CAPÍTULO 3

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Alex

No me puedo creer que sea la enana de ayer, la que me dio una patada en mi entrepierna. Desde ayer, estuve pensando lo que le haré. No me cansaré hasta hacerla sufrir. Nadie se mete con un Woodley y menos una enana.

- Lo que faltaba - susurra girándose y entrando en casa. Entro a casa y cierro la puerta detrás de mi.

- Porfín te encuentro enana- se giró mirándome con los ceños fruncidos y sus manos formados en puños. Sonrío en mi interior al ver su reacción, pero me mantenía serio en frente de esta enana.

- Me parece que no aprendiste la elección- dijo cruzando los brazos.

-Mira enana de mierda, a mi nadie me habla así, y será mejor que andes con cuidado conmigo. - me acerqué a ella. Ella seguía en sus sitio con los brazos cruzados.

Soltó una carcajada, yo la miré sin entender nada. La estoy amenazando y ella se hecha a reís. Genial.

-¿Me estas amenazando?- dice ella aún riendo.

La miro con los ceños fruncidos por el  enfado.

-Oh...Se supone que ahora tengo que tenerte miedo.-asiente con la cabeza mientras me mira.

-Se nota que no me conoces. Pero como te vuelva a cruzar por mi camino, te destruiré. Quien avisa no es traidor.-dije entre dientes.

-Uuh que miedo- dijo en un tono burón.- Creo que voy a cagar ahora mismo en los pantalones por el miedo que me das. Enserio.- suelta otra carcajada. Me quedo mudo, nunca nadie me ha hablado así. Hasta que ha llegado esta enana.

Camina al sofá, coge unas llaves, de un coche y su móvil.

Espera ¿Había puesto música?

Pues me acabo de dar cuenta, la paró, y se giró hacia mi. Caminó dirigiéndose a la puerta, pero se para enfrente mío, mirándome como si me diera lástima. Me da unos golpecitos en el brazo y sale cerrando la puerta detrás suyo.

Suelto un suspiro y me dirijo al sofá.

Zorra, todas son iguales. Son solo unas putas.

Después de unos minutos, Tayler sale del baño con una toalla que le rodea la cintura.

-¿Dónde esta Lily?- ese era su nombre, Lily.

-Se largó a su casa- dije levantándome para mirarlo.

- Mañana hablamos, quiero ir a dormir ahora. Me duele la cabeza y me siento muy mareado.- caminó a su habitación.

-No me extraña, siempre te emborrachas hermano y eso no puede ser. Tú no heras así, desde que murió M-

-No la nombres.- dijo entre dientes.

-¡Aceptalo de una puta vez! ¡No puedes estar siempre así!- grité- No puedes dejar que siempre que no esté te metan palizas colega. Se que fue duro para ti, al igual que para mi. Ella era como una hermana para mi Tayler.

Me apoye al arco de la puerta esperando que diga algo. Pero lo único que hizo es mirarme por unos segundos, caminó hacia a mí, me empujó y cerró la puerta.

Solté un suspiro y caminé al sofá.

No se para que me llama si al final no le he servido de nada, aparte de regañarle.

Ya han pasado dos años desde la muerte de su novia Michelle .

Tayler estaba muy enamorado de ella, al igual que ella de él.

Hace dos años, él tenía una pelea, ilegal, claro. Michelle no estaba de acuerdo con eso, siempre le decía que se alejara de esa mierda, porque al final acabaría mal. Le dijo que era la ultima vez que peleaba, que solo esa vez y ya, ella no estaba de acuerdo, pero como que solo era esa vez y lo dejará todo, pues estuvo de acuerdo.

IRRESISTIBLESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora