Boy meets evil » Taehyung

13. 21st Century Girl

Conseguí dar un par de pasos hasta llegar a la parte baja de las escaleras, pero mis piernas flaquearon y caí de rodillas. Las lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas mientras alzaba mi mano para alcanzar mi antigua maleta robada, completamente rota por los golpes recibidos en la caída por las escaleras. Sin embargo, parecía que estaba prácticamente vacía. Levanté la vista para mirar a Hea, furiosa. A partir ahí, todo pareció empeorar por momentos.

Observé cómo la asquerosa chica iba cogiendo una a una las prendas que una vez habían sido mías, y las rasgaba con ira con unas tijeras, para después tirarlas en mi dirección. Intenté levantarme para coger alguna de las cosas que me lanzaba sin piedad, pero no pude. No sabía si lo que más me dolía era el hecho de perder definitivamente mis pertenecías, o saber que fueron ellos los que me robaron absolutamente todo lo que me quedaba la noche que me fui de la casa que compartía con mi exnovio.

— ¿Qué es esto? —escuché la voz de Hea, sarcástica. A través de las lágrimas que empañaban mis ojos pude vislumbrar a la chica sostener la única foto que me quedaba de mi familia. Hice un esfuerzo para incorporarme, pero las rodillas me fallaron. Hea la estampó contra la esquina de la pared, haciéndola añicos, y lanzó el marco en mi dirección. No conseguí apartarme, por lo que golpeó mi hombro. Aun así, no me inmuté. El dolor físico no era, en absoluto, prioritario en esos instantes.

Noté la presencia de Jungkook a mi lado. Sentí las manos del chico rozar mi cara, pero me aparté bruscamente. No sabía con cuál de ellos estaba más furiosa.

— ¡Oh! Hay más cosas —dijo ella tras tirar en mi dirección el resto de la ropa y las cosas que había guardado en la maleta la noche de mi huida—. ¿Sabes qué es esto, querida Hailey?

— ¡Te lo advierto! ¡Te echaré de esta puta casa! —escuché lejana la voz ronca de Namjoon.

Yo la miré, esperándome cualquier cosa. Sin embargo, sostenían una pesada caja de metal que no supe reconocer. Ladeé la cabeza con lentitud, sin entender qué era. Miré su cara un segundo, dándome cuenta de lo mucho que Hea estaba disfrutando aquel momento.

— Las chicas tenemos que apoyarnos, ¿verdad? Tienes que conocer la verdad, encanto... —su voz sonaba como un eco en mi cabeza que punzaba mis sienes.

Vi cómo abría la caja y la lanzaba en mi dirección. Vi también la cara de Jungkook delante de mí. Abrí los ojos de par en par al darme cuenta de lo que el chico iba a hacer era interponerse entre la pesada caja y mi cuerpo. Él hizo una terrible mueca de dolor, a la que yo inmediatamente respondí tirando de él para apartarle de la zona de conflicto. Aun así, no fui lo suficientemente rápida: la caja ya se había chocado contra su espalda, y realmente parecía haber sido un duro golpe. Namjoon corrió en nuestra dirección e intentó ayudar a Jungkook.

Con todo aquel revuelo, aún no había prestado atención al contenido de la caja —que se había esparcido a mi alrededor—, pero uno de aquellos papeles que me rodeaban captó mi atención.

Abrí los ojos de par en par y agarré la fotografía para ponerla delante de mis ojos, sin creerme realmente lo que estaba viendo. Se trataba de una imagen tomada tras la ventana de la antigua habitación que compartía con mi exnovio, en la que salía sobre él y completamente desnuda. Mi cara en aquella polaroid lo decía todo. Estaba en pleno acto sexual. Me temblaron las manos de pura ira.

— ¡¡¡V!!! —grité notando que mi garganta se desgarraba.

— ¡¡¡Eso es, zorra!!! —contestó Hea y comenzó a reír a carcajadas, claramente satisfecha con aquella situación—. ¿Te has dado cuenta? No eres tan corta de mente como pensaba, entonces... —hizo una pausa. Yo la escuchaba a la lejanía mientras buscaba con las manos todas y cada una de las fotos y las recogía, sintiendo más vergüenza a cada segundo que pasaba. Metí las que pude en uno de los bolsillos de mi pantalón—. V ha estado acosándote durante un año.