Capítulo 26

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Christian Grey

Estoy reunido con Barney cuando recibo la llamada de Taylor y siento cómo todo mi cuerpo se tensa en pensar que les haya pasado algo a mis amores.

-Barney, podremos continuar más tarde. -Me disculpo, antes de contestar la llamada.

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Llamada

-Grey. -Respondo ansioso.

-Señor Grey, disculpe que lo interrumpa, pero tenemos un código ámbar. -Dice, me levanto de un salto de mi silla al escuchar "Ámbar"

-¿Que ha pasado, Jason? Habla de una vez. -Apremio.-

-La señora Lincoln interceptó a la señorita Steele en el The Fairmont y tuvieron un enfrentamiento. -informa, todos mis músculos se tensa al pensar que Anastasia puede alejarse de mí y llevarse a mis hijos por sentirse amenaza por las palabras de Elena.

-¿Dónde está mi familia? -Preguntó con la rabia carcomiéndome por dentro. -Prepara el auto para salir. - digo antes de colgar.

Fin llamada.
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Camino hacia la salida y le hago un gesto a Andrea para verlo los documentos que me extiende más tarde. Presiono el botón del ascensor y desaparecer en las puertas de metal. Al llegar al estacionamiento entro sin decir palabras y nos ponemos en marca. Entramos al Escala con la ansiedad recorriendo mi cuerpo al pensar que podría perderlos. Miro la ciudad bajo mis pies y me embarga ese miedo a la soledad que siempre se adueño de mi vida por muchos años.

El pitido de la llegada del ascensor me saca de mis pensamientos y veo correr a mis pequeños hacia sus habitaciones acompañados de Marly. Camino al salón y veo a mi nena y su mirada está perdida en lo más profundo de sus pensamientos. No puedo permitir que se aleje de mí y me deje hundir en ese mundo de sombras,

-No lo hagas, nena. -Digo con voz temerosa: -levanta la mirada y se que mi mirada refleja mi miedo -No le des importancia a sus palabras, por favor, Anastasia. Camino con cautela con el temor de su rechazo. -Nena, por favor, háblame. -Suplico y mis ojos buscan en los de ella algo de esperanza.

Sus hermosos ojos azules me miran cristalizados y con la necesidad de ser protegida con mis brazos. Se lanza en mis brazos y la recibo feliz.

-Quiero ser lo que necesites y no quiero que busques en otro lugar los espacios que no puedo llenar. -dice con voz entrecortada. Sus palabras me sorprenden y sé que esas fueron las que uso Elena para hacerla sentir mal.

-¡Oh, nena! -Exclamo. - apretándola más fuerte a mis brazos. -Eres mucho más y solo te necesito a ti. Lamento tanto que hayas pasado este mal momento y todo por mi culpa. Inhalo con fuerza el aroma de su cabello.

-No, no es tu culpa, Christian. Solo necesito que me abraces, me beses y me hagas el amor. -suplica. -se separa de mí y me mira pidiéndome que la ame.

-Estoy para complacer, señorita Steele. -Sonrío y sé que puede ver mi felicidad en mis ojos. -Te amo, Anastasia.

-Yo te amo mucho más, Christian.- acerco mis labios a los suyos y la beso con la ternura que solo ella ha despertado en mí y la llevo en mis brazos para cumplir cada uno de sus deseos. Con cada caricia, beso y mirada le demuestro lo que ella significa para mí y lo que sería capaz de hacer por tenerla a mi lado.

-Solo la necesito a usted, mi querida señorita Steele. -Confieso entrando despacio en su interior haciendo que cada vello de mi piel se erice de la intensidad del sentimiento que solo ella provoca en mí. Sus pequeñas manos se aferran arañando toda mi espalda, tras las violentas embestidas por la pasión, el amor y la lujuria que me hace sentir.

