ELANIE TU ERES NUESTRO UNO Y TODO

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Edward y Alphonse fueron llevados directamente a la Isla Yoko, que se encontraba en medio de un lago, a las afueras de la ciudad de Dublith, para comenzar su entrenamiento.
Su maestra Izumi Curtís les había dado plazo de un mes para que descubrieran lo que significaba "UNO ES TODO Y TODO ES UNO", además que les había prohibido el uso de la Alquimia, dejo a los hermanos Elric a su suerte, lanzando un cuchillo en sus manos. Los chicos se enfréntaron a la lluvia, a aprender a cazar, a pescar y hacer una fogata. En otras palabras, a valerse por si mismos algo que no resultó para nada fácil, ya que había días en que no pescaban nada, hasta que un día descubrieron que en aquella isla también había conejos.

El hermano mayor construyó una trampa, cuando hubo atrapado uno,
aquel animalito miro a Edward con expresión dulce, en ese momento extiende su mano sosteniendo el cuchillo para pasárselo a Alphonse, para que lo matará, mientras Edward miraba al suelo

-¡Ten!.. Hazlo tú!

-¡Nissan, pero si yo nunca he matado a ningún animal -, observó Alphonse, devolviéndole el arma corto punzante a su hermano mayor.

-¡Yo tampoco, Al!

-¿Entonces porque quieres que yo lo haga?

En medio de la discusión hizo su aparición un zorro, el cual aprovechando la situación huyó con la presa. A toda carrera, los chicos fueron tras de él para recuperar su cena. Cuando los chicos le dieron alcance, se escondieron detrás de un árbol, pues querían ver que hacía con su cena, se percataron de que a su encuentro salieron tres cachorros. Los chicos se miraron mutuamente y sonrieron, pues les dio mucha ternura aquella escena. Pero cuando los tres cachorros empezaron a devorar el conejo, la expresión de los Elric cambió por completo, pues sentían enfermar.

Los chicos regresaron a su acampamento.

Alphonse mirando a su alrededor y pensando en los tres cachorros que habían visto previamente,

-Nissan, en la situación actual que estamos viviendo, ¿Qué crees que hubiera pasado si Elanie se encontrará con nosotros ahora?-,
Los dos volvieron a intercambiar miradas y se sentaron en el suelo,
Edward encontró un pedazo de rama y empezó a rastrillar la tierra con esta.

-Veamos... Ela tiene 3 años, tu tienes 7 y yo tengo 8...uhmm... una niña de su edad no podría sobrevivir en estas condiciones, ya que hay días en que se nos dificulta conseguir comida.
Ella no pararía de llorar... Tendríamos que dejarla aquí, mientras conseguimos comida.... O.. Alternarnos para poder cuidarla... YA QUE NO ME AGRADARÍA PARA NADA QUE ESE CAVERNICOLA SE ATREVIERA A LASTIMARLA...

Aquel cavernicola al cual Edward se refería era un hombre de aspecto músculoso, quien llevaba una máscara ancestral que representaba la cabeza de un dragón, que les arrebataba la comida y tenían que luchar contra él para que no se la robará de las manos y los dejará sin probar bocado alguno.

- También es probable que la maestra hubiese decidido cuidarla mientras estamos en entrenamiento... Tampoco yo hubiera querido que se quedará en Resembool sola, ya que nosotros somos su única familia. Estaba pensando, que tal vez Ela en momentos como este, nos sería de gran ayuda, preparando la cena.....

Edward se levanta de un salto al escuchar esto, lanza el pedazo de rama en la cabeza de su hermano Alphonse,

-¡Cómo una niña de 3 años va a preparar la cena!... Podría quemarse.... - Grito al tiempo que unas lágrimas empezaban brotar de sus ojos.

 LAS CRÓNICAS DE LOS HERMANOS ELRICDonde viven las historias. Descúbrelo ahora