Promesas Inquebrantables (Cherik)

II

- Buenos días, Hank.

El castaño saludó a su jefe estrechando su mano, mientras se dirigía al aislado "cuarto" de su residente.

- Oh, Charles- le detuvo McCoy- que bueno que te encuentro, quería hablar contigo.

- Claro, ¿sucede algo?

- Bueno, quería hablar sobre Erik. ¿Qué te pareció tu primer día aquí?

Charles detuvo completamente su paso y se volvió al hombre más alto.

- No estuvo tan mal, aunque admito que me intriga.

- Uhm, ¿volvió a escupir en la comida ajena? ¿o te refieres a su negativa de hablar nada más que alemán?

- ¿Lo de la comida lo ha hecho antes?

- Es su forma de darle la bienvenida a sus nuevos cuidadores- respondió Hank acomodando sus gafas.

- Oh, ya veo- contestó Charles con una sonrisa-. ¿Puedo preguntarte algo?

- Lo que sea, Charles- dijo Hank con curiosidad.

- ¿Puedes contarme un poco sobre Erik? No quiero hurgar en su mente, sería muy descortés de mi parte, y no creo que quiera decirme algo pronto. Tú sabes, cosas de cómo llegó aquí, para no arruinarlo con algún comentario

- Ven.

Hank le hizo pasar a su oficina, indicándole a Charles que se siente mientras revisaba los archivos de los pacientes. Cuando McCoy dio por fin con el archivo 153 con el nombre Erik Magnus Lehnsherr, la sorpresa de Charles se extendió al observar la enorme carpeta del expediente del alemán.

- Te resumiré todo lo más posible, así que si tienes alguna duda después de mi explicación es momento de hablar.

Charles asintió, indicándole que estaba listo para oír a su jefe.

- Erik llegó a nosotros hace menos de dos años, fue enviado después de un ataque de psicosis que tuvo al intentar matar a un ciudadano, Sebastian Shaw si no me equivoco. Erik estaba tan eufórico, que en consecuencia hirió de gravedad a la acompañante de Shaw, Emma Frost- Hank abrió el expediente mostrando imágenes del campo de concentración- la justicia dictaminó que Erik no era lo suficiente capaz de cuidarse a sí mismo, después de una exhaustiva investigación que se hizo de su pasado. Aquí puedes observar como desde niño, Erik tuvo la peor de las infancias.

- Oh, dios santo- exclamó Charles al observar las imágenes- ¿quieres decir que es un sobreviviente del holocausto?

- Eso mismo- contestó Hank- No todo fue bueno para Erik, él desde muy pequeño vio morir a su madre a manos de hombres al servicio de los nazis, por negarse a mostrar sus poderes ante un científico loco de la época. Quién según Erik, es el mismo Shaw que intentó asesinar aquella ocasión.

Charles estaba tan atónito al oír esto que no encontró su voz, realmente sentía pena y tristeza por Erik, ese pobre joven había sufrido mucho en su corta vida.

- Todos sus familiares fueron mermándose por la cámara de gas, o por alguna tortura que los científicos nazis ejercían con ellos, uno a uno. Erik sobrevivió porque en ese entonces era el único mutante conocido, y fue entrenado a base de la ira para desatar su poder- Hank suspiró mientras pasaba las páginas del expediente-, se encontró viendo a todos sus familiares y amigos muriendo en aquel campo de concentración. Cuando la guerra por fin acabó y Hitler fue derrocado, Erik suponía que era libre, pero no pasó mucho tiempo antes de que todos comenzarán a odiar a los de su especie. Erik fue maltratado, golpeado y hasta perseguido por mostrar sus poderes. Todo eso provocó que desarrollará un odio hacía la raza humana y hacía los nazis quienes provocaron la perdida de sus familiares, toda esa locura dio como resultado a que se volviese loco de poder, para encontrarse matando humanos, hasta que le fue concedido la orden de que fue por defensa propia. Muchos humanos protestaron por eso, así que buscando una excusa se le declaró deficiente mentalmente, y desde eso está aquí con ningún objeto de metal a su alcance.