¿Han tenido ganas de mandar todo a la mierda?
¿Han tenido ganas de rajarle el cuello a alguien? Y ver como se esparce la sangre...
En la tortura empezaría por cortarles los dedos, tanto de manos como pies, hacer cortes en diferentes partes, pero no vitales, en lugares donde le duela y sangre más, aun no quiero verlo muerto, luego acuchillarle el estómago y cuando me aburra de escucharle gritar le cortaría la lengua para posteriormente cortarle las cuerdas vocales y sacarles los ojos, y luego si es posible... Coserle la boca. Para dejarlo morir desangrado. :)
La única respuesta a mi autocontrol es gracias a que la idea de ver el piso manchado con sangre, me tranquiliza.
A veces me gustaría sacarle los ojos a alguien y ver como agoniza. El problema es que no sabría por quien empezar :)
¿Sadico? No.
Solo digo lo que en verdad tengo ganas de hacer, de sentir.
El que alguien suplique por su vida, alguien que me ha hecho daño, alguien que me ha hecho dudar. Pero por sobre todo alguien que me ha hecho matar.
Las ganas de querer darme la vuelta y arrancarles la cara, para luego patearlos y que tosan sangre en el suelo, me hacen ilusión. La ilusión de sacar todo lo que he aguantado, perdonado y odiado...
La sangre es hermosa, la maravillosa idea de verla caer al piso en pequeñas gotas que se esparcen creando un charco rojo que cada vez se hace más grande y el color toma más intensidad.
Las ganas de salpicar la sangre a las paredes de un lugar al que todos están viendo, para dejar en claro lo que esta a punto de pasarles, eso sería increíble.
Tanto como ver a la gente siendo torturada y pagando por lo que ha hecho, pagando de la peor forma posible.
Acabar con mis enemigos y con las personas deteriodadas de alma y corazón
Sería... Paz.
Para mí y
Para mi mente.
La sangre se ve deliciosa.
Sangre, más sangre.
Rojo, más rojo.
Muerte, más muerte.
-J