***

Llamo a mis abogados para que embarquen al Esclava y todas sus sucursales por la deuda que tiene Elena Lincoln con empresas Grey. Esa carta la tenía guardada para el mejor momento y este es. El auto se detiene en la entrada del Esclava. Entro por la puerta de Cristal y todos los ojos se posan en mi. Greta salta de su silla para situarse a mi lado.

-Señor Grey, qué agradable sorpresa. -Dice. Con sus mejillas sonrojadas.

-¿Dónde está la señora Lincoln? -Preguntó con frialdad. Da un respingo al escuchar mi tono gélido.

-En.. su oficii... ina, señor. -Tartamudea. -me giro sobre mis talones hacia la oficina seguido de Taylor. Entro sin tocar y su sonrisa se instala en su rostro. Se levanta de su asiento para llevar a mi y levanto la mano para detenerla.

-Christian, querido, qué sorpresa más agradable. -sonríe disfrutando verme frente a ella, pero de inmediato se borra al ver mi expresión.

-Elena, al parecer las palabras no son las adecuadas contigo y es mejor tomar medidas extremas. -hablo con voz calmada pero por dentro quisiera arrancarle la cabeza.

-Christian, yo solo quiero recuperar tu amistad y sé que ella no es buena para ti. -Se justifica.

-Como no has entendido mi mensaje y te has atrevido a molestar a mi madre y no te bastó con eso y te atreviste a acercarte a Anastasia y a mis hijos. -me interrumpe.

-Los patéticos escoltas de tu caza fortuna te fueron con el chisme y vienes aquí a reclamarme. Solo le dije la verdad, Christian, tienes necesidades y esa niña tonta no te las podrá saciar. -intenta tocarme y mi mano la detiene antes de lograr su objetivo.

-No vengo a reclamarte, Elena. Vengo a darte 12 horas para que abandones el país o de lo contrario todo se enteraran que sostienes una relación con Tom Arnold y por si no lo sabias es menor de edad y si por lo que me hiciste no fuiste a la cárcel por lo que me hiciste me encargaré que eso suceda. - le informo, mirándola fijamente sin mover ni un músculo de mi rostro.

-No tienes pruebas de ello. -Dice con miedo. - mi carcajada la hace retroceder y mírame como siempre quise que lo hiciera. "Terror, miedo, pánico".

-Tengo mucho más que eso, Elena. Mi familia es intocable. Jugaste con la persona equivocada y te lo digo por última vez. Tienes 12 horas para salir de los Estados Unidos o a las 12h y minutos todos sabrán y las 12h y dos minutos tendrás a toda la policía de Seattle sobre ti. -Digo, antes de girarme. -Ah, si intentas algo más lo sabré antes de que lo ejecutes.

Salgo del Esclava con la satisfacción de haber sacado de raíz la mala hierva. Ahora solo me queda hacer que donde ella se dirige tenerla bien vigilada y si quiera dar un paso falso haré que se arrepienta de haber nacido.

Al llegar al Escala me quedo en el umbral embobado por la hermosa imagen de mis hijos dándole amor a su madre y sus sonrisa irradian de felicidad todo alrededor. Eso es lo único que importa para mí, ver a mis pequeños y a mi nena sonreír por estar juntos.

-Papi. -Grita Phoebe corriendo hacia mi.- la recibo gustoso por estar con la princesa de papi.

-Princesa de papi, quiero que me des muchos besos y un fuerte abrazo por haberte extrañado tanto. Ríe y sus pequeñas manos toman mi rostro y empieza a dejar besos por todos lados. Haciéndome reír, disfrutando de la más grande demostración de amor que puede recibir jamás.

****

Dedico este capítulo para mi morena hermosa @MarlyHC.

Hoy cumpleaños una hermosa persona que posee tiene los más grades sentimientos, pero sobre todo un inmenso corazón que nos llene de alegría con una hermosa sonrisa.

Mi querida Marly, te quiero con todo mi corazón y que Dios te siga bendiciendo hoy mañana y siempre.

Te debo el capítulo de la bruja.

Nos leemos luego

Ojosgalanos!!

Las profundidades de un ser Gris.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora