IRRESISTIBLES

CAPÍTULO 2

-¡Vamos!- grita Mery por encima de la música mientras me arrastraba a la pista de baile.

-¡ No quiero bailar de verdad! ¡ No sé bailar!- grité

Nos encontrábamos en una discoteca. Tayler también vino con nosotras pero él se encontraba en la barra bebiendo chupitos, uno tras otro. Ya hablé con Sami sobre Mery, me dijo que no le dijera nada y que esperara asta que todos los malditos problemas que tengo se resuelvan. Si Mery se entera de quien soy correrá peligro. Y no quiero que le pase nada.

-¡No importa, lo que importa es que te tienes que divertir !- dice ella mientras movía sus caderas de un lado a otro al ritmo de la música.

- ¡ No, mejor me voy a cuidar a Tayler! -señalé a Tayler.

-¡Esta bien!

Me dirigí a él, rápidamente para quitarle de las manos la cerveza. Creo que ya ha bebido demasiado por hoy.

-¡Eh! Eso es mío, devuelvemelo- dice mientras me lo intenta quitar, pero está tan borracho que ni siquiera puede mantener el equilibrio.

- No, ya has bebido demasiado.- dije y veo como suelta un puchero. Sé porque bebe tanto, sé que quiere olvidar algo, pero no sé el qué- No es la mejor forma de olvidar las cosas Tayler.

Al escucharme, su vista se enfocó en mí. Me miraba con tristeza, como si me estuviese diciendo que ya no podía más, que ya no aguantaba más.

-Para mi, sí que es la mejor forma Lily. Y si no me devuelves la botella pediré otra, no me cuesta nada.- su voz se volvió fría. Yo no insisto y se la devuelvo.- Gracias.

No le respondo, solo me quedo mirando como bebe su cerveza.

- ¡Lily!- gritó Mery acercándose.

- ¿Que sucede?

- Vámonos, Bruno nos está esperando afuera. Quiere llevarnos a algún sitio.- dijo con una sonrisa en su rostro.

-Esta bien. Tengo muchas ganas de conocer a ese tal Bruno- le guiñe un ojo y ella sonrió.

Dirigí mi mirada a Tayler, seguía borracho. Caminé a él, lo cogí del brazo y lo arrastre conmigo y con Mery asta la salida.

-¿Que pasa?- dice Tayler mirándome y caminando con dificultad.-¿Dónde vamos?

-A ningún lugar, te llevaremos a casa Tayler.

Se deshace de mi agarre y corre a un rincón. No sabía que quería hacer hasta que lo vi vomitando. Corrí hacia él y aguanté su cabeza para que no tenga dificultad.

- Mery.- la llamé mientras Tayler vomitaba con dificultad.

-Dime

-Déjame el coche, tu vete con Bruno y yo llevaré a Tayler a casa.- Mery asintió y corrió a por el coche.

- No quiero irme a casa ahora Lily- Balbucea.- quiero bailar y olvidarme por un momento mi mierda vida.- sus ojos estaban cristalizados.- No quiero vivir,me quiero morir ya. - una lágrima se deslizó por su pómulo.

-Te irás a casa, te darás un baño y te acostarás a dormir. Y, mañana tu y yo hablaremos.- me miró a los ojos, sus ojos estaban apagados, como si no tuvieran vida. Allí me doy cuenta de que él si lo paso mal, verdaderamente mal.

-Ya llegué- dijo Mery detrás de nosotros.-Iré con vosotros, le diré a Bruno que ya quedaremos otro día.

-No Mery, vete si quieres, no hay problema- dije mientras pasaba el brazo de Tayler al rededor de mi cuello para ayudarlo a caminar.