Era una fría tarde en Londres; el otoño estaba en su mejor época, dando un hermoso paisaje de hojas caídas y tonos naranjas a la vista de cualquier londinense o visitante.
Erik y Charles, poco estaban interesados en salir a dar un paseo por las ahora espesas calles de Londres, fruto de las hojas amontonadas por doquier. Esa tarde ambos se mantenían abrazados uno del otro, mientras veían un programa de la BBC.
O bueno, era justo lo que sucedía antes de que Erik comenzará a besar de la nada a Charles.
— Erik..., — dijo el castaño con tono divertido, sin apartar la vista de la televisión— ¿y eso por qué fue?
— ¿No te gustó? — preguntó el de cabellos rojizos intentando tapar el tono inseguro de su voz.
Charles le miró con la mayor de las ternuras y afirmando con la cabeza, volvió a besarle, ignorando que hace unos momentos veía con mucha emoción otra aventura de Doctor Who.
— Hey, al parecer no la pasaron tan mal esta tarde que los deje completamente a solas.
Raven había regresado de su turno con muchas bolsas en los brazos. La rubia lejos de enojarse, sonreía con diversión al ver como Charles ahogando un chillido saltó, alejándose de Erik, quién no tenía deseos de apartarse del castaño.
— Erik...— murmuró Charles al sentir como Erik lo abrazaba y lo volvía a besar— Raven está viendo.
— ¿Y? — contestó con una sonrisa ladina.
— No se preocupen por mí, créeme que si los he oído en las noches, esto no es nada.
— Raven, basta—. Replicó Charles claramente sonrojado.
— Es una broma, cariño. Aunque eres el más ruidoso de ustedes dos, así que uno se acostumbra.
Raven se encogió de hombros mientras Charles hacía una mueca de disgusto hacía su hermana, con Erik riéndose de todo esto.
— No te amargues, hermanito. Sabes que estoy feliz por ustedes dos. Justo por eso la cena de hoy será especial, tómalo como mi disculpa por no haber estado en la audiencia de ayer, pero al menos sé todo salió bien para ustedes.
Charles asintió abrazándose más a Erik, quién aún sonreía al recordar el resultado del juicio.
***
Después de haberse separado del beso en el hospital, todos temían por lo que sucedería con Erik, incluso Hank quién había pasado todo el día en el lugar junto a Raven, antes de la llegada de Charles.
Charles había salido del ascensor con lágrimas en los ojos, el psiquiatra que evaluaría el estado mental de Erik entró sin dirigir palabra alguna a Xavier.
— ¿Y bien? — Raven corrió directo hacía su hermano, quién rompió en llanto abrazado de su hermana.
— Soy una mala persona, Raven... — murmuró Charles entre lágrimas.
— No, cariño, no lo eres— contestó la rubia con dulzura, intentando calmar el llanto de Xavier.
— Pude haberme ido, si no hubiese sido tan indeciso Erik no habría entrado en pánico, él pudo morir mientras yo me la pasaba de lo lindo en Nueva York...
— ... Pero no murió ¿vale? Y menos lo dejaste solo. Deja de castigarte por eso.
Charles no habló durante los siguientes segundos, su mirada se perdió en algún punto.
— Cariño, ¿estás bien? — preguntó preocupada Raven.
— Estoy escuchando todo— Charles murmuró, dirigiendo su mirada hacía la de su hermana— ellos lo quieren encerrar, planean hacerle experimentos, entregarlo a Trask...
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Promesas Inquebrantables (Cherik)
FanfictionTodo comienza la fría primavera de 1962, Charles Xavier un joven a punto de graduarse como profesor de genética es contratado por Hank McCoy para cuidar de Erik Lehnsherr, el paciente más enigmático que haya pisado la residencia. Lehnsherr, conoci...