Capítulo 19. "Huyamos"

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Camila cerró la puerta de su departamento con fuerza. Tiró las llaves de este muy lejos. Se quitó los tacones y caminó descalza para luego tirarse de espaldas a la cama. Cerró los ojos. Y Lauren estaba ahí. En su cabeza. Rondando como siempre en estos últimos tres días. Respiró hondo, exhalando aire.

- Te odio. - susurró en medio de la noche. Alcanzó una almohada con las manos y la estrujó lo más que pudo. - te odio... - susurró de nuevo. Aunque por dentro, estuviera sintiendo otras cosas... y no exactamente lo que acababa de decir.

El móvil empezó a sonar dentro de su bolso. Al observar y percatarse que no era Lauren, contestó.

- Hola Chris. - le saludó cerrando los ojos y tirándose en la cama de nuevo.

- ¿Mal día?

- No tienes idea...

- Podemos solucionarlo. - sonrió al otro lado de la línea. Camila abrió los ojos. - si tu novia te deja, claro.

- ¿Mi...qué? - puso los ojos en blanco. Otra vez. Una imagen de Lauren ocupando su mente. - claro que no... no es mi novia. - se puso de pie y empezó a caminar descalza por toda la habitación.

- Eso me dijo ella.

- Es una idiota. - respondió después de varios segundos. Observó desde la puerta de su habitación, las ventanas de su balcón...

- Pienso lo mismo.

Ella se rio en el teléfono al mismo tiempo que negaba con la cabeza.

- Entonces... ¿paso por ti?

- Sí, ven si qui... - de pronto, un ruido proveniente de su balcón. Camila agudizó el oído y corrió hasta las ventanas abiertas de este.

- ¿Mila? - preguntó Chris, aún en línea.

- Hola. - le saludó Lauren, desde su balcón. Camila entreabrió los labios. ¿Pero qué creía? ¿Qué todo lo iba a arreglar de esa forma? La ignoró y siguió hablando con Chris desde el móvil, dándole la espalda.

- Ven, te espero. - continuó Camila.

- Vale, iré por ti ahora mismo. - una sonrisa se formó en los labios de Chris, al mismo tiempo que cortaba la llamada. Camila tiró el celular hasta su cama.

- ¿Te vas? - Lauren cruzó los brazos, aún sin adentrarse a la habitación.

- Sí. - le respondió ella. Caminó hasta su armario y empezó a buscar lo que se pondría en un momento para salir con Chris.

- ¿Y vas a dejarme aquí?

- No sé para qué has venido.

- No iba a dejarte ir sola.

- Por última vez, sé cuidarme sola. - se volteó. Lauren le dedicó una bonita sonrisa. Ella blanqueó los ojos y volvió a darle la espalda. Y ella no perdió el tiempo. Se fijó en su precioso culo. En sus largas piernas. En su caderas. En su cintura. En su fina espalda. En ese bonito cabello que le llegaba hasta más allá de la cintura. Se mojó los labios y aprovechó en buscar un cigarrillo en el bolsillo interior de su cazadora.

- ¿No vas a darme las gracias? - encendió el cigarrillo y guardó el cilindro de gas y la cajetilla en su bolsillo de nuevo.

- ¿Por qué? No te debo nada.

- Me debes la vida, gatita.

- Y deja de decirme así.

- Vale, vale... como digas gatita.

Camila se volteó de nuevo. La miró mal, y peor... al darse cuenta que fumaba en su habitación.

- ¿Qué haces?

- ¿Fumo? - le respondió ella, alzando los hombros.

- No se fuma en mi habitación.

- Estoy en tu balcón. - le sonrió e inhaló humo para luego dejarlo salir poco a poco.
Camila caminó a pasos firmes hasta Lauren. Frente a frente. Se dio cuenta que era pequeña a su lado y sin tacones. Que frío hacía en el pequeño balcón. Y cuando estuvo a punto de hablarle... Lauren soltó un poco del humo que quedaba en su garganta hacia afuera.

- ¡Perra! - le gritó tosiendo. Se tapó la nariz con las manos. - vete ahora mismo.

- Vámonos juntas. - dejó caer el cigarrillo al suelo y rodeó la cintura de Camila con los brazos.

- Suéltame... - susurró ella. Tratando de demostrar seriedad, pero cuando menos lo notó... soltó una pequeña risita que hizo que Lauren sonriera también.

- Quiero irme contigo. A donde tú quieras, solo para que me perdones, Camz.

- Acabo de quedar con alguien... - trató de empujarla, pero los fuertes brazos de Lauren la apretaron fuerte hacia ella de nuevo. Se unieron. Juntas. Los centímetros se adherían gracias a sus respiraciones. - además tú te has portado muy mal conmigo. - la miró a los ojos tiernamente. Lauren tragó saliva. Jamás había visto a una mujer haciendo ese tipo de miradas. De esas que le derretían el corazón y le hacían vulnerable en el punto máximo.

- Tenía miedo de que te hicieran algo. Temía por ti, ¿es eso malo? Si estoy en la calle y veo a una chica como tú pasar... no dudaría en follarte. - trató de alcanzarle los labios con la boca. Pero ella se hizo para atrás.

- No me ayudas.

- Escápate conmigo gatita. - le volvió a pedir. Camila sintió que moriría. Que cada palabra, cada letra que salía de sus labios le hacían ser más y más débil. - será solo por una noche.

¡Llegamos a las mil vistas! Muchísimas gracias a cada persona que me ha ayudado a hacer crecer este proyecto, a cada uno de los que dedican un par de minutos de su tiempo al día para leer los nuevos capítulos, no saben cuánto significa para mí el que les guste está historia tanto cómo a mi.

Éste capítulo es dedicado a YoQueSe43, mi Pau, gracias por apoyarme tanto.💕

— Sof.

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