Padres, carceleros, amigos y finales felices...

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La mujer de pelo blanco veía a su hijo revolviéndose en el pasto junto a Menfis

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La mujer de pelo blanco veía a su hijo revolviéndose en el pasto junto a Menfis. El canino al fin se había adaptado a las piruetas y maromeras de su hijo y sus amigos. Rose se rio a carcajadas cuando los cachorros se echaron a correr hacia el bosque seguidos por el escurridizo animal. Ambas suspiraron, evocando el consuelo de que los cachorros estarían a salvo.

-Fire esta cerca-. Dijo la mujer de aspecto tierno y corazón feroz. -El no dejara que nada les ocurra. De seguro ya lo han olido y quieren jugarle alguna broma. Los gemelos no se cansan de intentar atraparle. Fire dice que es bueno para ellos poner en practica sus instintos-. La alvina le sonrió. De una u otra forma, Rose se había convertido en una hermana para Crystal. Eran tan distintas una de la otra,  que nadie pensaría que pudiesen compenetrar de tal forma. Sin embargo, y no muy en lo profundo, ambas tenían el mismo valor y fuerza en el alma.

-Lo se. Papá y yo teníamos que correr con el por el bosque, el nunca se sintió cómodo en el interior de la cabaña-. La mujer cambio sus semblante por uno triste. Rose frunció el ceño. Crystal le sonrió con tranquilidad. -En ocasiones soñaba con las especies, ¿Como se sentirían ellos en una maldita celda durante toda su vida?...-. La mujer a su lado levantó una ceja y Crystal le sonrió, mientras sus mejillas se teñían de rojo. -Tengo mis momentos de rebeldía-. Le dijo encogiéndose de hombros. Rose se hecho a reír y la alvina golpeo su brazo. -En fin. En ocasiones me despertaba gritando por la desesperación de verles encadenado sin poder ayudarles... Cedar me dijo que era uno de los machos en el programa de reproducción de Merceli. No se como me sentí al respecto. No te negare que en ocasiones he estado frente a una hembra preguntándome ¿Seria ella una de las hembras con las que mi compañero se acostó?-. Dijo la alvina con la cabeza gacha. la mujer a su lado abrazo sus hombros en apoyo.

-Hay cosas peores, Crystal. La mayoría de los machos preferían ser golpeados que hacer sufrir a cualquiera de las hembras. Con frecuencia les daban palizas monumentales y luego les drogaban. Cuando despertaban apenas recordaban lo ocurrido mientras había una hembra apenas con vida en su celda que les miraba con terror...-. Crystal jadeo. Rose gruño de ira. -Esos hijos de puta merecen ser castrados y darles de comer sus propias pollas-. Crystal torció el esto.

Cedar. Nuevas Especies. Libro 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora