LAS CRÓNICAS DE LOS HERMANOS ELRIC

DEN ¡BIENVENIDA A CASA!

Los hermanos Elric: Alphonse y Edward, vivían solos en la casa desde comienzos de verano, desde que  su madre falleciera. Winry Rockbell los entendía pues ella también había perdido a sus padres en Ishval, la ciudad que se encontraba al Este y no muy distante de Resembool. Sus habitantes vestían túnicas con rayas negras y pantalones blancos y eran muy devotos de Dios.

Por las tardes, Los chicos Elric se dedicaban junto con Winry, a explorar los alrededores de Resembool, los chicos sentían mucha nostalgia y soledad a esas horas,

— Chicos, ¿Porqué mejor no vamos a comprar golosinas? — sugería Winry, viendo pasar a unos niños que se deleitaban comiendo aquellos deliciosos manjares, empujando a Edward y Alphonse.

—Winry... ¿¡Por qué Siempre tienes que empujarnos cuando deseas algo!?... Lo mismo hiciste al comienzo del Verano, cuando mamá aún vivía y se sentía mejor... ¿Lo recuerdas?... Nos tomaste del brazo a mi y a Al para tomarnos una estúpida foto...

—pero Nissan... Esa no fue ninguna estúpida foto... En ella.. aparece mamá... — Sentenció Alphonse provocando que Edward frunciera los labios. 

— Ya lo sé Al... Ya lo sé... Por cierto Winry, ¿porque tienen en tu casa esa fotografía y no la tenemos nosotros?...

—... Pues porque en esa fotografía también aparece mi abuela... Y fue su madre quien nos pidió que nos la quedáramos...

Los hermanos Elric bajaron la mirada.

— Vamos... ya les he dicho que si ustedes están tristes... Su madre también lo estará...

Cuando se encaminaban a la tienda de dulces, Edward vio a una cachorra (negra con blanco, lo blanco cubría su hocico y se extendía desde el cuello hasta la panza).

— Compremos algo de comer para aquella cachorra también...

—Ed... Al... Pensé que odiaban a los perros... Después de lo que le sucedió a Ela...

— Oye... Eso no te lo contamos.. — Gritaron al unísono Edward y Alphonse, mirándose el uno al otro y volviéndose hacía Winry.

—... Ustedes no... —dijo mirando al piso —,...escuche cuando su madre se lo contaba a mi abuela...

— En fin... — dijo Edward severamente, cerrando los ojos mientras tiritaban— yo no odio a los perros, solo me moleste con aquel animal  porque no dejaba de morder los pies de Ela...

—... Querían a su hermana pequeña... — Dijo sonriendo.

—¿Q-Querían?... ¡Otra vez hablando en pasado, Winry! — Grito Edward provocando que la cachorra se asustara y se escondiera detrás de las botas negras de Alphonse.

—... LO LAMENTO... LO LAMENTO... NO QUISE HACER QUE SE MOLESTARAN CONMIGO... ¡BUUAAA!... — Winry se cubrió la cara con sus manos  al empezar a llorar.

Edward sintiéndose culpable por hacer llorar a Winry,

— ya deja de llorar o crearás un nuevo río...

Estaba anocheciendo, el verano estaba por terminar, un festival de fuegos artificiales estaba por comenzar, Edward tomó de la mano a Winry y subieron a la colina más cercana para presenciar el espectáculos de luces en el cielo. La cachorra sin nombre, les hacía compañía, se sentó a lado de Edward, al parecer el chico le caía muy bien.
—... Niisan... ¿Podemos quedarnos con la cachorra?...

— Sabes muy bien que no tenemos como mantenerla...

—... No te preocupes te llevaré a casa... Y así los tontos Elric no tendrán que preocuparse...