se encerraba en el baño y repetía
" no iré al infierno, no iré al infierno"
Jalándose el cabello, y comiéndose las uñas al punto de salirle sangre.

Ahora ya es mayor pero nadie le quita lo traumada que está, ya no se lastima ella misma, busco otra manera de desquitarse cada vez que le gusta una chica, sexo, esa era la solución, raro pero seguro para ella, lo tenía con Jamie su novio de año y medio.

El no le pidió explicación alguna, después de estar acostados se dieron un baño, pasaron el día tranquilo con pláticas sin sentido o cómo estuvo el trabajo a lo que Garnet rápidamente cambio de tema. Ella sabía una cosa, cada vez que vea a Perla, no estaría Jamie para ayudarla en la escuela.

Ya han pasado dos semanas desde el primer día de clases, Garnet a podido tranquilizarse cada ves que ve a Perla el sentimiento está ahí, pero lo disimula, no puede estar actuando raro cada ves que la vea, así que opto por disimular.

No tardó para que Perla y Peridot sean importantes para los profesores en sentido de ser muy cumplidas e inteligentes.
Perla en cambio, ha desarrollado un gusto enorme por su profesora de lógica, le encanta cundo habla cosa que es muy escaso, sus ademanes a la hora de explicar, y más esa mirada fugaz que la profesora le regala a perla, ella la descubrió cundo levanto la mirada para ver el pizarrón, a lo que rápidamente la Morena le desvío la vista para otro lugar, fue muy infantil pero tierno.

Es un viernes, es día de un partido de baloncesto, la escuela cristal contra la escuela homeworl, es medio día y todos están poniéndose de acuerdo para ir a ver tal partido en la noche, Dewey ha convencido a perla para que fuese, ella acepta ya que Amatista y Peridot dijeron ir también.
Garnet en cambio no iría pero Jaime la convence, el cundo estudio en la universidad estaba en el equipo siendo el capitán, así que iría para recordar viejos triunfos y tiempos.

La noche llegó, la cancha de duela se llenaba con profesores y estudiantes, el olor a palomitas llenaba el lugar junto con los fuertes murmullos, el equipo estaba en las duchas hablando, motivándose y echándose porras para ganar.
El silbido del silbato sonó tan fuerte, "cinco minutos" grito el árbitro.
El partido comenzó, los gritos y porras se escucharon incluso fuera de la duela, fue muy emocionante, parecía que perderían pero la victoria fue nuestra al encestar un triple gracias al capitán Dewey, al encestar apuntó directamente a Perla causado un fuerte rubor por parte de ella y un ceño fruncido de una profesora.
El partido terminó obteniendo la Victoria, los jugadores se saludan para retirarse, en la salida Dewey tuvo una grandiosa idea.
Se encontraba con Perla, Amatista y Peridot, estaban rodeados de compañeros, saludando a Dewey por la victoria.

— Chicos, chicos — grito llamando la atención— quiero hacer un anuncio...— mira a Perla.

— ¿que sucede?— pregunta ella.

En un lado del espectáculo, se encontraba, Garnet y Jamie, a lado estaba su auto para irse de una buena ves.

— amor, iré a saludar a un profesor, hace buen que no lo veo, espérame ¿si?— le contó para escusarse

A lo que ella solo acento con la cabeza, vio como desaparecía su novio entre la gente, y dirigió su mirada en el grupo de alumnos que se havía formado no muy lejos de ella, se podía escuchar claro lo que decía un joven.

—  Aquí, perla enfrente de todos nuestros compañeros, quiero decirte que te amo, que me has gustado y tú lo sabes...— le dijo viéndoles a los ojos. — y hoy te pido que... Seas mi novia.—

Garnet abrió mucho los ojos que los lentes se le caería, podía sentir como la sangre le hervía, sus manos se cerró haciendo un puño clavándose las uñas en la Palma.

— Esta... Bien... Si.— le respondió tartamudeando y no muy segura Perla.

Justo al decir eso, Dewey le besa un beso muy largo para el gusto de Perla. Garnet estaba furiosa no sabía por qué, no tenía derecho para sentir esto, así que se metió al auto furiosa maldiciendo no tardó mucho cuando Jamie entró.

— Listo amor, vámonos.— le dijo muy sonriente.

— ¡Solo arranca!— le grito. — ¡te dije que no quería venir!—

Jaime la miro interrogante se había molestado, la conocía y eso pasaba muy poco.

................................................................

Es largo, disculpen XD