Es de esas personas que hacen cualquier tontería por animarte incluso si él queda mal, es de esas personas que te dan alegrías, pero también te enseñan lo cruel que puede llegar hacer todo. Es como una chispa de las que llaman imposibles, pues nunca pierde su brillo, te enseña a madurar y ser una persona de 6 años a la vez. Te acompaña y hace que hagas locuras que jamás imaginaste hacer en tu vida, como ir al cine en pijama y que todos te vean raros, como impedir una boda cuándo se casa tu padre, como muchas más. Es un amigo de verdad, esta ahí pase lo que pase, no importa si parece ser el final de algo, siempre está ahí, aunque las demás personas digan cosas o incluso los conocidos lo hagan, no te abandona. Te enseña a ser fuerte, aunque estés tumbado en el suelo, grita hasta que te levantes, no importa que diga con tal de levantarte. Sabe hacerte enojar, pero te sabe más calmar. Te regala miradas donde muestran que todo estará bien y él estará ahí, que nunca te dejará caer. Es una de las personas más maravillosas que alguien puede conocer, son afortunadas las personas que lo tienen en su vida, es completamente fiel a lo que es, jamás finge ser algo que no es, te enseña más cosas de las que puedas aprender por ti mismo y cuándo no está, sientes un vacío dentro de ti, que es imposible de sanar, se vuelve parte de ti, una parte mejor de ti, es increíble, perderlo sería por una parte, perderte a ti mismo.